La soberanía Argentina sobre Malvinas
El nombre original del Puerto Soledad era Nuestra Señora de la Soledad, que es declarada patrona de dicho puerto. Casi nunca falto asistencia espiritual en las islas. Durante el transcurso del gobierno español, actúo hasta 1810 Fray José Zambrano y le sucedió el presbítero Juan Casona, que permanece en puerto Soledad hasta 1811.
La soberanía Argentina sobre las Islas Malvinas empezó a ejercerse con la Revolución del 25 mayo de 1810.
Una de las primeras medidas adoptadas por la Junta de Gobierno consiste en el despacho de un expediente relacionado con la solicitud de sueldos complementarios del capitán Gerardo Bordas, que fue el ultimo gobernador español de las islas Malvinas. El documento esta suscripto por Cornelio Saavedra, presidente de la Junta y el secretario Juan José Paso, con fecha del 30 de mayo de 1810.
Consta un pedido realizado por Enrique Torres, con fecha del 13 de enero de 1813, para cazar lobos marinos en las islas con el bergantín «el Rastrero».
En 1816, el ministro de guerra interior Beruti remite un oficio al General San Martín gobernador de Cuyo, pidiéndole el envío de presos para mandarlos a las islas Malvinas.
El barco argentino dedicado a la pesca de focas, llamado Espíritu Santo, viaja a las islas en la primavera de 1818. Se abastece en Puerto Soledad y prosigue luego a la isla Decepción, situada en la Antártida.
Otro dato importante que muestra que las islas estaban habitadas y tenían medios adecuados, es el episodio del barco francés Uranie, al mando del capitán Freycinet, que naufraga en febrero de 1820, al noreste de la isla Soledad; la tripulación se salva por la ayuda prestada por la población de Malvinas quienes les facilitan una nave para llegar a Montevideo.
Cuando se sabe en Buenos Aires el estado penoso de las islas por la caza indiscriminada de focas y lobos marinos que realizan barcos extranjeros, el Director Supremo José Rondeau ordeno la partida de un oficial para que se haga cargo del gobierno de las islas.
Esta misión le es asignada al coronel de marina David Jewett, corso norteamericano que estaba al servicio del gobierno argentino.
Jewett al mando de la fragata Heroína, entra en la bahía Anunciación el 27 de octubre de 1820. Decide proceder con firmeza, cuando comprueba la enorme cantidad de barcos dedicados a la caza clandestina.
El 6 de noviembre toma posesión de las islas Malvinas izando el glorioso pabellón argentino. Reúne a los comandantes de los buques que estaban fondeados en los alrededores y les lee la siguiente proclama:
«Tengo el honor de informarle que ha llegado ha este puerto comisionado pro el Supremo Gobierno de las Provincias Unidas de América del Sur, para tomar posesión de las islas en nombre del país a que estas pertenecen por ley natural. Al desempeñar esta misión deseo proceder con la mayor corrección y cortesía para con todas las naciones amigas. Uno de los principales objetivos de mi cometido es evitar la destrucción desatentada de las fuentes de recursos necesarios para los buques que de paso o recalada forzosa arriban a la isla»
Los comandantes extranjeros acataron las ordenes impartidas por Jewett. En su libro «Un viaje al Polo Sur» el capitán James Weddell afirma que viajo a pie desde San Salvador a Puerto Soledad y visito al comandante Jewett, quien lo recibió con gran amabilidad y adoptando actitudes de autoridades superiores a las que el viajero imaginaba.
El gobierno ingles no presento reclamo alguno, dando por sentado, de esa manera que reconocía la soberanía Argentina sobre la s Islas Malvinas.
En 1823 es designado nuevo gobernador al comandante Pablo Areguati, oficial de raza indígena que había sido educado por los Jesuitas y a quien el General Manuel Belgrano nombro alcalde de Mandisovi, Corrientes, durante su campaña en el Paraguay.
Ese mismo año el general Martín Rodríguez, gobernador de Buenos Aires con la finalidad de darle impulso a la colonia de la isla Soledad, concede treinta leguas de tierra y derechos exclusivos de pesca a don Jorge Pacheco. El comandante Areguati ejerce su cargo hasta el año 1829.
El 10 de junio de 1829 el general Martín Rodríguez nombra a don Luis Vernet gobernador de las Islas Malvinas. «Vernet nació en Hamburgo en 1791; siendo adolescente se traslado a Estados Unidos de Norteamérica donde inicio actividades comerciales. Viajo a piases de Europa y América con hombres de negocios dedicados a las actividades marinas y en 1817, llego a Buenos Aires. Dos años después se caso con María Saez, de origen uruguayo»
Tuvo importantes actividades comerciales con Jorge Pacheco, por eso, cuando Pacheco obtiene derechos de pesca en Malvinas, ambos celebraron un convenio.
Según esto Vernet percibe en pago la mitad de la concesión y constituye una sociedad, cuya concesión queda a cargo de Vernet. Pacheco debía reparar los edificios y baterías de Puerto Soledady dejarlos a disposición de las autoridades argentinas. El ganado de la isla era montaraz y, por lo tanto era necesario llevar peones, caballos y herramientas; ya los beneficios comerciales provenían de los cueros y carnes del ganado vacuno.
Vernet contrata un bergantín y lleva gauchos escondidos en las bodegas. Estamos en enero de 1826 (guerra con Brasil) así que el barco debe burlar el bloque naval brasileño, par luego poner proa al sur. Vernet tiene muchas dificultades, pero finalmente llega a Malvinas en el mes de junio. La mayor parte de los caballos que llevaba había muerto en el largo viaje. El frío reinante atemoriza a los gauchos que se niegan a desembarcar