Capítulo V – Las negociaciones a partir del día 02 de abril de 1982 (1)
II Parte –Antecedentes del conflicto
Capítulo V – Las negociaciones a partir del día 02 de abril de 1982 (1)
285.
En las primeras horas del día 02 de Abril la opinión pública argentina
fue sorprendida por la noticia del desembarco de fuerzas militares
nacionales en Puerto Stanley. La recuperación se consolidó en pocas
horas con la toma de los principales objetivos de la ciudad. La fuerza
de ocupación detuvo al Gobernador británico y rápidamente ejerció el
control en todo el Archipiélago.
286. Pasada la sorpresa
inicial, se extendió por todo el país un sentimiento generalizado de
júbilo y exaltación patriótica. Con ese acto, la nación reivindicaba un
objetivo histórico y mostraba su determinación de hacer respetar sus
derechos sobre un territorio irredento. Además, estas justas
aspiraciones habían sido reconocidas sucesivamente por las Naciones
Unidas a partir del año 1965 siendo sistemáticamente resistidas por Gran
Bretaña (Capítulo II).
287. Al cabo de diecisiete años de
infructuosas negociaciones y 149 de reclamaciones, la ocupación militar
se daba como un recurso extremo para denunciar y comprometer ante el
mundo a una potencia colonialista que se negaba obstinadamente a
negociar con seriedad el futuro de las Islas, desconociendo los
documentos emergentes de la opinión internacional, expresados a través
de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
288. En la
mañana del 02 de Abril, el Presidente Galtieri informó la novedad al
Gabinete Nacional reunido en pleno, mientras los Comandantes de la
Fuerza Aérea y la Armada hicieron lo propio en sus respectivas fuerzas.
El Doctor Costa Méndez realizó un análisis del apoyo que podía esperarse
en el Consejo de Seguridad (Anexo V/1) (Ver declaración Gral. Saint
Jean).
289. El 03 de Abril, antes de la promulgación de la
Resolución 502 (Capítulo II), las Islas Georgias fueron ocupadas por
fuerzas argentinas, tras una resistencia de la guarnición británica (22
hombres) según fue relatado en el Capítulo IV.
290. Los medios
masivos de comunicación difundieron profusamente imágenes de la
ocupación y propalaron desde las Islas categóricas declaraciones de
autoridades militares y miembros del gobierno nacional, que alimentaron
en la opinión pública la convicción de una ocupación irreversible y,
prácticamente, sin condicionamientos.
1.Gran parte de los
documentos consultados, especialmente resúmenes de conversaciones,
llamadas telefónicas, etc., son transcripciones de cintas magnetofónicas
que no se encuentran en poder de esta Comisión o de apuntes y
anotaciones personales cuyo valor testimonial no puede ser juzgado.
291. El pueblo acompañó sin retaceos la decisión de la Junta Militar,
mientras que los medios de comunicación, por su efecto multiplicador y
por la calidad de la evaluación realizada sobre las posibles
consecuencias de la medida adoptada, contribuyeron a una pérdida
generalizada de la objetividad. Ante esta euforia nacional, el gobierno
vio disminuida su capacidad de analizar reflexivamente la realidad, lo
cual habría de tener, más adelante, un peso considerable en el
desarrollo de las negociaciones (Capítulo VII).
292. La
reacción de Gran Bretaña fue inmediata. Los servicios de inteligencia
británicos habían alertado que estaba en marcha la operación para la
toma de las Islas. En el campo militar, anticiparon, según informaciones
ulteriores, el envío de submarinos nucleares (probablemente dos) que
habían partido hacia el Atlántico Sur para reforzar las naves destacadas
previamente con motivo del incidente de las Islas Georgias del Sur.
El 03-ABR-82, la Sra. Thatcher se presentó al Parlamento y obtuvo la
aprobación para el envío de la mayor parte de la flota británica
(aproximadamente 40 buques de guerra con la misión de recuperar la
posesión de las Islas). El xx-ABR los principales navíos de la Fuerza de
Tareas (Task Force), comenzaron a zarpar de los puertos ingleses. Sobre
la marcha, la Flota se integró con transportes de tropas, buques
hospitales, buques de abastecimiento y talleres flotantes, llegando a
disponer de un total de más de 120 unidades (Anexo V/2).
293.
El día 04 de Abril, el gobierno británico obtuvo la autorización y apoyo
de los EE.UU. para el uso de la base aeronaval de la Isla Ascensión,
que habría de convertirse en el principal punto de apoyo para todas las
operaciones navales y aéreas en el teatro de operaciones, y que haría
posible la presencia de la «Task Force» en el Atlántico Sur.
294. En el campo diplomático, Gran Bretaña actuó rápidamente en tres frentes principales:
a. En EE.UU.: el 01-ABR por la mañana, el embajador Henderson había
informado al General Haig que los servicios de inteligencia británicos
aseguraban que estaba en marcha una invasión argentina al Archipiélago
Malvinas. Requirió la intervención de EE.UU. y consideró los eventuales
apoyos para el futuro en caso de conflicto.
b. Naciones Unidas:
el 02-ABR, el embajador británico Anthony Parsons -quien el día
anterior había solicitado y obtenido una declaración del Consejo de
Seguridad instando a evitar un eventual empleo de la fuerza o la amenaza
de su uso en el área de las Islas Malvinas- solicitó la convocatoria
del Consejo de Seguridad y logró que este organismo emitiera, al día
siguiente, la Resolución 502 que exigía el retiro inmediato de todas las
fuerzas argentinas de las Islas (Capítulo II).
c. En la
Comunidad Económica Europea (C.E.E.) y países integrantes de la
O.T.A.N.: los países de la Comunidad Económica Europea condenaron por
unanimidad, la intervención armada el mismo día en que ésta se produjo.
Los gobiernos de los diez países aplicaron, a requerimiento de Gran
Bretaña, un embargo completo sobre la exportación de armamentos con
destino a Argentina, y desde el 14-ABR hasta el 17-MAY establecieron una
prohibición a las importaciones argentinas, con excepción de aquellas
que, a esa fecha, ya hubieran sido despachadas.
295. Después
de la Resolución 502, el Canciller Costa Méndez y la delegación
argentina dirigieron sus esfuerzos para comprometer el apoyo de la
O.E.A. y de los países «No Alineados». El 05 de Abril, en un discurso
ante la OEA el Canciller fundamentó la actitud argentina (Anexo V/3).
El 06 de Abril el General Haig se reunió con el Doctor Costa Méndez para ofrecer la asistencia de EE.UU. (Anexo V/4).
296. El Secretario de Estado ACLARÓ QUE EE.UU. NO OFRECÍA MEDIACIÓN NI
BUENOS OFICIOS SINO, SIMPLEMENTE, UNA CUESTIÓN DE ASISTENCIA A LAS
PARTES para la búsqueda de una solución pacífica de la controversia.
297. Con esta gestión se materializó la apreciación previa de nuestra
Cancillería, en lo referido a la posición que asumiría EE.UU. cuando se
produjese la reocupación argentina de los archipiélagos. En ese sentido,
en su declaración ante esta Comisión, el Doctor Costa Méndez dijo:
«Con relación a la intervención militar de Gran Bretaña, yo no tenía dudas de que se iba a producir».
«Cuáles son los dos hechos que a mí, personalmente, como Ministro y por
lo tanto como asesor del Poder Ejecutivo, me llevan a pensar que no hay
otra salida de esta situación que la ocupación, con todas las
limitaciones y los inconvenientes que surgían de esta situación: una, la
confianza en la mediación. Es decir, yo estaba convencido de esa
posibilidad, y lo estaba en el Ministerio y creo que también el Poder
Ejecutivo».
«Insisto en esto: en que yo estaba convencido de la
posibilidad y de la eficacia de la mediación norteamericana; nunca de
la intervención bélica a nuestro favor. Eso nunca. Pero sí la
mediación».
«Entonces, le expongo a Enders la cuestión Malvinas y le digo: Y ustedes, ¿qué van a hacer si esto llega a una confrontación?».
«-Pero esto no va a ocurrir».
«-No sé -le digo- qué puede ocurrir. Es de recordar que todavía no se
había producido Davidoff, y que nosotros estábamos en el plan que acabo
de relatar, de largo plazo».
«-Y, entonces, nosotros, en ese caso: «hands off», e hizo un ademán así, con las manos. Es decir, no nos vamos a meter».
«Sobre esa base, sobre la base de una conversación muy escueta con la
señora Kirkpatrick y sobre la base del análisis de la conducta americana
que hicimos, en función de la historia de su intervención de
Latinoamérica, en ese momento, llegamos a esta conclusión: que no iba a
intervenir y que sí iba a intentar mediar».
298. Los estrechos
vínculos de distinto tipo entre EE.UU. y Gran Bretaña permitían dudar
sobre la imparcialidad de la posición que el primero adoptaría en una
eventual gestión negociadora y, por supuesto, hacían descartar una
participación favorable a nuestro país. Esto es conocido por el ex
Canciller en su declaración, cuando:
«PREGUNTADO: ¿Admite usted
que, tanto la Junta como usted, se equivocaron en la apreciación de la
actitud de Estados Unidos? Teniendo en cuenta la vinculación de
Inglaterra y Estados Unidos por el origen, la descendencia, las
relaciones económicas y, quizás, el idioma también -todos esos vínculos
que siempre han unido a Estados Unidos con Inglaterra, inclusive en las
últimas guerras mundiales y ahora en la NATO- ¿no configuró ello un
telón de fondo para apreciar la actitud probable de Estados Unidos?».
«DIJO: La pregunta es crucial y muy importante. Nosotros teníamos la
seguridad, dentro de lo que se puede tener seguridad en los hechos
humanos, en los hechos políticos y en los hechos internacionales, de que
Estados Unidos habida cuenta, sin embargo, de todos los elementos que
en la pregunta se han descripto tan bien y con tanta verdad, por cierto
-y que podían inclinar a Estados Unidos hacia Gran Bretaña- nosotros
pensamos y teníamos la convicción de que Estados Unidos iba a intentar
enérgicamente una mediación y que, antes de inclinarse a un lado, iba a
intentar enérgicamente una negociación».
Sin embargo esa
«enérgica negociación» que intentaría EE.UU., hubiese requerido mutuas
concesiones de las partes, basadas sobre su voluntad e intereses pero,
fundamentalmente, sobre los intereses de EE.UU. y la presión que éste
hubiese podido ejercer.
Esto fue considerado expresamente por
la Cancillería (Anexo V/5) en un análisis sobre la «Gestión de
Asistencia de EE.UU.», que incluía las perspectivas que Argentina debía
enfrentar en las negociaciones.
De éstas se desprende que el
límite de presión que EE.UU. podría ejercer sobre Gran Bretaña, lo
constituía la estabilidad del Gobierno conservador. Si a ello se suma la
conocida situación de política interna que enfrentaba dicho gobierno
-etapa de menor popularidad del período de Margaret Thatcher- fácil es
concluir que EE.UU. tenía un escaso margen para ejercer su «presión».
Por el contrario, las posibilidades de presión sobre el gobierno militar
argentino eran superiores -independientemente de que las autoridades
del momento no lo hayan considerado así- y, en caso de deterioro de
relaciones, los problemas resultarían menores y las correcciones más
factibles.
299. En los primeros días de abril, Argentina obtuvo
una declaración del Buró de Coordinación de los países «No Alineados»
que exceptuaba a Malvinas y a Gibraltar del principio de la
autodeterminación (Declaración Dr. Roca).
300. El 07 de Abril,
el General Menéndez asumió la gobernación de las islas, acompañado por
un reducido gabinete. Al respecto, en su declaración, el ex Canciller
expresó que la designación de un gobernador no era conveniente, por
cuanto contradecía la idea de «ocupar para negociar» reflejando la
intención de mantener definitivamente el dominio de las Islas. (1)
Intervención del general Haig. Su primer visita a Buenos Aires
301.
Ese mismo día, el General Haig inició su gestión de asistencia y viajó a
Londres para entrevistarse con las autoridades británicas. Al día
siguiente, Gran Bretaña notificó, a través de la Embajada de Suiza en
Buenos Aires, el establecimiento de una zona de exclusión marítima en un
círculo de 200 MN de radio, con centro en las Islas Malvinas, a partir
del 120400-ABR/82 (Hora de Greenwich) (120000-ABR-82 Hora Argentina)
Anexo V/6).
302. Después de una extensa conversación con la señora Thatcher y el
Canciller Francis Pym, el General Haig viajó a Buenos Aires, adonde
arribó en las últimas horas del día 09 de Abril.
Al día siguiente mantuvo una larga entrevista con el Presidente Galtieri y el Doctor Costa Méndez. (Anexo V/7).
303. Ese día, 10 de Abril, se concentró una gran multitud en Plaza de
Mayo en apoyo de la ocupación de las islas. Después de la entrevista con
Haig, el Presidente Galtieri salió al balcón de la casa de gobierno e
improvisó una alocución en la que afirmó que la «dignidad y el honor de
la Nación no se negocian» y «si quieren venir que vengan, les
presentaremos batalla». Los Comandantes en Jefe de la Fuerza Aérea y de
la Armada, al igual que el Canciller, rehusaron su invitación para
acompañarlo en esa circunstancia (Anexo V/8).
304. Con estas
palabras, el Presidente definió un objetivo estratégico que debía
lograrse con la guerra. Se asumía ya un compromiso definitivo que
excedía el alcance de los planes que se trazaron previamente para la
acción militar. No se habían realizado previsiones para enfrentar una
respuesta militar de magnitud y cuando se advirtió la gravedad de un
compromiso que se contraía frente a la nación, se aceleró una carrera de
improvisaciones para reforzar las islas y articular una estrategia
defensiva que antes no se había pensado como una posibilidad cierta.
1.El territorio correspondiente a Malvinas, Georgias y Sandwich del
Sur, fue retirado de la jurisdicción del Territorio Nacional de Tierra
del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur y constituyó una nueva
gobernación.
305. Ya el 08 de Abril, el Canciller informó al COMIL sobre la reunión que había mantenido con el General Haig en Washington.
La idea de Haig se apoyaba en los siguientes puntos: detener la flota
británica, desafectar las tropas, e ir a una administración transitoria.
En esa fecha, el COMIL decidió formar un equipo de Trabajo para apoyo
de la Cancillería, el cual sería integrado por el Brigadier Mayor Miret,
el General Iglesias y el Contraalmirante Moya. (Anexo V/9).
Se acordaron también las premisas iniciales para la negociación y éstas eran:
a. La soberanía no sería negociada.
b. La Resolución 502 constituía un todo y su cumplimiento no se realizaría por etapas.
c. Se resguardarían y garantizarían los intereses de los isleños.
306. Con respecto a la premisa referida al cumplimiento de la
Resolución 502, el COMIL interpretó que «el retiro inmediato de todas
las fuerzas argentinas» debía entenderse como una reducción de esos
efectivos (Página 51 del xxx – Informe de Ex Comandantes en Jefe) y
sobre esa modalidad debía articularse la negociación.
307. El 09 de Abril, el COMIL probó las «Bases para la negociación a ser expuestas ante el Secretario de Estado, señor Haig».
Estas «Bases» eran el resultado de la labor del Equipo de Trabajo
integrado por los funcionarios de la más alta jerarquía de Cancillería y
los Oficiales Superiores desarrollado el 08 de Abril por el COMIL,
quienes habían elaborado un estudio (Anexo V/10) cuya Introducción
finalizaba con la siguiente conclusión:
«La brusca reversión de
la situación, las pérdidas significativas que ella representa para
Inglaterra y su honor nacional herido, hacen que deba considerarse algún
tipo de concesiones a otorgar por parte de Argentina».
308.
Lejos de realizar un análisis prudente y objetivo de la situación
generada, el COMIL, el Canciller y el Equipo de Trabajo manifestaron una
actitud soberbia, al parecer sustentada por el convencimiento de que
las cartas de triunfo estaban de su lado.
Esta engañosa
posición se fundaba en la sobrevaloración del éxito de una operación
militar inicial que no tuvo resistencia y en la exaltación patriótica
que produjo esta decisión en la población nacional.
309. Los restantes documentos integrantes del estudio elaborado por el Equipo de Trabajo, fueron los siguientes:
a. GRADACIÓN EN LAS CONCESIONES A OFRECER A GRAN BRETAÑA.
Constaba de una introducción y dos respuestas tentativas a aplicarse
alternativamente, según el criterio que sustentase el General Haig.
b. IDEAS PARA LAS NEGOCIACIONES A REALIZAR CON LA ASISTENCIA DE EE.UU. EN RELACIÓN AL CONFLICTO CON GRAN BRETAÑA.
Establecía los objetivos a mantener, intereses que afectaban a los
actores, análisis del factor tiempo, factores que podían ser
considerados como puntos de negociación en las reuniones, actitud a
asumir en la primera reunión en los diferentes aspectos, ideas para una
flexibilización en cada aspecto.
c. HECHO HISTÓRICO.
Relato cronológico de los hechos históricos.
d. ANTECEDENTES DE NACIONES UNIDAS.
Breves comentarios.
e. RESOLUCIÓN 502.
Análisis de las actitudes frente a los principios enunciados.
f. ARGUMENTOS PARA LAS CONVERSACIONES CON EL GENERAL HAIG.
Se señalaban 23 argumentos a tener en cuenta en las negociaciones.
310. Este trabajo detallado, confeccionado por el Equipo de Trabajo, se
fundamentó en la orientación impartida por el COMIL que, al establecer
las bases para la tarea había sostenido como una de las premisas
iniciales que la soberanía no es negociable» (Ver párrafo 305).
311. El 10-ABR y en medio de este clima se iniciaron las negociaciones.
Los principales interlocutores, por el lado americano, fueron el
General Haig, el Subsecretario Enders y el General Walters y los
funcionarios Funceth, Goldberg, Gompert, Godegon, Rentschler y Service.
Por el lado argentino concurrieron el Doctor Costa Méndez, los
Subsecretarios Ross y Peña y el Equipo de Trabajo nombrado
anteriormente.
312. A las 10.00 horas de este día, el
Secretario Haig se reunió en el Ministerio de Relaciones Exteriores con
el Canciller; luego de esta visita protocolar, ambas delegaciones
pasaron a la Casa de Gobierno, donde después del saludo realizado en el
despacho del Presidente, se reunieron en la Sala de Situación, a las
10.30 hs. Esta primera reunión contó con la asistencia del Secretario
Haig, el General Walters, el Subsecretario Enders, el Presidente
Galtieri, el Canciller Costa Méndez, los Subsecretarios Ros y Peña, el
General Iglesias, el Contraalmirante Moya y el Brigadier Miret (Anexo
V/11).
313. A partir de las 15.00 hs., las delegaciones
argentina y estadounidense continuaron trabajando en la Cancillería. A
las 18.00 hs. de ese día se habían previsto presentar los acuerdos
elaborados, para que el Presidente y el Secretario Haig los considerasen
en una reunión similar a la de la mañana; sin embargo, el atraso y las
moras sucesivas, pusieron de manifiesto las dificultades que fueron
apareciendo a lo largo de las negociaciones.
314. A las 21.00
horas, se reinició la reunión conjunta en la Presidencia la cual el
señor Presidente solicitó al Canciller y al General Haig que expresasen
sus respectivos puntos de vista.
En ella se evidenció que la
presentación norteamericana no tenía en cuenta ninguna de las bases
propuestas por Argentina en la reunión de la mañana.
Estas
bases consistían en el cese de las hostilidades, el cese de la
aproximación de la Flota Británica y anulación de la resolución de
bloqueo, el desarme progresivo de la isla, y un gobierno argentino, con
participación en escalones inferiores de representantes malvinenses,
bajo el control de un organismo internacional (Anexo V/12).
La
proposición norteamericana se basó en la creación de un Consejo Superior
de cinco miembros y del mantenimiento del Comité Ejecutivo y del Comité
Legislativo que existían antes del 02-ABR.
Llegado a este
punto, el señor Presidente se retiró a su despacho para reunirse,
posteriormente, con los otros integrantes de la Junta Militar.
315. A las 23.40 horas del día 10 de abril, por lo tanto, se reunieron
los miembros de la Junta Militar. El Presidente Galtieri informó sobre
la propuesta de los EE.UU., a saber: el triunvirato para el interinato
formado por Argentina, Gran Bretaña y los EE.UU.
Este
triunvirato podría incrementarse con la presencia de Canadá, Perú o
Uruguay. Por debajo de este triunvirato estarían las mismas
organizaciones y autoridades que xxx antes del 02-ABR.
El señor
Presidente agregó que la delegación estadounidense insistía en el
retiro de tropas argentinas y que el Secretario Haig se había referido
al tiempo o duración de la autoridad interina, dato que debería figurar
en un acuerdo secreto o especial.
316. Al término de esta
reunión, el Secretario Haig fue invitado a conversar a solas con el
señor Presidente Galtieri, el Dr. Costa Méndez y el Contraalmirante
Moya. Durante esta reunión se señaló al Secretario de Estado
norteamericano la preocupación argentina ante la poca disposición
británica a negociar, ya que todo indicaba que bajo la amenaza de la
flota británica. Se le señaló también al señor Haig, que Argentina tenía
máxima voluntad de negociar, pero que también estaba dispuesta a
defenderse de la agresión.
Con respecto a la presión británica,
puesta de manifiesto al crear el Secretario Haig, Argentina advirtió
que el riesgo de un hundimiento sería siempre adjudicado a Gran Bretaña,
pese a que lo podría efectuar o la URSS o la República Popular China.
Lo mismo sucedería con un hundimiento británico (Anexo V/13, última
parte).
317. Con la reiteración de que no se debería obligar al
gobierno argentino a aceptar decisiones que ya había manifestado no
poder adoptar, finalizó la reunión con el Secretario Haig, a las 01.15
horas del día 11-ABR.
Antes de retirarse, el Secretario Haig
expresó al Sr. Canciller Costa Méndez que enviaría un despacho a Londres
informando sobre su regreso a ésa. A su vez, pidió a Argentina que
suspendiera hasta entonces cualquier medida, aclaración que incluía el
llamamiento al TIAR.
318. Mientras el Presidente estaba reunido
con el Canciller, el Jefe de la Casa Militar y el Secretario de Estado
Haig en su despacho, las delegaciones de ambos países se congregaron en
la Sala de Situación. En esta reunión, mientras esperaban que finalizara
la conversación Haig-Galtieri, la delegación norteamericana elaboró un
borrador de posibles acuerdos de base. Periódicamente, solicitaba
informaciones a la delegación argentina reunida en el mismo salón. Los
estadounidenses produjeron así un papel de trabajo (Anexo V/12) que
luego el Secretario Haig intentó utilizar como expresión argentina, no
reconociendo así como posición oficial la que le fuera transmitida en la
reunión con el señor Presidente.
319. El día 11-ABR, a las
09.30 hs., el Secretario Haig partió hacia Londres. Antes de su partida,
el Canciller le hizo entrega de los PUNTOS BÁSICOS DE IMPOSICIÓN
ARGENTINA (Anexo V/13).
Esencialmente, se aclaró la necesidad
de dar cumplimiento al punto uno (gobierno), o el punto dos (soberanía)
-cualquiera de ellos para satisfacer, en forma mínima, al gobierno
argentino.
320. Una vez producida la partida del General Haig,
se presentó al Canciller el Embajador Soviético, quien informó que su
gobierno opinaba que este incidente había sido provocado por la vocación
colonialista británica. La URSS se sentía comprometida y apoyaría, en
lo que pudiere a Argentina, sin esperar nada en retribución, ya que ésta
era una actitud de reciprocidad en relación a la posición Argentina
ante el embargo cerealero de 1980.
321. A las 11.00 horas del
11-ABR se reunió el COMIL. Con referencia a las conversaciones con el
Secretario de Estado, el Canciller informó que el Gral. Haig le había
manifestado su creencia de que la presente situación podría determinar
la caída, tanto del gobierno británico como del Argentino; que él
consideraba que la situación política era mejor en la Argentina,
reiterando su grave preocupación por la posible convocatoria del TIAR,
ya que eso causaría graves problemas a su gobierno.
322. El
Canciller destacó el nivel internacional que estaba adquiriendo la
ocupación, a la que calificó como «el acto independiente de política
exterior de una potencia media». Estas actitudes de suficiencia
inconducente, alimentadas por el propio Canciller, fueron cerrando los
caminos de la negociación.
Al término de la reunión ingresó el
Comandante del TOAS, quien informó que en el plazo de días estaría lista
la defensa de Malvinas, ya que al momento la Guarnición era de 2.600
hombres (Anexo V/14).
323. Las Resoluciones adoptadas en el
Acta Nro. 11 «M»/82 del día 11 de abril, establecían que, en el orden de
la política internacional, se debería tener todo listo para efectuar,
en el momento oportuno, la convocatoria del TIAR; que el Estado Mayor
Conjunto daría instrucciones a los agregados militares ante los países
donde estaban acreditados para que ofrecieran razones sobre la actitud
adoptada por Argentina y reclamaron su apoyo; que la posibilidad de
enviar una misión a Cuba, se analizaría en la próxima reunión (Anexo
V/15).
324. En la tarde del día 11 de abril, el Presidente del
Perú hizo llegar a Gran Bretaña y Argentina un cablegrama en el que
proponía formalmente «una tregua de 72 horas, mientras se desarrolla el
procedimiento de buenos oficios, aceptado por las partes concernidas,
que está llevando a cabo el Gobierno de los EE.UU…» (Anexo V/16).
Ambos Gobiernos contestaron el día 13 de Abril (Anexo V/17).
325. El día 12 de abril, la República Argentina fijó suposición ante el
Consejo de Seguridad mediante documento S/14968 (Anexo V/18), que
mereció la réplica de Gran Bretaña el 13 de abril, a través del
Documento S/14973 (Anexo V/19).
326. En Londres, mientras tanto, el General Haig mantenía reuniones con la señora Thatcher y el señor Pym.
327. A las 10.00 horas del día 12 de abril se efectuó una reunión del
Gabinete nacional, en la cual el General Galtieri informó respecto de lo
actuado durante los últimos días. Mientras se desarrollaba la reunión,
el General Haig se comunicó desde Londres con el Canciller para
informarle sobre el estancamiento de las conversaciones. El General Haig
hizo mención a los «borradores», preparados en conjunto por los
colaboradores de ambos Cancilleres, a lo que el Dr. Costa Méndez
respondió que carecían de valor, ya que lo único válido eran los 5
puntos entregados al General Haig antes de su partida (Anexo V/20).
328. En esta reunión, además, quedó aclarada la situación de la
República Argentina que, hasta ese momento, no tenía información veraz
ni concreta sobre cuáles eran los aspectos que Gran Bretaña estaba
dispuesta a negociar. Eso se debió a que la delegación de EE.UU. no
había establecido, en forma precisa, cuál era la posición británica
respecto del conflicto.
329. A las 14.00 horas, el Embajador de EE.UU. transmitió un mensaje del General Haig precisando lo siguiente:
a. Que trabajaba sobre los borradores.
b. Que el progreso era escaso.
c. Que a la noche regresaría Washington.
d. Que Gran Bretaña usaría la fuerza hasta llegar a un acuerdo.
e. Que pedía no tomar decisión hasta recibir respuesta (TIAR).
f. Que cualquier desvío con respecto a las ideas incluidas en el «borrador», significaba el fracaso de la misión.
El Canciller reiteró al Embajador que la única y válida posición
argentina era la contenida en los 5 puntos entregados al General Haig.
330. A las 20.30 horas y en el mismo día, se produjo la segunda llamada telefónica al Canciller (Anexo V/21).
Los conceptos principales que pudieron extraerse de esta conversación,
fueron los referidos a cierta actitud amenazante del General Haig con
respecto a la interrupción de su gestión y a su opinión sobre los puntos
1 y 2 del borrador de cinco puntos que le fueran entregados el 11 de
abril, previo a abordar su avión, (Párrafo 319); «mi criterio básico es
que la realización el párrafo 1 (Gobierno) ó 2 (soberanía) en el término
que ustedes lo presentan, nos privan de toda esperanza de poder
conducir el rol de esta crisis».
331. El 13 de abril, el
General Haig viajó de Londres a Washington y remitió una carta al
Canciller Argentino (Anexo V/22) en la que renovó su aspiración de
realizar los esfuerzos necesarios para evitar un conflicto armado.
332. Mientras tanto, en Buenos Aires, el COMIL analizaba la marcha de
la negociación Haig y la posición argentina con respecto a una posible
convocatoria el TIAR (Anexo V/24).
Para ese mismo día se
resolvió preparar un Borrador de Trabajo con las «Bases de Acuerdo a
Desarrollar durante la segunda visita del Gral. Haig». Con respecto al
TIAR, se decidió no solicitar aún su convocatoria. El representante
argentino ante las Naciones Unidas, Doctor Roca, informó sobre la
situación en el mencionado organismo (Anexo V/26). Lo propio hizo el Dr.
Quijano desde la OEA.
333. A las 17.30 horas se produjo una segunda reunión del COMIL.
Los principales aspectos tratados con referencia a las negociaciones diplomáticas, fueron los siguientes:
a. El Canciller informó haber recibido una llamada telefónica del Gral.
Haig desde Londres, en la cual le había transmitido noticias más
tranquilizadoras.
b. Se consideró oportuno, antes de emitir la
posición argentina en la próxima nueva ronda de la gestión Haig, esperar
la recepción de las proposiciones británicas.
c. Se convino en
esperar, antes de adoptar posiciones definidas, los resultados de la
interpelación de la señora Thatcher en el Parlamento británico.
d. Se leyeron los proyectos de las «Bases de Acuerdo» y se decidió su
análisis y redacción definitiva por el Equipo Especial de Trabajo, que
debería exponerlo al día siguiente (Anexo V/23).
e. Se elaboró
una ayuda memoria del tema de la descolonización, sobre cuya
conveniencia se había hablado con Haig. (Anexo V/24).
334. El
14 de abril, en EE.UU., circularon versiones periodísticas referidas al
apoyo efectivo brindado por este país a Gran Bretaña.
La
noticia motivó una llamada telefónica del Gral. Haig al Canciller,
desmintiendo tales manifestaciones y expresando el pesar presidencial
ante los comentarios, y que los hechos serían investigados.
Es
necesario destacar que el periodista que hizo estas manifestaciones fue
el señor Bernstein, internacionalmente prestigiado a raíz de sus
denuncias en el «Caso Watergate».
335. En esa misma oportunidad
el Gral. Haig y el Canciller intercambiaron opiniones respecto de la
marcha de las negociaciones. Las conclusiones principales que pudieron
extraerse del tenor de esta conversación fueron:
a. Haig
reconoció no contar con ninguna propuesta concreta del lado británico y
aceptó que la misma era imprescindible para la realización de una
negociación seria que condujese a un acuerdo.
El Canciller
expresó que la posición argentina estaba lista para ser enviada, pero
que esto sería inútil si el gobierno de Gran Bretaña no cambiaba su
obstinada intención de volver al «Status quo ante bellum» como requisito
previo.
Asimismo manifestó su contrariedad ante las declaraciones formuladas por la señora Thatcher en el Parlamento británico.
b. El Canciller expresó la necesidad de que EE.UU. manifestara claramente que no estaba ayudando a ninguna de las partes.
c. El Secretario de Estado indicó conocer que la flota británica no
estaba avanzando desde la Isla Ascención, y que tampoco tenía
intenciones de avanzar (debe recordarse que la flota partiría desde
Ascensión dos días después de esta conversación).
El Canciller
argentino señaló que, existiendo un acuerdo para el uso de la isla,
-argumento que EE.UU. esgrimía como excusa para brindar apoyo a Gran
Bretaña-, dicho acuerdo podía utilizarse para evitar que la flota
británica zarpase hacia el sur.
d. La convocatoria del TIAR quedaba supeditada al movimiento de la flota.
336. El Embajador de los EE.UU. en la OEA, señor Middendorf, mantenía,
mientras tanto, un estrecho contacto con el Doctor Quijano, manifestando
que su máxima preocupación se basaba en una eventual convocatoria del
TIAR, por cuanto, de producirse, significaría la ruptura de la armonía
existente y la obligación de oponerse por parte de su país.
337. Era notoria la preocupación de EE.UU. ante una convocatoria del
TIAR, debido a la posición difícil en que se vería colocado respecto de
los países latinoamericanos.
También era evidente que el único
motivo que llevaría a Argentina a solicitar la convocatoria sería la
zarpada de la flota británica desde la Isla Ascensión hacia el Sur,
actividad que EE.UU. negó casi hasta último momento y a la cual podía
haber invalidado de haberla privado de recursos.
No obstante,
llegado el momento de tomar posición, prefirió no sólo apartarse de la
posición argentina, sino también «olvidar» su compromiso continental,
para atender sus intereses en otras regiones.
338. El Gral.
Haig envió una carta al Gral. Galtieri en la que hacía referencia a las
noticias periodísticas circulantes en EE.UU., referidas al apoyo
brindado a Gran Bretaña, agradecía la buena voluntad del gobierno
argentino ante estos comentarios y alertaba sobre la casi segura
repetición que atribuía a fuentes maliciosas e interesadas en crear
fricciones entre el Norte y el Sur.
También anunciaba su viaje
para el día 5 de abril manifestando que sería portador de nuevas ideas
que podrían ser adecuadas, en la medida que existiera flexibilidad y
estadismo en las partes. El párrafo más importante, tal vez, de esta
carta, fue el siguiente:
«Esas ideas involucran condiciones de
facto en las Islas que, en contexto de los objetivos de las
negociaciones, asegurarán que las necesidades esenciales de Argentina
serían alcanzadas». (Anexo V/25).
339. Por la noche, se produjo
una segunda conversación telefónica entre el Secretario de Estado y el
Dr. Costa Méndez en la que el primero reiteró su inmediato viaje a
Buenos Aries, portando algunas nuevas ideas que había desarrollado a
partir de los últimos contactos mantenidos con las partes. El Canciller
indicó que le había remitido un ayuda memoria de los aspectos
principales referidos a la descolonización, de manera que el General
Haig pudiera tener más tiempo para estudiarlos antes de su próximo viaje
a Buenos Aires.
El aspecto más importante de esta conversación
fue el referido a la partida de la flota británica desde Ascensión.
Dada la importancia de lo tratado, conviene transcribirlo textualmente:
COSTA MÉNDEZ: «Yo entiendo que mientras Ud. viene aquí y por las
próximas 48 horas, más o menos, la flota no continuará avanzando hacia
Malvinas. ¿Estoy en lo cierto?».
HAIG: «No, no, eso no es
correcto. Yo no puedo conseguir que Gran Bretaña cambie el movimiento de
su flota hasta que tengamos un entendimiento, pero dentro del
entendimiento hay estipulaciones que se refieren a … en las propuestas
que yo llevaré».
340. Es decir que, a diferencia de lo
expresado menos de doce horas antes, el Secretario no sólo anuló su
comentario de que la flota no había partido y no tenía intenciones de
partir, sino que estableció, esta vez claramente, que no contaba con
medios efectivos para impedir que Gran Bretaña realizara los movimientos
de su flota hasta que se viera concretado un entendimiento.
Obviamente, al único entendimiento que Gran Bretaña quería llegar hasta
ese momento, era al cumplimiento de la Resolución 502, según su propia
interpretación. Así lo había expresado en sus documentos ante el Consejo
de Seguridad: retirada de todas las fuerzas argentinas y restauración
del gobierno y, por ende, de la soberanía británica en las islas. Todo
esto como requisito previo para considerar la iniciación de
negociaciones.
341. El Secretario Haig reiteró en ese breve
párrafo que hemos transcripto, toda la realidad de la negociación de
EE.UU: Gran Bretaña no detendría sus acciones militares, a menos que
Argentina aceptara la posición -volver al «status quo ante bellum»- con
los aspectos complementarios que EE.UU. le propondría en su nombre.
342. El Agregado Militar Argentino en Washington informó, a las 21.30
horas del día 14 de abril, que en los EE.UU. se vivía una atmósfera
tensa en relación con el conflicto, y que el punto de no retorno lo
constituiría esa eventual zarpada de la flota británica desde la Isla
Ascensión.
La segunda visita a Buenos Aires del general Haig
343.
El 15-ABR. el Secretario de Estado inició su segundo viaje a Buenos
Aires. En una escala realizada en Caracas, aprovechó la oportunidad para
intercambiar opiniones con el Canciller de Venezuela.
Mientras tanto, el Gral. Galtieri recibió un llamado telefónico del Presidente Reagan (Anexo V/26).
Las ideas fundamentales que pudieron extraerse de las palabras del Sr. Reagan fueron:
a. Ratificaba su compromiso para una solución pacífica.
b. Ratificaba pleno apoyo a la gestión Haig.
c. Ante una mención de la zarpada de la flota desde Ascensión expresó:
«Comparto sus temores de que surja algún hecho que volvería difícil
controlar la situación o del cual sería difícil retroceder…»
d. La solución debía ser pacífica y contemplaría los intereses de los
pueblos involucrados y de la población de las islas, en forma aceptable
para las partes.
e. Aseguraba que EE.UU. no había hecho nada contrario a su papel de intermediario neutral y objetivo.
f. Indicaba que había recibido grandes presiones para abandonar la
neutralidad, pero que su intención era continuarla «a medida que
procedan las negociaciones del caso; por lo tanto yo espero y pido a
Dios que no haya conflicto que sea causado inadvertidamente por una
parte u otra durante el tiempo en que estamos dedicados a la solución de
esta situación».
344. A las 23.40 horas arribó a nuestro país
el Gral. Haig con sus colaboradores. Fueron recibidos por el Canciller,
quien al respecto informó al COMIL:
a. Que era optimista por lo conversado.
b. Que habría alguna posición concreta de Gran Bretaña.
c. Que el Gral. Haig deseaba reunirse con el señor Presidente a las
10.00 horas del viernes (16-ABR) para continuar la negociación.
Previamente, a las 21.00 horas, el Canciller había llamado al Canciller
venezolano, quien le manifestó un moderado optimismo respecto de las
negociaciones que desarrollaría Haig en Buenos Aires.
345. El
día 16 de abril, el Gobierno de Gran Bretaña, a través de la Embajada de
Suiza, hizo conocer a nuestro país su decisión de atacar cualquier
aeronave, buque o submarino argentino que afectara el cumplimiento de la
misión de la flota británica en el Atlántico Sur. La amenaza era
extendida a las aeronaves comerciales.
Argentina presentó la nota S/14984 ante e Consejo de Seguridad (Anexo V/27).
346. A las 10.15 horas del 16 de Abril, el Secretario de Estado
entrevistó al Gral. Galtieri en la Casa de Gobierno. Las delegaciones de
ambos países trabajaban en Cancillería. De esta primera reunión pueden
destacarse los siguientes aspectos principales por parte de los
interlocutores:
a. PRESIDENTE DE LA NACIÓN
1) Escuchó las consideraciones iniciales de Haig.
2) Reiteró su confianza en la gestión de EE.UU.
3) Deploró ciertas actitudes encaradas por la Embajada de EE.UU. en
Buenos Aires que podían hacer llegar a creer que EE.UU. preparaba una
ruptura con Argentina.
4) Ratificó su voluntad de hacer todos los esfuerzos necesarios hacia la búsqueda de una solución pacífica.
5) Indicó que esta buena voluntad se había expresado en el último documento enviado al Secretario de Estado.
b. CANCILLER ARGENTINO
1) Reiteró la necesidad de mantener la imagen de neutralidad de EE.UU.
2) Indicó que los comentarios de Weimberger no eran alentadores.
c. SECRETARIO HAIG
1) Reconoció que para Argentina la situación se estaba poniendo difícil y sabía que estaba dispuesta a luchar.
2) Indicó que había traído algunas ideas muy sólidas. Las discusiones
mantenidas en Londres fueron mejores en esta segunda visita.
3)
Analizó detalladamente la actuación de ambas partes, acción que le
había permitido llegar a la determinación de siete puntos principales:
a) Parar la flota.
b) Mantener la bandera argentina en las islas.
c) Expandir considerablemente el papel argentino en las islas durante el período interino.
d) Garantizar que las negociaciones serían terminadas para fin de año
(«yo creo que tenemos el acuerdo doloroso de la señora Thatcher»).
e) Guiar el proceso con los principios de la descolonización.
f) Normalizar las relaciones entre el continente y las islas.
g) Levantar las sanciones y garantizar la asistencia americana a las islas, durante todo el proceso.
4) Manifestó que había insistido en Londres para que las decisiones,
durante el proceso se adoptasen por mayoría, para que EE.UU. pudiese
provocar los cambios necesarios.
5) Apreció que ambas partes no podrían ocurrir acontecimientos que harían desaparecer las oportunidades.
6) Indicó que, con el tiempo, la posición mental británica mejoraba,
pero que podrían ocurrir acontecimientos que harían desaparecer las
oportunidades.
7) Hizo referencia a aquello que se podría
sindicar como aspecto principal de la cuestión, lo que se transcribe
textualmente para evitar omisiones:
«Yo creo que hay dos
exigencias que están en conflicto una con otra; una, es una ventaja o
beneficio inmediato y visible para Argentina a los sacrificios que ha
hecho. Yo creo que nosotros debemos prever de una manera muy
perceptible, mucho más importante, alcanzar la solución final sobre este
problema histórico que realice finalmente sus aspiraciones».
«Esto no puede ser concebido visiblemente en los acuerdos por sí mismo,
debe ser garantizado por las condiciones establecidas dentro del
concepto de la descolonización. Yo creo que Uds. habrán alcanzado no
todo lo que han deseado, pero no obstante, lo suficiente para justificar
los sacrificios que han hecho».
«Hemos extraído de los ingleses y podemos extraer aún más de lo que puedan conceder».
«Yo quisiera no molestarlo más y ponernos a trabajar con el Canciller.
Yo no sé si sería útil a fin de completar nuestro trabajo, podría servir
que yo presentara los puntos de vista americanos a su dirección
colectiva, no para discusiones sino solamente par considerarlos, para
tener certeza de que ellos entienden la gravedad de la situación y la
seriedad de nuestro propósito».
8) Otros comentarios realizados por el Gral. Haig fueron:
a) Los comentarios del señor Caspar Weimbeger (Secretario de Defensa)
eran personales y contrarios a las instrucciones del Presidente Reagan.
b) En caso de conflicto, la opinión pública impulsaría a EE.UU. a colocarse del lado de Gran Bretaña.
c) A pesar de que Argentina atendía los intereses económicos de Gran
Bretaña en las Islas, debía entenderse que para ésta, después de años de
ocupación, era difícil ver, exclusivamente intereses de ese tipo.
347. Luego de esta conversación, los señores Cancilleres se retiraron
de la Casa de Gobierno dirigiéndose al Palacio San Martín, lugar donde
los aguardaban las delegaciones de ambos países.
348. El Proyecto Argentino presentado por Cancillería fue el que se incluye como Anexo V/23.
Constaba de un Preámbulo y 10 Artículos en los que quedaba radicada la posición de nuestro país.
Si bien EE.UU. EN NINGÚN MOMENTO HIZO ENTREGA DE UN DOCUMENTO QUE
PUDIESE SER CONSIDERADO COMO INDICADOR DE LA POSICIÓN BRITÁNICA, el día
16 de abril elevó a consideración de Cancillería un PAPEL DE TRABAJO
CUYO CONTENIDO, SEGÚN LA DELEGACIÓN NORTEAMERICANA, HACÍA REFERENCIA A
LOS ASPECTOS QUE ELLOS CONSIDERABAN QUE PODRÍAN SER ACEPTADOS POR EL
GOBIERNO BRITÁNICO.
Este papel de trabajo fue denominado por
Cancillería «del Reino Unido» para permitir su identificación (Anexo
V/28), y constaba de un Preámbulo y 7 Artículos.
349. Este
papel de trabajo no satisfacía las mínimas aspiraciones argentinas. Así,
por ejemplo, en el aspecto referido al término de las negociaciones, se
establecía que el status de las islas sería determinado de conformidad
con los deseos e intereses de la población, aspectos que serían fijados
mediante un sondeo de opinión.
Esta posición demuestra,
claramente, la actitud con que el Secretario Haig encaraba su gestión,
ya que presentaba un papel de negociación que abiertamente contrariaba
la decisión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, materializada
en la Resolución 2065 (XX), como era la de atender a los intereses y no
a los deseos de los habitantes.
Por sus características, el papel presentado por el Secretario de Estado lo retiró de su ubicación equidistante.
De haberse aceptado esta proposición, Gran Bretaña habría obtenido una
posición definitiva más favorable a la que había podido lograr en los
foros internacionales antes de la iniciación el conflicto.
Además, para los grupos de las islas sin población, deberían
determinarse procedimientos especiales para establecer su status
definitivo. Con ello se anulaban las tratativas anteriores, ya aceptadas
por Gran Bretaña, de tratar integralmente el problema Malvinas,
Georgias del Sur y Sandwich del Sur.
Con respecto a la
participación argentina en el gobierno de las Islas por la cantidad de
representantes y por el sistema fijado para la adopción de resoluciones
en la Comisión Especial, quedaba desvirtuado cualquier tipo de
participación efectiva.
350. Quiere decir que esta segunda
visita del Gral. Haig se inicia con una posición que dejaba de lado los
dos puntos (alternativos) prioritarios, fijados claramente por el
Gobierno Argentino: Soberanía o Gobierno.
A las 12,40 horas del
16 de abril, el Embajador Figueroa, uno de los integrantes de la
Delegación negociadora argentina, informó al Jefe de la Casa Militar que
durante las conversaciones no se progresaba en los puntos esenciales,
pues se estaba muy lejos de satisfacer la posición argentina, mientras
que en todas las cuestiones de detalle se había podido llegar a un
acuerdo.
351. Al mediodía, mientras el Secretario Haig se
retiraba a la Embajada de su país en Buenos Aires, el Equipo Especia De
Trabajo Argentino se reunió en la Cancillería para analizar la marcha de
estas primeras conversaciones en la segunda visita del Gral. Haig.
Luego de un detallado análisis (puede encontrarse en el Informe ex Ctes.
– Cap.II- Págs. 148 a 149), la delegación argentina llegó a la
conclusión de que el proyecto presentado por Haig era de características
ambiguas y peligrosas, por cuanto:
a. Proponía la
desmilitarización de las Islas, impidiendo cualquier intento futuro de
recuperación y librando a Gran Bretaña de los costos de mantenimiento de
fuerzas militares en el área.
b. Mantenía la administración
británica de las Islas, con una mínima representación argentina, sin
ninguna capacidad real de decisiones.
c. Intentaba que Gran
Bretaña recuperar su status anterior sobre las islas. De tal manera,
Gran Bretaña concurriría a las negociaciones en una situación relativa
mucho más favorable al 01 de abril, con el agravante de la exclusión de
Naciones Unidas en las mismas.
En esta reunión se trataron
alternativas viables para proponer al proyecto de EE.UU., instrumentando
modificaciones a los puntos 6, 8 y 10 (ver Informe ex Ctes. – Cap. II –
págs. 151/152).
352. En la tarde del 16 de abril, el Canciller
informó inicialmente al Presidente sobre el avance de las
negociaciones. Posteriormente, a las 10.25 horas, hizo notar a la Junta
Militar que el proyecto de EE.UU. no contemplaba las mismas aspiraciones
argentinas, explicó las propuesta que se aconsejaba introducir e hizo
un análisis sobre la actitud que, al recibirla, podía esperarse de la
delegación americana.
Los integrantes de la Junta Militar
adoptaron su resolución respecto de los puntos 6, 8 y 10, que quedaron
definitivamente redactados y fueron entregados al Secretario Haig a las
22,45 horas en el Hotel «Sheraton» de Buenos Aires.
353. A las
23,10 horas, el Canciller informó a la Junta Militar sobre la reacción
del Gral. Haig al recibir el documento argentino. Este expresó:
a. Que las propuestas eran inaceptables para Gran Bretaña.
b. Que probablemente EE.UU. tomaría parte por Gran Bretaña.
c. Que habría guerra, en caso de que tal documento se enviara a Londres esa noche.
d. Que ante la manifestación del Dr. Costa Méndez, en el sentido de que
ésa era la decisión argentina, indicó su deseo de saludar a la Junta
Militar antes de regresar a su país.
El 17 de abril a las 10.00
horas, la Junta Militar decidió recibir al Secretario de Estado,
convoca a los dirigentes políticos para llevar a su conocimiento todos
los hechos, convocar al TIAR, publicar la propuesta argentina y examinar
las relaciones argentino-norteamericanas. (1).
354. El día 17
de abril, a las 10.00 horas, el Gral. Haig, en compañía del Gral.
Walters, concurrió a Casa de Gobierno, entrevistándose con el Presidente
de la Nación. También se encontraban presentes los Comandantes en Jefe y
el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto.
Como Anexo V/29
se incluye una copia de la conversación sostenida en la oportunidad y
que comienza con la frase del Secretario de Estado:
«Temo,
señor Presidente, que existe aquí la impresión que somos agentes de Gran
Bretaña. Nada podría estar más lejos de la realidad.»
Esta
Comisión considera que el referido diálogo resulta de fundamental
importancia, por cuanto define claramente, por primera vez, cuáles eran
los verdaderos alcances de la misión negociadora Haig.
Al respecto, resulta conveniente destacar las ideas determinantes de las expresiones del Gral. Haig y del Gral. Walters.
1.Cabe destacar que durante el día 16 de abril, mientras el general
Haig se encontraba en Buenos Aires, se recibió información sobre la
zarpada de la flota británica desde la Isla Ascensión en dirección al
Atlántico Sur.
a. Conocimiento de la frustración argentina.
b. El arreglo no podía provocar la ruptura Gran Bretaña-EE.UU., especialmente considerando que éste era un anhelo soviético.
c. EE.UU. no podía acepar el uso de la fuerza para provocar cambios fundamentales.
d. El propósito de EE.UU. no era sostener a la Thatcher en su puerto, sino mantener la alianza atlántica.
e. Toda Europa aseguraba que no era posible un cambio permanente como resultado de la ocupación argentina.
f. Esto también lo compartían varios gobiernos latinoamericanos.
g. Se había tratado de otorgar una participación efectiva en el
gobierno local, con un veedor de EE.UU. para que esto se cumpliera.
h. Se consideró que el retorno de la influencia británica no podría ser ignorado formalmente.
i. EE.UU. propugnó que las decisiones se adoptaron por mayoría, a fin
de influir cualquier decisión de la comisión normalizadora.
j.
El texto propuesto por Argentina conducía a la guerra. Se necesitaba un
texto más benigno que llevara a la solución deseada por Argentina.
k. El texto argentino lo obligaba a retornar a Washington y, en pocos
días, la opinión pública volcaría a EE.UU. a favor de Gran Bretaña.
Todos sufrirían las consecuencias de la guerra.
l. EL PRESIDENTE REAGAN MANIFESTÓ QUE NO PODÍA APOYAR EL TEXTO ARGENTINO.
ll. Creyó que era esencial sentarse a la mesa, con representación militar, para evitar malos entendidos y sospechas.
m. No era posible iniciar un proceso de negociación en el cual aparecía un resultado final.
n. EE.UU. había tratado de establecer fórmulas muy diferentes a las
británicas, tratando de acercarlas a la idea argentina, pero que dieran
peso a las preocupaciones de Gran Bretaña.
ñ. Había posibilidad de que los británicos aceptaran un congelamiento o detención de sus fuerzas.
o. SE DEBÍA SOSTENER UN MARCO POLÍTICO AMBIGUO QUE SUGIRIERA LA SOLUCIÓN FINAL Y QUE PERMITIERA NEGOCIAR A LOS BRITÁNICOS.
DEBÍA QUEDAR CLARO, AQUÍ E INTERNACIONALMENTE, QUE LA SOLUCIÓN FINAL SERÍA LA DEVOLUCIÓN DE LAS ISLAS A ARGENTINA.
p. Lo importante era no discutir el término o el estado actual de las Islas.
q. Los temores y el escepticismo argentinos eran comprensibles.
r. Retirar las Islas de la lista de territorios no autónomos constituiría un triunfo argentino.
s. Si la Sra.Thatcher se veía obligada, iría al combate para sobrevivir
pues tenía de su parte el principio y la ley internacional.
t.
Si se reiniciaban las conversaciones, el Secretario creía posible
alcanzar el cuadro inicial: parar la flota, distender la situación,
crear nuevas condiciones en las Islas e iniciar las negociaciones con
fecha 31 de diciembre.
u. Debían otorgarse a los británicos
términos honorables. La redacción el documento argentino no las
otorgaba. LOS BRITÁNICOS NO SE PREOCUPARON POR LA SOBERANÍA DE LAS
ISLAS, ESTABAN DISPUESTOS A NEGOCIAR.
v. Gran Bretaña no
aceptaría que quedara una única autoridad en las Islas. Para Londres era
más importante el punto 6 (Gobierno) que el 10 (Soberanía) para
explicarle a su pueblo que no era consecuencia de una capitulación.
w. La preocupación argentina respecto del punto 10 (en el sentido que
no se adoptaran principios diferentes al de la integridad territorial)
podría disiparse con la inclusión de dicho principio en el párrafo
pertinente.
x. Argentina debía considerar que EE.UU. iba a
llevar las cosas a una solución, y que Gran Bretaña quería sacarse este
problema de encima debido al costo político que le provocara este
criterio.
y. ARGENTINA NO ENCONTRARÍA NADA EN EL PÁRRAFO 10 QUE
LE PUDIERA DECIR QUE ESTABA LOGRANDO SU META. NO LO ACEPTARÍA LA SEÑORA
THATCHER Y SU PARLAMENTO.
z. El Secretario de Estado finalizó su conversación de esta manera:
«Tenemos que encontrar una solución y evaluar el sacrificio de la
guerra. Sólo quien ha visto los sacos de los muertos comprende la
gravedad de esto. Uds. saben que yo soy pacifista».
«Nuestros
hijos nos preguntarán cómo es que se ha derramado sangre por esas Islas,
rocas y mil pastores que podrían desaparecer, podrían marcharse en
nueve meses».
355. Luego de esta conversación, las
delegaciones encabezadas por el Dr. Costa Méndez y el Gral. . Haig
pasaron a la Sala de Situación para tratar el detalle de la redacción de
los párrafos 6 y 10. Entre las 11.30 y 22.00 horas se mantuvieron
reunidas las delegaciones tratando, arduamente, el contenido de los
párrafos de referencia.
Cuando la delegación de EE.UU. abandonó la Casa de Gobierno no se habían producido
cambios sustanciales en las posiciones mantenidas por cada una de las delegaciones.
En el Anexo V/30 se incluye la síntesis de la reunión. Este documento
trata con bastante detalle las posturas fundamentales sustentadas y los
puntos de conflicto.
Como síntesis de todo lo tratado, sirven
algunos párrafos significativos que esta Comisión ha seleccionado y cree
conveniente destacar:
COSTA MÉNDEZ.
«Lo creo muy
sincero en lo que dice, pero eso está en su espíritu pero no está
registrado en el papel. No hay garantía escrita tampoco del compromiso
del Gobierno de EE.UU.»
HAIG.
«No sé qué mayor garantía que nuestra participación».
COSTA MÉNDEZ.
«Hay que dar una definición más específica de la integridad
territorial, no hay nada en la estructura del párrafo que diga que
tenemos razón».
HAIG.
«Si insisten en cambiar el párrafo 10, puedo asegurarles que no habrá acuerdo con los británicos».
356. Un intento de definir cuál fue el alcance que las partes otorgaron
a las negociaciones hasta ese momento, puede llevarnos a extraer las
siguientes conclusiones:
a. ARGENTINA
Revirtió el status de las Islas pero fue castigada por la opinión internacional debido al empleo de la fuerza…
Tomó real conocimiento de que, contra sus esperanzas, EE.UU. no
convalidaba su decisión y de que sus intereses parecían estar más
próximos de Gran Bretaña que de Argentina.
Tenía por delante
varias opciones, pero, de encararlas, contaría a EE.UU. como oponente
(TIAR, NACIONES UNIDAS, OEA). Además, ninguna de ellas ofrecía igual
solidez que EE.UU.
b. GRAN BRETAÑA
Había logrado volcar a su favor la opinión internacional (la de mayor peso).
Su reacción se ajustaba a derecho.
No estaba dispuesta a finalizar lo que había iniciado con cierto costo político, antes de alcanzar objetivos rentables.
Sabía que sus intereses con EE.UU. eran más firmes que los que podía tener éste con Argentina.
Conocía que el conflicto le sumaría el apoyo de EE.UU., lo que le permitía mantener una mayor dureza en su posición.
c. EE.UU.
Su interés radicaba, en el mejor de los casos y sin pretender descubrir
su intencionalidad, en evitar el conflicto, pero no podía dejar de
atender, especialmente, la posición de la parte que le representara
mayor rédito.
Esta parte era, indudablemente, Gran Bretaña, debido a:
-Su posición se ajustaba a los principios y a la ley internacional.
-La alianza atlántica era de fundamental importancia para EE.UU. Dentro
de ella, Gran Bretaña y especialmente el gobierno no conservador
constituían elementos claves.
Por último, si el conflicto podía ser la única solución del problema, EE.UU. ya había establecido su posición en él.
357. La breve síntesis indicada en el párrafo anterior, nos permite
comprender mejor porqué las conversaciones entre ambas delegaciones
fueron inconducentes: Argentina quiso encontrar en ellas una solución
definitiva del problema, en tanto EE.UU. no pudo garantizarlas por
cuanto contrariaba sus interese elementales.
358. En la
madrugada del 18 de abril, interiorizada la Junta Militar sobre el
desarrollo de las últimas conversaciones, se preparó un nuevo proyecto
de memorándum de acuerdo, en le que se flexibilizó aún más, la posición
sustentada hasta el momento con respecto al párrafo 10 (Anexo V/31).
El texto fue remitido a consideración de Haig, acordándose su tratamiento conjunto para a las 15.00 horas.
359. A partir de las 14,30 horas del día 18 de abril, ambas
delegaciones se reunieron en la Sala de Situación, prologando las
conversaciones hasta las 01.55 del día 19 de abril.
360.
Inicialmente, el Gral. Haig agradeció los esfuerzos argentinos,
reflejados en el contenido e los documentos que le habían sido
entregados (párrafo 358), con clara mención a la nueva redacción del
párrafo 10, pero en el transcurso del tiempo, la posición del negociador
se fue endureciendo.
En el Anexo V/32 se incluyen copias de los diálogos más importantes mantenidos por ambas delegaciones.
La situación, al cierre de ese día de negociaciones, puede resumirse así:
a. EE.UU.
1) CON RESPECTO AL PÁRRAFO 6 (GOBIERNO)
Consideraba que la representación no podía ser proporcionada, por cuanto la diferencia de la población no lo permitía.
Se propuso un Consejo Ejecutivo de nueve miembros: 2 británicos, 4 residentes británicos y 2 argentinos, uno electo.
En el Consejo Legislativo habría 2 argentinos.
PROLONGABA EL SISTEMA DE GOBIERNO HASTA EL LOGRO DEL ACUERDO DEFINITIVO.
2) CON RESPECTO AL PÁRRAFO 10 (SOBERANÍA)
Consideraba que la referencia a Resoluciones que habían sido vetadas
por Gran Bretaña y por EE.UU., equivalía al rechazo británico.
INTERPRETABA QUE DEBÍA CONSIDERARSE LA AUTODETERMINACIÓN Y QUE ARGENTINA DEBÍA CORRER ESE RIESGO.
b. ARGENTINA
1) CON RESPECTO AL PÁRRAFO 6 (GOBIERNO)
Consideraba necesario que la representación en los Consejos fuese equitativa.
2) CON RESPECTO AL PÁRRAFO 10 (SOBERANÍA)
Consideraba importante colocar las Resoluciones de las Naciones Unidas y
tenía ciertas dudas en cuanto a lo que ocurriría el 31 de diciembre de
1982.
Cabe destacar que, nuevamente, Argentina requirió al
Secretario General conocer la posición británica pero, como había
sucedido en oportunidades anteriores, no pudo ir más allá de lo que éste
creía al respecto (1)
Ambas delegaciones convinieron en continuar las negociaciones en la mañana del día siguiente.
361. Entre las 09.00 y las 12.30 horas del día 19 de abril, en Buenos
Aires, se llevaron a cabo las últimas conversaciones con la delegación
presidida por el Gral. Haig.
Durante su transcurso, el
Secretario de Estado recibió un mensaje, el cual, según sus
interlocutores, «LO ALTERÓ Y MANIFESTÓ QUE ESTABA ANTE UNA EMERGENCIA,
POR LO CUAL PARTIRÍA A LAS 16.00 HORAS».
Hasta el momento, se
habían tratado aspectos relativos a la desmilitarización de la zona, sin
que se profundizara en cuestiones de fondo (Anexo V/33).
A las
16.00 horas, el Dr. Costa Méndez despidió al Gral. Haig, quien ya no
habría de regresar a nuestro país. En esa oportunidad le hizo entrega
del documento que reflejaba oficialmente la propuesta argentina (Anexo
V/x).
Esta propuesta, analizada comparativamente con los
primeros documentos argentinos y las primeras xxx por la gestión Haig,
pueden darnos una noción adecuada sobre el verdadero alcance de la
flexibilización otorgada a las negociaciones por las autoridades
argentinas.
La última etapa de la gestión Haig
362.
Debido al giro adoptado por la situación en los últimos días, la
República Argentina, por nota presentada el 19-ABR-82 a las 16,40 horas
de Washington, hizo la denuncia formal de la agresión británica,
materializada por la aproximación de su flota al territorio incluido
dentro de los alcances del TIAR y solicitó la convocatoria de una
reunión extraordinaria del Consejo de la OEA para los Artículos 6 y 13
del Tratado (Anexo V/35).
Las tratativas de nuestro país ante
la OEA, tendientes a la aplicación de algunas previsiones contenidas en
el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), fueron
ilustrativas en cuanto a la solidaridad latinoamericana y al
comportamiento de los organismos americanos y el futuro de las
relaciones hemisféricas. Sin embargo, en modo alguno resultan de valor
sustancial para el tema que preocupa este Capítulo.
(1)En
uno de sus comentarios, Haig reconoció que la Sra. Thatcher le pidió el
retiro de las fuerzas y el restablecimiento de la presencia británica,
como requisitos previos para comenzar a negociar.
363. El
mismo día 19-ABR, el Canciller recibió una carta del Gral. Haig en la
que hacía referencia al documento entregado antes de su partida, (Anexo
V/36), indicando que, pese a que la posición argentina oficial le había
sido entregada en dicho documento, decidía no tomar el párrafo 8 como
parte de la misma.
En la madrugada del 20 de abril, el
Canciller recibió un nuevo mensaje de Haig en el que le informaba,
extraoficialmente, la primera reacción británica ante la propuesta
argentina.
Esta impresión, que sería ratificada cuando se contara con mayores elementos de juicio, indicaba:
a. Desagrado por los términos de desmilitarización de la zona.
b. Desagrado por el tema de soberanía y por la aparente inclinación del Secretario de Estado hacia Argentina.
c. Desagrado fundamentalmente, porque los deseos de los isleños no estaban protegidos
(Anexo V/37).
364. El 20 de abril se reunió el COMIL, adoptándose la decisión de
continuar con las negociaciones, tratando de lograr una solución
pacífica. Esta solución debía contener claramente, el gobierno Argentino
en las Islas o establecer que la soberanía pertenecía a nuestro país.
Se labró el acta 15 «M»/ 82 (Anexo V/38).
También el Canciller hizo referencia a varios aspectos relacionados con la situación político internacional.
Se fijaron, además, algunos caminos de alternativa para las negociaciones (Anexo V/39)
Se estableció la confección y distribución de un documento informativo
en el cual se incluían todos los aspectos actuados hasta la fecha (Anexo
V/40).
El Canciller, mientras tanto, instruyó al Embajador
Tackacs para que informara al Gral. Haig sobre la imposibilidad
argentina de cambiar el párrafo 8 del Proyecto que oportunamente le
fuera presentado.
365. El 21 de Abril, en horas de la mañana, el Secretario se comunicó con el Canciller (Anexo V/41).
El tema central de este llamado era informar sobre la inmediata llegada
a Washington del señor Pym, quien llevaría con él las ideas británicas
respecto de la propuesta argentina.
El Gral. Haig evidenció una
actitud algo más optimista para el curso futuro de las negociaciones,
ofreciéndose para hacer todo lo posible y, si fuese necesario, viajar
nuevamente a Buenos Aires. Solicitó que el Presidente Galtieri estuviese
informado sobre este último ofrecimiento. Además, manifestó su
preocupación respecto del escaso tiempo disponible.
El
Canciller le informó que el Embajador Takacs le entregaría un informe
sintético de la posición argentina y de las metas aspiradas.
A su vez, recalcó la voluntad de continuar las negociaciones.
366. El 21 de abril, el Canciller recibió una carta del Secretario de
Estado (Anexo V/42) en la que señalaba, como puntos principales, los
siguientes:
a. El señor Pym viajaría a Washington, lo que le hacía suponer que la propuesta argentina no había sido rechazada.
b. Consideraba que sería inevitable introducir algunas modificaciones más en la propuesta argentina.
Algunas declaraciones vertidas por el señor Pym a la prensa
desvirtuaban, en parte, los conceptos contenidos en la carta de Haig
(Anexo V/43).
367. Ese mismo día, el Canciller argentino envió una nota de contestación al Gral. Haig (Anexo V/44).
Sus aspectos principales eran:
a. Agradecer las gestiones y la preocupación del Secretario de Estado por el mantenimiento de la paz.
b. Establecer que, para Argentina, independientemente de los términos
que expresaba el acuerdo a concretar, la «conditio sine qua non» debía
ser el término de las negociaciones al 31-DIC. y la seguridad, a esa
fecha, del reconocimiento de su soberanía sobre las Islas.
Con
esta nueva variante, nuestro país flexibilizaba su posición dentro de
las partes indicadas por el Gral. Haig, en el sentido de que a Gran
Bretaña le interesaba más el Gobierno de la Isla que su soberanía. Es
decir, se podía llegar a retirar el párrafo 8, de características
negativas para las supuestas pretensiones británicas, a cambio del
otorgamiento de garantías concretas sobre el reconocimiento de la
soberanía argentina en las Islas.
Este documento fue entregado
al Secretario de Estado por el Embajador Takacs, quien recibió
indicaciones del Canciller respecto del tratamiento a otorgar a su
contenido en la conversación con Haig.
368. El 21 de abril se
recibió la contestación del Secretario de Estado a la nota enviada por
el Canciller a través de un cablegrama cursado por el Embajador Takacs,
quien lo había entregado personalmente. La carta de contestación del
Secretario de Estado de incluye como Anexo V/45.
369. El 22 de
abril el Canciller se comunicó con el Embajador Takacs y lo instruyó con
referencia a la contestación a la nota de Haig. (Anexo V/46).
El Canciller indicó:
a. Con respecto a la flexibilidad para describir el concepto de
soberanía, debía orientarse según los términos contenidos en carta que
le fuera entregada el 21 de abril.
b. Con respecto a la continuación de su gestión, le enviaba su agradecimiento.
c. Con respecto al envío de las primeras noticias sobre la posición británica, quedaba a la espera.
d. Con respecto a una posible reunión con el General Haig, ésta podía
ser posible, si es que se producían avances que justificaran las
conversaciones.
e. Con respecto a la convicción el Gral. Haig
de que los británicos podían iniciar las hostilidades, se manifestaba
sorpresa por dicha afirmación, indicando que su eventual ocurrencia
alteraría los términos de la negociación.
370. El 23 de abril, y
al término del segundo día de conversaciones con el señor Pym, el
Secretario Haig informó al Canciller respecto del avance de la
negociación. En ese informe expresaba QUE LA PROPUESTA ARGENTINA NO
HABÍA SIDO ACEPTADA POR LOS BRITÁNICOS.
Agregaba que se había
hecho un gran esfuerzo y QUE ESPERABA CONTAR CON UN NUEVO TEXTO
ARGENTINO para su futuro encuentro del 25 de abril. (Anexo V/47).
371. Mientras tanto, la prensa de EE.UU. informaba respecto de la
gestión de Haig, la posición norteamericana y el contenido esencial de
la postura británica. (Anexo V/48).
372. El 23 de abril, Gran
Bretaña puso en vigencia la ampliación de la zona de exclusión a toda
nave o aeronave que se acercara a la Fuerza de Tareas británica.
Argentina, por nota S/14998 del 24 de abril, elevó su protesta formal ante la medida (Anexo V/49).
373. Otra nota, la S/14999 del 25 de abril, denunció la agresión británica en las Islas Georgias del Sur. (Anexo V/50).
374. En las primeras horas del 25 de abril, los británicos atacaron
Georgias y la guarnición argentina se rindió. Ese mismo día llegó a
Washington el Canciller argentino. Personal del Departamento de Estado
que lo aguardaba en el aeropuerto, le adelantó que el General Haig
deseaba verlo para entregarle una proposición simultánea de EE.UU. a la
Argentina y a Gran Bretaña. Costa Méndez consultó telefónicamente con el
Presidente Galtieri y se resolvió que no debía entrevistarse con Haig.
Este último llamó por teléfono al Canciller argentino, deploró la
negativa y dijo tener lista la propuesta del Presidente Reagan para
evitar una tragedia. (Informe de los ex Comandantes).
375. A las 18.45, se produjo un llamado telefónico del General Haig (Anexo V/52).
Los aspectos importantes que merecen destacarse son:
a. La gestión de asistencia sería asumida por el Presidente Reagan.
b. Existía una propuesta de Reagan para ser sometida a las partes.
c. Requería que la audiencia con el Dr. Costa Méndez no se diera por cancelada, sino por postergada.
d. Solicitaba que el Canciller lo llamase al día siguiente, pues se preveía acciones mayores.
e. Preguntaba si el Canciller, en reunión con periodistas, haría referencia al Gobierno de EE.UU.
376. El día 25 de abril, Argentina declaró totalmente terminadas las
negociaciones con Gran Bretaña, pero no la intervención de EE.UU. en la
búsqueda de una posible solución de la crisis de Malvinas.
Esta
manifestación, expresada por el Canciller y tácitamente incluida en la
nota S/14959 presentada ante el Consejo de Seguridad, sirvió, además,
como argumento a la posición británica, en el sentido de que nuestro
país rehuía la búsqueda de una solución negociada y pacífica.
377. El 26 de abril, Gran Bretaña presenta ante el Consejo de Seguridad
la nota S/15002, en la que establecía las razones que la habían llevado a
la reocupación de Georgias (Anexo V/53).
378. Ese mismo día se
inició la XX reunión de la OEA. El Dr. Costa Méndez pronunció un
encendido alegato, en el cual, entre otros conceptos, expresó: «la
bandera argentina, bandera americana, no será arriada mientras corra una
gota de sangre por las venas del último soldado argentino que defiende
las Islas Malvinas».
379. El discurso produjo un gran efecto en
la Asamblea, pero su tono bélico y emocional comprometió nuestra
posición y estrechó peligrosamente el camino para una negociación
razonable.
380. A las 22.15 horas, el Gral. Iglesias,
integrante de la misión Argentina, se comunicó telefónicamente con el
Presidente Galtieri y le informó sobre las intensas gestiones de ese día
que incluían una reunión de Haig con Costa Méndez (Anexo V/54).
381. El General Haig, en su alocución, manifestó el absoluto respeto de
EE.UU. hacia la vigencia del derecho internacional, y su negativa a
convalidar cambios sustentados en el uso de la fuerza. Asimismo, expresó
la amistad de su gobierno hacia ambas partes y el hecho de que el
gobierno británico era su mayor aliado y deseaba una solución pacífica.
382. Mientras tanto, Cuba gestionaba el apoyo del Movimiento de los No Alineados. (Anexo V/56).
383. El 27 de abril, simultáneamente en Buenos Aires y Washington, el
COMIL y el Canciller recibieron UNA COPIA DEL DOCUMENTO ELABORADO POR
EE.UU. (Anexo V/57). Ver copia al final de este Capítulo. Este documento
constaba de tres apartados principales:
a. Memorándum de acuerdo (Anexo V/58).
b. Protocolo por el que se constituía a la autoridad especial interina en virtud del memorándum de acuerdo (Anexo V/59).
c. Carta de aceptación de la función de verificación (Anexo V/60).
Estos documentos estaban acompañados por una aclaración del Secretario
de Estado, concediendo a Argentina un plazo hasta la medianoche del día
27 de abril para contestar los mismos.
384. Inmediatamente, el Gobierno Argentino se dedicó al análisis detallado del Proyecto presentado por EE.UU. (Anexo V/61).
385. En horas de la tarde, dicho análisis quedó concluido y definidas
las diferencias fundamentales con el proyecto argentino del 19 de abril
(Anexo V/61).
Frecuentes consultas con el Ministro de
Relaciones Exteriores permitieron conocer la opinión del equipo que,
simultáneamente, realizaba tareas similares en Washington. (Anexo V/62).
386. A las 20.30 horas, el Presidente de la Nación tuvo en su poder los
comentarios de ambos equipos de trabajo, y se reunió el COMIL para
decidir las medidas a adoptar respecto de este documento.
Luego
de evaluar las conclusiones alcanzadas, y debido a la complejidad de
los temas tratados, se resolvió no acepar la propuesta en el término de
tiempo impuesto, recomendándosele al Canciller algunas ideas que, como
guía, debía utilizar en las oportunidades que éste juzgara convenientes.
387. En las últimas horas del 27 de abril, el Secretario General de las
Naciones Unidas remitió un documento ofreciendo la presencia de UN para
verificar el retiro de las fuerzas, arreglos administrativos,
administración temporal y presencia de civiles y militares de UN.
Similares comunicados habían sido entregados a Gran Bretaña y EE.UU.
388. El día 28 de abril, por nota S/15-008, el Presidente de la
Vigésima Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores de la
OEA, Estanislao Valdez Otero, hizo saber al Presidente del Consejo de
Seguridad que la Reunión había emitido la Resolución I, cuyo texto
llevaba a conocimiento del alto organismo (Anexo V/63).
389. El
Reino Unido, mientras tanto, dirigió al Consejo de Seguridad las notas
S/15005 y S/15007 en las que, respectivamente, amplió los alcances de la
zona de exclusión a cualquier nave o aeronave que actuara en apoyo de
la ocupación argentina de las islas, y defendió su posición ante las
declaraciones del Buró de Coordinación del Movimiento de Países No
Alineados, de fecha 26 de abril.
390.También ese día (28 de
abril), el Secretario de Estado y el Canciller se reunieron en el
Departamento de Estado (Washington) por espacio de 1 hora 45 minutos. La
síntesis de la conversación se incluye como Anexo V/64.
Independientemente de la anexión de la mencionada síntesis, resulta de
gran importancia destacar el contenido fundamental de las
manifestaciones del Gral. Haig, por cuanto señala una postura que
podríamos definir como concluyente respecto de la posición asumida por
EE.UU.
Los lineamientos sobre lo cuales se apoyó dicha posición son los siguientes:
a. Argentina, a través de UN, sólo obtendría malas alianzas.
b. Contrariamente al comentario recogido en sus visitas a Buenos Aires,
Gran Bretaña estaba dispuesta a atacar. Si no había negociación
inminente, Argentina iría a la guerra.
c. Si hubiese guerra,
Gran Bretaña, EE.UU. y la OTAN y el Mundo Occidental harían una presión
tal, que el gobierno argentino caería.
d. El gobierno británico había mostrado desagrado ante el documento pero creía que lo aceptaran si así lo hacía Argentina.
e. Consideraba que el documento señalaba un cambio fundamental en el
Status de las islas, pero que otro lenguaje significaría prejuzgar, cosa
que EE.UU. no podía apoyar.
f. En caso de guerra, EE.UU. debería apoyar rápida y sólidamente a Gran Bretaña.
g. Todo se resumía en una cuestión de confianza. Gran Bretaña no podía volver a enfrentar una crisis como la actual.
h. Si había guerra, EE.UU. debería culpar a alguno de los dos países de haberla provocado.
i. El Presidente Reagan podría dar ciertas seguridades respecto de la
negociación pero estaba impedido de garantizar el resultado final,
puesto que, de hacerlo, no sobreviviría políticamente.
391. El
día 29 de abril, el Reino Unido y Argentina cursaron, respectivamente,
las notas S/15010 y S15014. Mediante la primera, se formulaban
objeciones a la Resolución I de la Reunión de Consulta de la OEA; por la
segunda, se hacían advertencias contrarias al establecimiento de una
zona de exclusión total en la zona de Malvinas.
392. En la
mañana del 29 de abril, el Embajador Takacs hizo entrega al
Subsecretario Enders de la contestación oficial de la República
Argentina a la última propuesta de EE.UU. (la que fue entregada el 27 de
abril). (Anexo V/65).
393. Mientras tanto, el Agregado Militar
Argentino en Washington mantuvo contacto telefónico con Cancillería, en
relación con las primeras impresiones recogidas respecto de la carta
presentada al Secretario de Estado, durante la mañana.
Los
comentarios recibidos del Sr. Enders indicaban que la carta argentina
significaba el virtual rechazo e la propuesta y que, por la tarde
saldría un comunicado de EE.UU. en el que establecía su decisión de
cesar su asistencia en el conflicto. Posiblemente, el Senado pediría la
adopción de sanciones contra Argentina.
394. Recibida la carta del Canciller en el Departamento de Estado, se produjo la inmediata respuesta. (Anexo V/66).
En su carta, el General Haig señalaba los siguientes aspectos fundamentales:
a. Lamentaba que Argentina no estuviera aún dispuesta a aceptar la propuesta.
b. Comprendía la frustración argentina después de tantos años de estériles negociaciones.
c. Destacaba que una solución aceptable no podía contemplar las exigencias básicas de las partes, por lo menos inicialmente.
d. Agradecía las expresiones relativas a su gestión, indicando que el
interés de EE.UU. lo llevaba a prevenir cualquier probabilidad de
conflicto.
e. Las bases de negociación habían sido equitativas,
la propuesta era justa y razonable y con resultados a largo plazo
favorables para las partes.
f. EE.UU. quedaba a la espera del logro de una solución pacífica, a la que comprometía sus esfuerzos.
EN ESTE PUNTO SE PRODUCE UN CAMBIO DE TONO E EL CONTENIDO DE LA CARTA.
g. EE.UU. dejaba en claro que no apoyaba el uso de la fuerza e indicaba que era Argentina la que había precipitado la crisis.
h. El Secretario haría, al día siguiente (30-ABR), una declaración de prensa en la que explicaría:
1) Las gestiones de EE.UU. para la solución el conflicto.
2) La errónea decisión del gobierno argentino al no aceptar la propuesta.
3) Las razones por las cuales EE.UU. había tenido esperanzas en el
sentido de que la propuesta podría haber sido considerada por Gran
Bretaña.
4) Los pasos a seguir (sanciones), en los campos económico y militar.
i. Otras medidas a adoptar por EE.UU. serían:
1) Consejo que se daría a los ciudadanos americanos de no viajar a
Argentina debido a las represalias de las que podían ser objeto. Amenaza
sobre la reacción que tomaría EE.UU., si eso se produjera.
2)
Se consideraría la aplicación de otras medidas más impactantes, cuya
efectivización se llevaría acabo en caso de que las relaciones se
deterioraran aún más.
j. Anticipaba el infortunio que vendría y manifestaba su predisposición para intervenir en una solución diplomática.
395. El 30 de abril, tanto Gran Bretaña como Argentina hicieron varias
presentaciones formales, en notas dirigidas al Presidente del Consejo de
Seguridad, expresando su posición ante las diferentes medidas adoptadas
por el oponente.
396. Cerca del mediodía, de acuerdo con lo
anticipado, el Secretario de Estado emitió una declaración de prensa
detallando la gestión del Gobierno de EE.UU. en el conflicto.
La referida declaración resultó de extraordinaria importancia por cuanto
refleja, claramente, los verdaderos alcances de la posición negociadora
de EE.UU. y contribuye a la emisión de las conclusiones de esta
Comisión referidas a la gestión Haig.
El texto se incluye como Anexo V/67.
Los aspectos principales contenidos en la misma son:
a. CON RESPECTO A LOS MOTIVOS DE EE.UU. PARA INTERVENIR.
1) El peligro potencial que representaba un conflicto en el Atlántico Sur.
2) El convencimiento norteamericano con respecto del derecho internacional y de la solución pacífica de las controversias.
3) Los problemas creados en torno a la solidaridad hemisférica, en
momentos en que los adversarios ideológicos buscaban obtener posiciones
de influencia en el Continente Americano.
4) La confianza expresada por xxxx con respecto a la intervención de EE.UU.
5) El requerimiento de los gobiernos de los dos países, uno de los cuales era su más cercano aliado.
b. CON RESPECTO A LA PROPUESTA DE EE.UU.
1) El Secretario de Estado no mencionó los antecedentes de la propuesta formulada por su Gobierno el día 27 de abril.
Es decir, no hizo ninguna referencia a las posiciones de las partes
durante las conversaciones mantenidas en ambas capitales, excepto
señalar que la idea sostenida era la de tratar de clarificar las
posturas, sin tomar posición respecto de los méritos de las mismas.
Solamente señaló que la propuesta americana surgió «ante la perspectiva de llegar a hostilidades más intensas».
2) Afirmó que la propuesta de su gobierno «representaba nuestra mejor
estimación de lo que las dos partes podrían razonablemente aceptar».
3) Indicó que el contenido esencial de la misma, comprendía: cese de
hostilidades; retiro de las fuerzas de ambos países; fin de las
sanciones; establecimiento de un gobierno interino (EE.UU.- Gran
Bretaña-Argentina) para mantener el acuerdo continuación de la
tradicional administración local, con participación argentina;
procedimientos para encarar la cooperación y el desarrollo de las Islas y
el establecimiento de bases para las negociaciones finales, TOMANDO EN
CUENTA LOS INTERESES DE AMBAS PARTES Y EL DESEO DE LOS HABITANTES.
4) Señaló que EE.UU. tuvo razones para esperar que Gran Bretaña
consideraría un ajuste a la propuesta (esto significa que posiblemente
la propuesta definitiva hubiese sido más dura luego de introducidos los
«ajustes» británicos).
5) Argentina informó que no podría aceptar la propuesta (lo cual no se ajusta estrictamente a la verdad).
c. CON RESPECTO A LA POSICIÓN DE LAS PARTES.
1) ARGENTINA
– Requería que la propuesta asegurara su eventual soberanía o un papel
inmediato en el gobierno de las islas que la condujera a ella (esto era
considerado por EE.UU. como un prejuicio acerca del resultado).
2) GRAN BRETAÑA
– Afirmaba la necesidad de respetar los puntos de vista (en realidad, los deseos de los isleños).
3) EE.UU.
– Se abstendría de tomar medidas en respuesta a la toma de las Islas
por Argentina, debido a que las mismas podrían haber interferido en su
gestión para la búsqueda de la paz.
– Gran Bretaña mostraba una
completa comprensión ante esta posición (lo cual no era cierto, ya que
Gran Bretaña exigía, desde el principio una franca posición de apoyo por
parte de EE.UU.).
d. CON RESPECTO AL FRACASO DE LA PROPUESTA
1) EE.UU. debía adoptar pasos concretos para señalar que NO PODÍA NI
PODRÍA PERDONAR EL USO DE LA FUERZA ILEGAL PARA DIRIMIR DISPUTAS.
2) El Presidente Reagan ordenaba:
– La supresión de toda exportación militar a Argentina.
– El impuesto de certificación de elegibilidad argentina para las ventas militares.
– La suspensión de nuevos créditos bancarios de exportación-importación y garantía.
– La suspensión de garantías de créditos.
– La respuesta positiva a los requerimientos de materiales para las fuerzas británicas.
e. CON RESPECTO AL FUTURO DEL CONFLICTO
1) La política de EE.UU. continuaría siendo guiada de acuerdo a derecho.
2) El deseo era el de facilitar un arreglo favorable y temprano.
3) EE.UU. continuaba dispuesto a asistir a las partes.
4) EL ÉXITO MILITAR NO GARANTIZABA LA SOLUCIÓN DEFINITIVA DEL PROBLEMA.
ESTA LLEGARÍA POR MEDIO DE UNA NEGOCIACIÓN ACEPTABLE DE LAS PARTES.
397. El mismo día 30 de Abril, el General Haig, en nota dirigida al
Secretario General de la OEA (Anexo V/68), reiteró los términos de la
declaración de prensa formulada por su gobierno y expresó su
preocupación por la necesidad de insistir en la búsqueda de una solución
pacífica del conflicto.
398. A las 18.00 horas del día 30 de
abril, en Buenos Aires, el COMIL decidió emitir una Declaración en la
que, para conocimiento de la opinión pública, expresaba la posición
argentina ante la gestión desarrollada por el Gobierno de EE.UU., a
través del Secretario de Estado (Anexo V/69).
399. El Canciller
argentino, antes de iniciar su regreso al país desde la ciudad de New
York, declaró a la prensa internacional su decepción ante la posición
asumida por EE.UU., desconociendo lo resuelto por la OEA; expresó la
constante voluntad negociadora argentina y ENFATIZÓ EL HECHO DE QUE
ARGENTINA NO RECHAZABA LA PROPUESTA NORTEAMERICANA, SINO QUE SOLAMENTE
HABÍA FORMULADO ALGUNAS OBSERVACIONES.
Posteriormente, el 2 de
Mayo, la Cancillería presentó una enérgica nota de protesta respecto de
las declaraciones del General Haig del 29 de Abril (Anexo V/70).
400. Finalizaba, de esta manera, el tratamiento de todas las cuestiones
de importancia relacionadas con lo que había dado en llamarse «la
gestión Haig». A continuación, esta Comisión formulará sus conclusiones
fundamentales.
Para poder extraer conclusiones valederas
respecto de la actitud asumida por el Gobierno Argentino durante la
indicada gestión, resulta necesario puntualizar algunos aspectos
referidos a las posiciones británicas y norteamericanas que guardan
relación con la misma.
La Comisión ha dividido el desarrollo de
la gestión Haig en etapas, dentro de las cuales señalará brevemente el
comportamiento de los interesados.
a. PRIMERA ETAPA, que se desarrolla desde la iniciación del conflicto hasta la designación del General Haig.
1) GRAN BRETAÑA
– Realizó la primera contraofensiva invocando los principios del
derecho internacional y logró que el Consejo de Seguridad adoptara la
Resolución 502.
– La poco estabilizada situación del gobierno
conservador, más la inmediata reacción de su oposición, hicieron poco
probable encontrar una disposición complaciente a retrotraer sus
exigencias de alcanzar el objetivo fijado.
– Una solución poco satisfactoria para Gran Bretaña hubiera podido significar, muy probablemente, la caía del gobierno.
CONCLUSIÓN
Con el apoyo del derecho y de la opinión internacional de los estados
con mayor peso político y económico del mundo occidental y con una
situación interna que otorgaba al Gobierno escaso margen de
flexibilidad, Gran Bretaña encaró esta etapa de las negociaciones con
una posición rígida que puede sintetizarse en su aspiración de retornar
al Status previo al 2 de abril como condición para iniciar cualquier
negociación.
2) EE.UU.
– Asumió su rol de potencia
hegemónica e inició sus esfuerzos para evitar un conflicto que alteraría
el orden en el Continente Americano, sumándose a otras circunstancias
conflictivas que se vivían en el mismo.
– Contó, para ello con el expreso pedido de su principal aliado y con la aceptación de las partes.
– Supo de la firme determinación británica.
– Representó un interés superior a cualquier otro tipo de
consideración, la preservación del Gobierno Conservador, por todas sus
implicaciones en el ámbito de la NATO.
– Condenó oficialmente
la posición argentina (Resolución 502). Los principios que sustentaba
internacionalmente eran los que en esa oportunidad invocaba Gran
Bretaña.
– Descartó la superioridad militar británica.
– Evitó un compromiso mayor al rechazar la realización de una gestión de buenos oficios o una mediación,.
CONCLUSIÓN
Se prestó a iniciar su gestión negociadora con el convencimiento de que
las máximas aspiraciones de cada una de las partes deberían resignarse
para el logro de una solución. Argentina era la parte que debería ceder
más.
3) ARGENTINA
– Consideró expresamente esta participación de EE.UU., para adoptar la resolución de ocupar las Islas.
– EE.UU. se interpondría ante cualquier intento militar británico destinado a recuperar las Islas.
CONCLUSIÓN
Se concretaron exactamente las previsiones argentinas respecto de la actitud que asumiría EE.UU.
b. SEGUNDA ETAPA, que se inició con el viaje de Haig a Londres, el 7 de
abril, y finalizó con su regreso desde Buenos Aires hacia Washington,
el 19 de abril, siendo portador del Proyecto Argentino.
1.GRAN BRETAÑA
– Logró, basada en acuerdos previos, la utilización de la base militar de EE.UU. en la Isla Ascensión.
– Realizó el movimiento de la masa de la Fuerza de Tareas hasta la mencionada isla.
– Dispuso que el día 16 de abril la Task Force partiera desde la Isla
Ascensión hacia el Atlántico Sur, oportunidad en que el General Haig se
encontraba en Buenos Aires.
– Sostuvo que buscaba una solución
pacífica y negociada, pero aclaró que en modo alguno descartaba el
empleo de los medios militares para recuperar las islas.
–
Insistió reiteradamente en que el sustento de su postura y de su actitud
estaba dado por la Resolución 502. El incumplimiento de la misma por
Argentina la autorizaba a hacer uso del derecho de legítima defensa.
CONCLUSIÓN
Durante todo este período incrementó la solidez de su posición interna y
externa, ubicaba sus medios militares en condiciones de realiza
operaciones y mantuvo, con respecto a la negociación encarada por Haig,
sus requisitos al volver al Status previo de abril, antes de iniciar las
conversaciones con Argentina.
2) EE.UU.
– El General Haig realizó dos viajes a cada capital. El viaje inicial lo realizó a Londres.
– En sus dos visitas a Buenos Aires nunca trajo ningún documento que
estableciese, real y concretamente, cuál era la posición oficial
británica respecto de su gestión.
– El General Haig sólo se limitó a manifestar los aspectos que, según su opinión, los británicos podrían llegar a aceptar.
– El Secretario de Estado reclamó confianza en la actitud que, con
posterioridad, mantendría EE.UU., pero indicó que no podía dar garantía
efectiva de ella.
CONCLUSIÓN
Se vio materializado el
interés de EE.UU. para no perder su rol protagónico como potencia
hegemónica, inclusive tratando de impedir que la cuestión fuese elevada a
otros organismos.
Todo hacía suponer que el Secretario de
Estado confrontaba la inamovible posición británica con la postura
argentina, tratando de que ésta última cediese todo lo necesario.
3) ARGENTINA
– A lo largo de este período flexibilizó su postura inicial.
– Nunca llegó a saber, a través el General Haig, hasta qué punto Gran
Bretaña estaba dispuesta a disminuir sus exigencias iniciales.
–
La opinión pública interna estaba enfervorizada por los
acontecimientos, por lo que una claudicación podría resultar sumamente
perjudicial para la estabilidad del gobierno.
– Argentina
preparó un documento en el que se estableció, concretamente, su postura
de máxima flexibilidad. Este fue entregado el 19 de abril al General
Haig.
CONCLUSIÓN
Esta última propuesta argentina, por
su contenido, contrariaba seriamente la posición británica (posición por
la que estaba aparentemente dispuesta a luchar) y no alcanzaba los
límites hasta los cuales EE.UU. podía presionar al Gobierno de Gran
Bretaña para obligarlo a aceptarla.
c. TERCERA ETAPA, que corresponde a las tratativas de la propuesta presentada por EE.UU. a ambas partes.
1) GRAN BRETAÑA
CONCLUSIÓN
Las manifestaciones británicas respecto de esa propuesta fueron
difusas. Aparentemente no habrían sido del agrado del Gobierno de Gran
Bretaña. No hubo respuesta oficial al respecto.
Se apreció que,
de haber aceptado Argentina, los británicos hubiesen presionado para
introducir algunas modificaciones, pero no la habrían rechazado puesto
que hubiesen perdido posiciones.
2) EE.UU.
– Debió enfrentar la convocatoria del TIAR.
– Mantuvo vigente su intención de encontrar una solución negociada.
– Esta propuesta jugó contra el tiempo. Aceptó solamente observaciones
de detalle, que debieron ser formuladas rápidamente por Argentina.
– Estableció la posición definitiva de EE.UU. Su rechazo significó el
apoyo norteamericano a Gran Bretaña y la sanción de Argentina.
–
Argentina no logró que el General Haig le expusiera en forma concreta, a
través de un documento, los lineamientos básicos de la posición
británica.
– Por su parte, Argentina manifestó una gran flexibilidad a lo largo de las negociaciones.
La posición con que iniciara esta gestión negociadora fe modificándose,
sucesivamente, a través de los diferentes requerimientos formulados por
el Secretario de Estado, hasta llegar al Proyecto del 19 de abril que,
sin ser definitivo, fue ejemplo de las máximas concesiones a las cuales
estaba dispuesta.
– Debe destacarse que Argentina negoció bajo
la constante presión e la acción militar de Gran Bretaña. A esta presión
se sumaron algunos comentarios poco contemplativos del Gral. Haig, en
el sentido de que el tiempo se acababa, que Gran Bretaña rechazaría la
propuesta y se iría a la guerra, que regresaría a Washington porque se
habían agotado las posibilidades, etc., lo cual, evidentemente, no
contribuyó a crear el clima adecuado que las circunstancias requerían.
– Los comentarios de la prensa de EE.UU., y las declaraciones de
ciertas autoridades norteamericanas propiciadoras de una toma de
posición de EE.UU. a favor de Gran Bretaña, tampoco aportaron apoyo a la
imagen de absoluta imparcialidad que hubiese requerido todo lo relativo
a esta negociación.
– Justo es decir que, para quien debía
adoptar decisiones tremendamente significativas basadas sobre la
confianza en una gestión futura del mediador, en nada resultó favorable
esta supuesta parcialidad que se mostraba.
– Una posible
sobreestimación de nuestras reales posibilidades militares, sumadas al
éxito de diplomáticos manifiestos (si bien en foros no significativos
como la OEA), pudieron haber llevado a la conducción argentina a
especular sobre la posibilidad de obtención de resultados definitivos
superiores a los estipulados en la propuesta de EE.UU.
– El
sentimiento triunfalista extendido en la población, alentado en más de
una oportunidad por las propias autoridades, hizo que la gestión
diplomática de los negociadores argentinos se viera influenciada por el
temor de defraudar las expectativas.
CONCLUSIONES
Esta
propuesta, cuyos términos estaban por debajo de las aspiraciones
argentinas, se complementaría con la gestión que EE.UU. podría realizar
en el futuro. Esto último requería un alto grado de confianza por parte
de Argentina en el Gobierno norteamericano, ya que éste, por costo
político, no podía garantizarle los resultados.
3) ARGENTINA
– La propuesta norteamericana no alcanzaba a satisfacer las mínimas aspiraciones nacionales.
– El documento tenía un alto contenido de riesgo.
– Si bien Argentina mantendría una presencia en las Islas, ésta no sería, en modo alguno, decisoria.
– Gran Bretaña, de proponérselo, encontraría justificativos suficientes para prolongar indeterminadamente las negociaciones.
– EE.UU. SE COMPROMETÍA A ORIENTAR LA ACCIÓN FUTURA DE MODO QUE LAS
ASPIRACIONES ARGENTINAS SE VIERAN SATISFECHAS. POR CUESTIONES POLÍTICAS,
ESTE COMPROMISO NO PODÍA FORMALIZARSE POR ESCRITO.
– La
Resolución de la Reunión de Consulta de Cancilleres Americanos había
respaldado la posición argentina, lo cual contribuyó a exaltar el fervor
patriótico argentino.
– No se habían producido hechos de armas significativos (Excepto Georgias).
– La propuesta establecía un precedente favorable al incluir las islas Georgias y Sandwich del Sur.
CONCLUSIONES
Se incluyen, a continuación, las conclusiones de toda la gestión
respecto de Argentina, por cuanto esta tercera etapa, dedicada a la
propuesta norteamericana, resulta el corolario de toda gestión
negociadora encarada por el Secretario de Estado.
– Al haber
considerado como factor fundamental en su decisión de ocupar las islas,
la intervención de EE.UU. para el logro de una solución de conflicto,
que seguramente se generaría, ello implicaba supeditarse a la propuesta
de negociación que este país podría formular.
– No aceptarla, significaba afrontar la respuesta británica, respuesta que el Gobierno argentino había dado por cierta.
– Además, el conflicto que presupondría la no aceptación, colocaría a
EE.UU. al lado de Gran Bretaña, de acuerdo con lo que había sido
oportunamente anticipado
Conclusiones finales de la Comisión respecto de la gestión de asistencia del secretario de Estado de los EE.UU
401.
Las conclusiones finales de esta Comisión respecto de la gestión de
Asistencia del Secretario de Estado de los EE.UU., son las siguientes:
a. La gestión se vio coronada con la propuesta norteamericana del 27 de
abril de 1982. Esta propuesta, a juicio de esta Comisión, IMPLICABA
CIERTOS RIESGOS EN SU ACEPTACIÓN por cuanto la obtención de un resultado
favorable para la República Argentina quedaba supeditada,
exclusivamente, a la buena voluntad del Gobierno de EE.UU. para el
cumplimiento de las promesas expresadas en tal sentido, ya que no
estaban incluidas en el texto de la propuesta ni en ningún documento
adicional.
b. Las relaciones entre Estados no pueden quedar
libradas a acuerdos verbales -sin mayor permanencia que las de los
funcionarios que los asumen-, máxime, cuando entonces se jugaba la
soberanía territorial y, especialmente, cuando una de las partes en la
controversia había mostrado tan poca predisposición al diálogo sincero.
No obstante, el riesgo era aceptable, por lo que esta Comisión opina
que la propuesta pudo ser considerada, toda vez que constituía una
oportunidad para un cambio de estrategia, sin menoscabo para el derecho y
el honor argentinos.
Recordemos, como aval de esta opinión,
que a la fecha de formulación de la propuesta norteamericana, nuestro
país enfrentaba una formidable oposición, manifestada especialmente por:
1) La Resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas,
emitida el 02-ABR bajo el número 502, que obligaba a nuestro país al
inmediato retiro de las fuerzas militares de los archipiélagos
recuperados.
2) El Reino Unido, como clara manifestación de su
intención de recurrir al empleo de la fuerza para recuperar las Islas
Malvinas, ya había preocupado militarmente las Islas Georgias del Sur.
3) Estados Unidos había ratificado su anticipada manifestación de apoyo
a Gran Bretaña para el caso de conflicto, y varias de sus principales
autoridades habían insistido al respecto con los negociadores
argentinos.
4) Los países de la NATO suspendieron el envío de
armas a la Argentina y la Comunidad Económica Europea hizo otro tanto
con respecto a diferentes transacciones comerciales y financieras con
nuestro país.
5) El Comité Militar, que no había previsto una
respuesta británica de magnitud -confiado en una enérgica mediación de
los Estados Unidos-, carecía de planes y medios adecuados para enfrentar
la contingencia y se lanzó a una carrera de improvisaciones para cubrir
apresuradamente la alternativa bélica.
c. Puede considerarse
que el tenor de la propuesta norteamericana no difería demasiado de lo
que EE.UU. estaba en condiciones de obligar a aceptar a Gran Bretaña,
sin provocar la caída del gobierno de Margaret Thatcher.
Por lo
tanto, haber adoptado la decisión de ocupar las Islas bajo el supuesto
de que EE.UU. aportaría la solución del conflicto, para luego no aceptar
su propuesta, implica que hubo un error inexcusable: O NO SE FECTUÓ UNA
CORRECTA APRECIACIÓN PREVIA O, PRODUCIDO EL RESULTADO PREVISTO, NO SE
TUVO LA DECISIÓN DE ACEPTARLO
La intervención del Perú
402.
Durante el mes de abril, el Gobierno del Perú había solicitado a las
partes una tregua de 72 horas con la finalidad de acordar las bases para
la iniciación de conversaciones que condujeran a la solución pacífica
de la crisis.
Un estrecho contacto fue mantenido siempre entre
las Presidencias y Cancillerías de ambos Estados, basados en
sentimientos fraternos profundamente arraigados.
La gestión del
Perú, solidaria con Argentina en las cuestiones de fondo, fue constante
en la búsqueda de la paz y en el arribo a una solución negociada
definitiva del conflicto.
403. Perú tuvo varias intervenciones
pero, la más importante y por tanto a la que esta Comisión otorgará
especial interés, es la referida a una propuesta peruana que se
desarrolló durante la primera semana del mes de mayo.
404. En
la noche del 1° de Mayo, el Canciller peruano, Dr. Javier Arias Stella,
se comunicó con el Dr. Costa Méndez para actualizar su información sobre
los resultados del ataque británico de ese día, requerir la actitud que
iniciaría el gobierno argentino y sugerir una alternativa que estaba
tratando, en esos momentos, con el gobierno de Ecuador (Anexo V/71).
405. En la madrugada del 2 de Mayo se recibió una llamada telefónica
del Presidente Belaúnde al Gral. Galtieri. En ella, el Presidente
peruano ofreció la participación de su país en este esfuerzo al que
tituló de «casi final para evitar lo que puede ser un derramamiento de
sangre que para nosotros sería sumamente doloroso».
El texto de
la conversación mantenida entre ambos mandatarios se incluye como Anexo
V/72, pero se aprecia conveniente destacar las ideas fundamentales de
su contenido:
Estas son:
a. El texto de la propuesta
se elaboró a partir de una conversación entre Belaúnde y el Gral. Haig,
en la cual este último se mostró muy deseoso de llevar algo concreto
para su diálogo del día siguiente con el Sr. Pym. (1)
b. Se
había intercambiado opinión respecto del texto y se había procurado
ponerlo en un lenguaje que los británicos pudieran aceptar.
c. El Grupo de Contacto estaría integrado por cuatro países amigos de las partes.
d. El texto de la propuesta de paz transmitido por el Arquitecto Belaúnde fue el siguiente:
1.Al producirse este intento peruano, el Sr. Pym se encontraba en EE.UU., por lo que su diálogo con Haig era permanente.
TRADUCCIÓN DEL TEXTO EN INGLÉS:
Propuesta de paz en el Atlántico Sur.
1. Cesación inmediata de las hostilidades.
2. Retiro mutuo y simultáneo de las Fuerzas.
3. Introducción de terceras partes para gobernar temporalmente las Islas.
4. Los gobiernos reconocerían la existencia de puntos de vista conflictivos respecto de las Islas.
5. Los gobiernos reconocerían la necesidad de tener en cuenta los
PUNTOS DE VISTA y los INTERESES de los Isleños en la solución final.
6. Las terceras partes -o grupo de contacto- serían Brasil, Perú,
República Federal de Albania y los Estados Unidos de América y,
7. Una solución final debería alcanzarse no después del 30 de abril de
mil novecientos ochenta y tres, bajo la garantía del Grupo de Contacto.
e. Las ideas fueron dictadas por el propio Secretario de Estado. Perú
le formuló algunas objeciones que dieron lugar a un texto más breve, el
que, según la opinión peruana, era mucho más viable.
f. El
Presidente peruano manifestó que creyó notar en el Secretario de Estado
una honda preocupación por una cierta intransigencia del lado británico.
g. Ante un comentario de Belaúnde, acerca de que en el lapso de un año
se terminarían las negociaciones, el Gral. Galtieri dijo «que en
Argentina, después de ciento cincuenta años, un año o dos no preocupan;
lo que me preocupa es que no sea un año sino cincuenta años más».
h. Luego de realizarse otras consideraciones, se estableció que al día siguiente Argentina daría alguna respuesta.
406. En la mañana del 2 de mayo, en momentos en que el Presidente de la
Nación y el Canciller analizaban la propuesta recibida del Gobierno del
Perú, se produjo una nueva llamada telefónica del Arquitecto Belaúnde.
Esta fue recibida directamente por el Dr. Costa Méndez (Anexo V/73) y
el Canciller analizaban la propuesta recibida del Gobierno del Perú, se
produjo una nueva llamada telefónica del Arquitecto Belaúnde.
Esta fue recibida directamente por el Dr. Costa Méndez (Anexo V/73), y
los más importantes aspectos tratados fueron los siguientes:
a. El Presidente del Perú manifestó que lo había llamado el Embajador de EE.UU. en Lima. A continuación, expresó:
«Me propone dos cosas sumamente pequeñas. Primero dice que sólo
utilicemos la versión castellana, seguramente porque la versión inglesa
no está todo lo pulida porque se hizo acá». «Ellos quieren cambiar
PUNTOS DE VISTA por LOS DESEOS».
b. El Canciller expresó que la palabra DESEOS era absolutamente inaceptable.
c. Luego de intercambiar opiniones, quedó definido que Argentina
aceptaba la expresión «THE VIEWS CONCERNING THE INTEREST» («LOS PUNTOS
DE VISTA CONCERNIENTES A LOS INTERESES»).
d. Por último, el
Canciller objetó la presencia de EE.UU. entre los países integrantes del
Grupo de Contacto e indicó que la propuesta de siete puntos podría ser
aceptable en la medida que aclarara expresamente que la administración
británica no sería reinstalada.
e. La conversación se prolongó
en cuestiones de detalle, pero todos giraron alrededor de los tres temas
principales: la no inclusión de los deseos de los isleños, la no
reintroducción de la administración británica total y la no
participación de EE.UU. en la administración interna.
407. En
esa misma mañana, luego de la convención con el Presidente Belaúnde, el
Dr. Costa Méndez se comunicó telefónicamente con el Presidente del
Consejo de Ministros del Perú, Dr. Manuel Ulloa, a quien, si bien le
expresó fundamentalmente consideraciones referidas a la relación de
EE.UU. con América Latina respecto de los últimos acontecimientos, le
destacó:
a. Lo interesante de la propuesta peruana.
b. Las correcciones necesarias en lo referido a intereses/deseos de los pobladores y participación de EE.UU.
c. La oportunidad argentina de concurrir ante Naciones Unidas debido a
los cambios producidos en la situación, el apoyo de los No Alineados y
el veto ruso. Si bien esta oportunidad no se quería utilizar, por el
momento, ella sería empleada si la propuesta peruana no funcionaba.
408. A las 14.50 horas del día 2 de mayo, el Presidente de Perú llamó nuevamente por teléfono al Gral. Galtieri.
El texto de lo conversado se incluye como Anexo V/74.
Los puntos principales de esta conversación, fueron los siguientes:
a. El Gral. Galtieri estableció que en ese momento no le podía dar una
respuesta exacta, pero sí decirle que existía la mejor predisposición.
Se necesitaba esperar hasta la medianoche para contestar.
b. Quedó definido que EE.UU. no integraría el Grupo de Contacto. EE.UU. lo había comprendido.
c. Existía la necesidad de actuar con rapidez para evitar complicaciones.
d. EE.UU. había interrogado al Perú respecto de si lo conversado
contaba con la autorización de la Junta Militar. El contacto con el
Departamento de Estado y la Embajada de EE.UU. en Lima era permanente.
e. El Presidente Belaúnde recomendó que, en la medida de lo posible, no
se tratara de modificar el texto puesto que, «yo tengo la impresión de
que ese texto puede prosperar y que en todo caso los americanos lo hacen
suyo, eso es vital, porque desde luego la influencia de ellos sobre los
ingleses es definitiva.
El Gral. Haig ha manifestado que él haría suya esta proposición, que él la plantearía como suya».
f. El Presidente del Perú indicó que en el texto había algunas
vaguedades que resultaban necesarias, pero que dejaban a salvo la
posición argentina.
Se pretendía que el documento no significara capitulación para las partes, sino un entendimiento honroso.
Debían existir algunos silencios para no obstaculizar la negociación.
g. El Presidente Argentino indicó que, próximamente, la Junta Militar
se reuniría para tratar el proyecto y que esperaba comunicarse con él en
horas de la noche para informarle lo decidido.
409. Durante
todo el día 2 de mayo, Cancillería y el Equipo Especial de Trabajo se
dedicaron a analizar detalladamente la propuesta peruana.
Este análisis se incluye como Anexo V/75.
A las 19.00 horas estaba prevista una reunión del COMIL, oportunidad en que sería expuesto el mencionado análisis.
410. A esa hora se reunió el COMIL. Momentos antes había llegado la
ingrata noticia del hundimiento del Crucero General Belgrano,
circunstancia que sólo es mencionada por la probable repercusión que ha
tenido respecto de la propuesta peruana. (1)
En la citada
reunión, el Canciller hizo una amplia referencia a la propuesta, su
análisis y consideraciones, resolviéndose que se le contestaría al
Presidente peruano y se le informaría que, con la adecuación de algunos
detalles en ciertos puntos de su propuesta, la misma sería aceptada.
1.Recientes declaraciones periodísticas formuladas por el Capitán del
Submarino Conqueror, manifiestan que éste siguió durante 30 horas al
General Belgrano hasta que recibió la orden expresa de torpedearlo.
Cabe destacar que la reunión se vio conmocionada por las noticias de detalle derivadas del hundimiento del Gral. Belgrano.
411. Finalizada la reunión del COMIL, los miembros de la Junta
siguieron reunidos intercambiando opiniones respecto de la propuesta del
Perú.
Esta Comisión ha encontrado puntos de disidencias en el
pensamiento de las principales autoridades nacionales, en cuanto a las
conclusiones arribadas al término de esta reunión (Ver página 60 del
Cap. III informe ex Ctes. en Jefe).
Así, al final de la misma,
el Gral. Galtieri y el Alte. Anaya, sostenían que la propuesta era una
opción que merecía retenerse, haciéndole unas mínimas adecuaciones.
El Gral. Galtieri se comunicaría con el Arquitecto Belaúnde para
expresarle los puntos de vista del Gobierno Argentino sobre la propuesta
formulada y la incidencia negativa que durante estas gestiones
diplomáticas tenía el hundimiento del Crucero Gral. Belgrano.
Por el contrario, para el Brigadier General Lami Dozo, la reunión había
terminado sin que el hecho del hundimiento del Crucero significara el
rechazo de la propuesta y que tales circunstancias debían ser
comunicadas al Presidente peruano por el Gral. Galtieri. Todos
coincidieron en señalar que el gobierno argentino debía designar un
enviado especial para informar al Presidente peruano sobre la resolución
adoptada por el COMIL (1).
412. A las 00.30 horas del día 3 de
mayo, el Gral. Galtieri se comunicó con el Presidente del Perú para
llevar a su conocimiento la decisión argentina. (Anexo V/76).
En dicha conversación, el Presidente peruano dejó en claro:
a. Que apreciaba como un entendimiento tácito que, mientras hubiera una
posible negociación, Gran Bretaña se abstendría de actos agresivos. QUE
ASÍ SE LO HABÍA MANIFESTADO AL SECRETARIO DE ESTADO.
b. Que, según comprendía, los fervientes propósitos peruanos tenían, necesariamente, que entrar en un período de paralización.
c. Que comunicaría al Secretario de Estado la suspensión momentánea de las tratativas.
d. Que el Secretario de Estado, después de su manifestación eufórica
por el avance de las negociaciones, había tenido un vuelco en su
conducta. Que su actitud era de frustración, presentando al señor Pym
como una persona sin interés en lograr la paz y sí en obtener mayores
ventajas para la guerra.
(1) Se decidió que concurriese el Secretario General de la Presidencia. Posteriormente se agregó al Contraalmirante Moya.
e. Que iba a llamar a Haig para decirle que Argentina, si bien estaba
muy bien inclinada a estudiar la propuesta, se había visto en la
obligación de poner de lado dicha actitud, en vista de lo ocurrido.
Requería saber si eso era, concretamente, lo que podía decir a Haig (a esto, el Gral. Galtieri contestó afirmativamente).
Por su parte, el Gral. Galtieri, como aspecto fundamental y sintetizador de su posición, expresó:
a. «Más allá de que los puntos, o los siete puntos, podrían ser en
algunos aspectos reconsiderados y tratados, Arquitecto, pero le vuelvo a
repetir, si bien estamos reconsiderando algunos aspectos de redacción
de los siete puntos, la noticia del crucero General Belgrano dejó de
lado ya todo estudio y razonamiento para apoyarle en este hecho que es
trascendente, psicológica y políticamente, más allá de lo militar, en el
público de la NACIÓN ARGENTINA».
b. Indicó que enviaría al Gral. Iglesias para que expresar al Gobierno peruano la posición argentina.
413. El viaje a Perú del Secretario General de la Presidencia, Gral.
Iglesias, quien lo hizo acompañado por el Jefe de la Casa Militar,
Contraalmirante Moya, ha sido motivo de especial investigación por esta
Comisión, que ha citado expresamente para ello, a los mencionados
Oficiales Superiores.
El desarrollo de las conversaciones
mantenidas por los mismos en Perú puede seguirse en sus respectivas
declaraciones testimoniales pero, en lo que hace a la cuestión de fondo,
es decir, en cuál fue la contestación argentina al Presidente del Perú
con referencia a su propuesta de siete puntos del día 1 / 2 de mayo de
1982, vale transcribir, textualmente, un párrafo de la declaración del
Gral. Iglesias:
«íbamos nosotros a explicarle las razones por
las que Argentina en ese momento, había prácticamente suspendido o
rechazado -yo empleo el término rechazado, porque a mí se me ha dicho –
rechazado – la propuesta peruana. Es decir, que no era una suspensión
sino un rechazo».
Esto puede complementarse con la declaración del Contraalmirante Moya, quien expresa:
«Pero, concretamente, si lo que se desea saber es si a Belaúnde
nosotros le dijimos que si se aceptaba la propuesta, no, no fue así. Le
dijimos que no se aceptaba; y la misión fue para explicarle que no
tuviera absolutamente ningún problema en lo que hace a Argentina».
414. El día 04-MAY regresó de Lima la Comisión enviada por el Gobierno
argentino para entrevistar al Presidente Belaúnde, con el objeto de
explicar la posición argentina.
El Gral. Iglesias y el
Contraalmirante Moya asistieron a la reunión del COMIL, donde expusieron
a los integrantes del mismo los aspectos principales de su cometido.
415. Los miembros del COMIL analizaron, a continuación, aspectos relacionados con la marcha de las negociaciones, anotándose:
a. Una marcada influencia de EE.UU. en toda la gestión encarada por el
Arquitecto Belaúnde. Un aparente renovado interés británico por la
propuesta peruana (comentarios el Gral. Iglesias y conversaciones del
Dr. Costa Méndez con ministros peruanos).
c. El renovado
interés británico coincidía con la gestión iniciada por el Secretario
General de la ONU y la aparente escasa predisposición de Gran Bretaña en
recurrir a este foro.
416. En la tarde del 5 de mayo, el
Presidente del Consejo de Ministros del Perú, Dr. Manuel Ulloa Elías, se
comunicó telefónicamente con el Dr. Costa Méndez (Anexo V/78),
haciéndole saber:
a. Que a su regreso de Londres, el Secretario
Haig había informado al Gobierno Peruano que los británicos «con dos o
tres pequeñas modificaciones estarían dispuestos a aceptar el Memorándum
de los siete puntos, reducidos a seis ahora».
b. Que apreciaba la existencia de un cambio en algunas palabras, lo que haría difícil la aceptación argentina.
c. Que entendía que Gran Bretaña haría la presentación de esas ideas a través de Naciones Unidas.
e. Que la propuesta establecía un cronograma de cumplimiento obligatorio.
417. A las 23.50 horas del día 5 de mayo, el Presidente del Perú se
comunicó con el Gral. Galtieri, ratificando lo expresado en horas de la
tarde por el Dr. Costa Méndez (Anexo V/79).
El aspecto fundamental de su mensaje se incluye en un párrafo que, para mejor comprensión, se transcribe textualmente:
«Yo tengo una versión y la razón de mi llamada es ésta, Gral.: es
hacerle conocer a Ud. si es que Uds. no conocen bien este aspecto, las
aspiraciones y las ideas del gobierno británico, que ellos nos han hecho
llegar indirectamente, porque ha sido por intermedio de EE.UU., una
reacción por la que ellos estarían dispuestos a considerar, yo creo que
esto, desde el punto de vista informativo, puede ser interesante para
Uds.».
«Vea Ud. el documento que yo les pasé, cuando
infortunadamente se interrumpieron las conversaciones por el muy
sensible ataque al Belgrano, teniendo eso como base, ellos han
reaccionado al documento. En general, hay una aceptación, lo hace un
poco más conciso, porque bajan de 7 a 6 puntos, pero le dan algunos
cambios de redacción.
La primera parte, por ejemplo, cesación
inmediata de hostilidades, la dejan; hablan del retiro mutuo, pero ellos
hablan de una, lo que llamarían no redespliegue -éstos son términos un
poco raros- de todas las fuerzas, es decir un no retorno de las fuerzas
durante el período éste ¿no?. En seguida ellos insisten en los países
que inicialmente se mencionaron, no obstante que yo he sido muy claro
que eso no era aceptable para Uds., sobre todo en un caso determinado.
Ellos quisieran que, primero, el grupo de contacto se definiera
entonces, y que tuviera como misión, verificar el retiro; segundo,
administrar el gobierno de las Islas en el período provisional,
consultando con los representantes elegidos de la población de las
Islas. Ud. ve que ahí ellos quieren hacer figurar a las entidades
existentes, y asegurar que no se emprenda acción alguna en las Islas que
contravenga este acuerdo interino; y tercero, asegurar que se respeten
todas las demás disposiciones del acuerdo. Fuera de estas alteraciones,
prácticamente lo demás son palabras más, palabras menos, es más o menos
lo mismo.
De manera que este planeamiento, digamos
estructuralmente, es igual al otro. Aunque en materia de semántica,
naturalmente, jala un poco para las ideas de ellos. Se ve que ellos, más
o menos, están llanos a ceder y yo tengo la información de que los
EE.UU. los harían aceptar estos acuerdos en una discusión.
Esto
es un aspecto de lo que yo quiero informarle, en fin, para que Ud.
pueda tomar las determinaciones que convengan. Pero hay, además, un
cronograma. Este cronograma es sumamente breve, porque se piensa que
habría 24 horas para dar las órdenes e instrucciones del cese del fuego,
y que, después, sólo habría 48 horas para el trabajo, pero que una vez
iniciado el cese del fuego habría 12 horas para contestar negativa o
afirmativamente sobre el documento que sería presentado con previa
consulta.
Pero, en fin, a voluntad de ambas partes, lo que es
bien difícil naturalmente, y de no haber conformidad entonces, las cosas
volverían a su estado anterior. Eso sería en líneas generales, lo que
me dicen del Departamento de Estado que Inglaterra aceptaría. Yo quiero,
simplemente, transmitírselo, porque nosotros hemos estado en contacto, y
yo tengo el propósito mejor de servir la causa de la paz. Quiero que
Ud. tenga toda la información que pueda llegar a mí por distintos
conductos».
418. Argentina, que ese mismo día 05 de mayo había
aceptado la intervención del Secretario General de la ONU (esta gestión
será desarrollada más adelante en este Capítulo), hizo saber al
Presidente del Perú que llevaría las negociaciones a ese foro.
419. El día 06 de mayo, el Dr. Ulloa envió al Canciller la carta que se incluye como Anexo V/80.
En la misma se adjunta una copia de la propuesta que había sido
confeccionada por Gran Bretaña y EE.UU. y atribuida al Gobierno Peruano
con intervención norteamericana.
Cabe destacar que la propuesta
anglo-norteamericana, incluida en la carta del Dr. Ulloa, coincidía con
las ideas expresadas por el Presidente Belaúnde y el mismo Ulloa en sus
contactos telefónicos, en el sentido de que se trataba de sugerencias
que el Secretario Haig había introducido como ideas que serían aceptadas
por Gran Bretaña.
NOTA: A todo el procedimiento que rodeó a
esta propuesta anglo-norteamericana y su intención de hacerla figurar
como emitida por el Gobierno Peruano, debe prestársele especial atención
puesto que implicó una manifiesta y comprobable mala fe. El 05-AGO-82,
el Secretario de Estado Adjunto para Asuntos Interamericanos, Thomas
Enders, en su exposición ante la Subcomisión de Asuntos Interamericanos
de la Cámara de Representantes de los EE.UU. (que se incluye como Anexo
V/81), AL HACER REFERENCIA A LA PROPOSICIÓN DEL PERÚ-EUA (pág. 14)
mencionó el documento que el Dr. Ulloa desconoció como proveniente de
una cogestión peruano-norteamericana y que atribuyó a una elaboración
anglo-norteamericana. (Anexo V/80).
420. El día 06 de mayo, el
Gobierno del Canadá, a través de su Embajador en Buenos Aires, se
ofreció a participar, junto con el Gobierno Peruano, integrando el Grupo
de Contacto en reemplazo de EE.UU. (Anexo V/82).
421. A partir
de esa fecha y cuando las partes habían aceptado la gestión de la ONU a
través del Secretario General, la propuesta del Perú quedó anulada,
aunque no así los ponderables esfuerzos de este país para llevar la
disputa a una xxx negociada, apoyando la posición argentina en todas las
formas compatibles con sus intereses.
422. Esta Comisión,
concluido el análisis de la gestión peruana correspondiente a la primera
semana de mayo del año 1982, ha llegado a las siguientes conclusiones:
a. CON RESPECTO AL COMPORTAMIENTO DE LAS PARTES INVOLUCRADAS EN RELACIÓN A LA PROPUESTA.
1.EE.UU.
a) Necesitó recomponer su imagen deteriorada en la opinión latinoamericana.
b) Deseó mantener su participación en cualquier tipo de negociación, posiblemente influido por su rol de potencia hegemónica.
c) Influyó, posiblemente, en la propuesta peruana, representando en
ella la posición británica y encauzándola hacia un enunciado que
incluyera los aspectos básicos de la postura de Gran Bretaña.
d) Procedió con mala fe al utilizar el nombre de Perú para hacer circular sus propias proposiciones.
2) PERÚ
a.Demostró su interés en la solución pacífica del conflicto. b.Contó
con el aval de EE.UU. c.Tuvo una adecuada aproximación a Argentina y muy
buen contacto con sus principales dirigentes. d.El hundimiento del
Gral. Belgrano resultó un serio golpe para su posición negociadora. e.La
propuesta se le fue de las manos y cuando se complicó demasiado debió
denunciarla (anglo-norteamericana).
3) GRAN BRETAÑA
a) No aceptó la propuesta peruana (si bien ya tenía nuevos «ingredientes» sugeridos por EE.UU.).
b) Se apoyó en ella cuando la alternativa que se presentaba era la ONU,
alternativa a la que había manifestado permanente rechazo.
c)
Hundió el Crucero A.R.A. Gral. Belgrano en circunstancias en que no
puede descartarse que tal actitud guarde relación con la propuesta.(1)
d) Maniobró a través de EE.UU. para introducirle modificaciones sustanciales que cambiaban su espíritu original.
e) Acusó a Argentina de rechazar la propuesta peruana (que no era tal,
sino la propuesta ya modificada por EE.UU.) y la propuesta
peruano-norteamericana (que no era tal, sino la propuesta
anglo-norteamericana). (2)
4) ARGENTINA.
a)
No otorgó debida importancia a la propuesta, posiblemente debido a su
creencia de que el foro adecuado estaba representado por Naciones
Unidas.
b) Su RECHAZO, si bien no categórico y seguramente
originado en el impacto psicológico provocado por el hundimiento del
Gral. Belgrano, puede considerarse un error diplomático.
b. CON RESPECTO A LA PROPUESTA.
En este caso, sólo corresponde emitir conclusiones con respecto A LA
POSIBLE ACEPTACIÓN O NO DE LA PROPUESTA POR PARTE DE LA ARGENTINA. Por
supuesto que la propuesta se hace referencia es a la presentada por el
señor Presidente del Perú del 02 de mayo, y que consta de siete puntos
(con la inclusión de la sugerencia formulada por el Embajador de EE.UU.
en Lima).
423. Las conclusiones de esta Comisión, son las siguientes:
a. La propuesta contenía elementos poco precisos que podrían tomar
rumbos contrarios a las aspiraciones argentinas pero, al mismo tiempo,
establecía el cese de las hostilidades en momentos en que se había
materializado definitivamente la decisión británica de recuperar las
Islas mediante el empleo de su poder militar.
(1) Ver obra «El Torpedo de la Thatcher»de Tam Dalyell, miembro del Parlamento británico.
(2) Ver obra citada y declaraciones del ex Primer Ministro Heath.
b. LA JUNTA MILITAR, QUE EN CONJUNTO HABÍA COMPRENDIDO ACABADAMENTE LOS
ALCANCES DE LO EXPRESADO, CAMBIÓ SU DECISIÓN, ESTA VEZ SIN EL TOTAL
CONSENSO, SUSTENTÁNDOSE EN FACTORES EMOCIONALES ANTES QUE EN ADECUADOS
FUNDAMENTOS POLÍTICOS.
Las modificaciones ulteriores de la
propuesta peruana y sucesos tan innecesarios y tan confusos como el
hundimiento del Belgrano, inician claramente la forma equívoca con que
procedieron los Gobiernos de EE.UU. y Gran Bretaña.
Otras intervenciones del Perú
424.
Como dijimos anteriormente, la vocación pacifista del Perú y sus
estrechos lazos de unión con la República Argentina, hicieron permanente
su intervención en cuanta oportunidad fuese propicia para encauzar las
negociaciones dentro del marco de la solución de la controversia, sin
recurrir al empleo del poder militar.
Fracasados sus intentos
de acercar a las partes a través de la propuesta específica de paz
presentada en la primera semana de Mayo, Perú vuelve a insistir en le
logro de una tregua el día 20 de Mayo (Anexo V/83).
425. Esta
propuesta, considerada inmediatamente por Argentina como muy positiva,
fue rechazada por Gran Bretaña, quien al día siguiente inició su
desembarco en San Carlos.
426. A partir de ese momento, los
esfuerzos de Perú se orientaron al apoyo de la posición argentina en
todos los fotos en que tuvo oportunidad de debatirse la cuestión de las
Islas Malvinas.
La gestión ofrecida por el rey de España
427.
El día 05 de mayo, el Rey de España dirigió una carta al señor
Secretario General de las Naciones Unidas en la que, ante las
circunstancias que se vivían, solicitaba a las partes un inmediato cese
de las hostilidades y ofrecía sus buenos oficios para la solución
pacífico del conflicto.
Al mismo tiempo, el Embajador de España en Buenos Aires, hacía entrega de una nota similar en Cancillería (Anexo V/84).
Los párrafos principales de la nota, eran los siguientes:
«Mi gobierno ha precisado en sucesivas declaraciones oficiales, su
posición sobre el fondo del problema. Pero permítame, señor Secretario
General, que sobre la base de dichas declaraciones, me dirija a Uds.
exponiéndole la angustia que, como español, como soldado y como Rey
experimento en estas horas».
«No puedo sentirme impasible ante
el enfrentamiento de dos pueblos. Ni contemplar sin conmoverme
profundamente las pérdidas de vidas humanas a que da lugar».
«Pienso que todos los problemas tienen solución justa y honrosa mediante
conversaciones y medios pacíficos, con espíritu de paz, sin llegar a
consecuencias irreparables».
«Mi voz, señor Secretario General,
le transmite el ruego de que haga llegar a ambas partes en conflicto la
solicitud de un alto al fuego que permita continuar las gestiones de
negociación, y formule un llamamiento, tanto a los gobiernos de Europa, a
la que por tantas razones pertenecemos, como a los de la comunidad
Iberoamericana, a la que nos sentimos tan vinculados por la sangre y por
la historia, a fin de que interpongan todas las posibles acciones
conducentes a evitar la prolongación de las hostilidades».
«Mi
gobierno ha puesto a la disposición de los países contendientes sus
buenos oficios para una solución pacífica del conflicto».
«Por
mi parte, ofrezco con el mayor desinterés toda mi buena voluntad y mi
ayuda para contribuir, en la forma y medida que se estimen oportunas, a
la consecución de la paz y de la justicia».
«Muy cordialmente, Juan Carlos Rey».
«A su excelencia D. Javier Pérez de Cuellar, Secretario General de las Naciones Unidas-Nueva York».
428. La Secretaría General de la Presidencia procedió al análisis de la
propuesta española (Anexo V/85) indicando, como acción recomendada, que
el ofrecimiento del Rey Juan Carlos de España debía agradecerse, pero
de ninguna manera podría tomárselo en cuenta como una vía efectiva para
solucionar el conflicto.
Las gestiones en Naciones Unidas
429.
Durante todo el mes de abril, la gestión diplomática argentina se había
centrado en atender las proposiciones del Secretario de Estado de
EE.UU., Gral. Haig, hasta que, producida la convocatoria del TIAR y
adoptada por EE.UU. una posición de franco apoyo al interés británico,
Argentina se vio en la obligación de encarar su próximo accionar en un
foro que pudiese garantizar, en mayor medida, el logro de sus
aspiraciones.
430. En los primeros días de mayo se vivieron las
alternativas de la primera manifestación británica para recuperar las
Islas mediante el empleo de la fuerza. El Consejo de Seguridad fue el
escenario donde las dos partes expresaron las razones que las motivaron.
Simultáneamente, el Presidente del Perú iniciaba su acción para el
logro de la paz y también aportaba su esfuerzo el Rey de España.
431. El día 01 de mayo, se realizó una reunión del COMIL en el Edificio
del Estado Mayor Conjunto. En la oportunidad y con relación a los
aspectos relativos al manejo de la política internacional, se repasaron
nuevamente las diferentes opciones que podría seleccionar el Gobierno
Argentino para orientarse hacia una solución definitiva y favorable de
la crisis.
Dentro de las opciones analizadas, se encontraban:
a.La intervención de un país o grupo de países como mediadores, como
gestores de buenos oficios o como asistentes de las negociaciones. De
hecho, esto era lo que se había desarrollado durante el mes de abril, a
cargo del Gral. Haig, independientemente del fracaso a que había
arribado. Al margen de lo ocurrido, no debía descartarse la posibilidad
del surgimiento de un nuevo mediador.
b. La concurrencia ante los organismos internacionales.
Debido a la actuación ante la OEA, que había producido resultados poco
efectivos, la única solución que quedaba, en este campo, era la
intermediación de la ONU, ya fuese a través del Presidente del Consejo
de Seguridad de ese organismo como tal, o mediante la actuación del
Secretario General de las Naciones Unidas.
432. El COMIL ordenó
a Cancillería que las opciones se analizaran detalladamente y se
presentaran las alternativas y las diferentes posibilidades e
inconvenientes que las mismas podrían presentar.
Independientemente de la realización de esta tarea, que estuvo
finalizada para el día 03 de mayo y cuyo contenido esencial se incluye
como Anexo V/86, en esa reunión el señor Ministro de Relaciones
Exteriores proporcionó al COMIL la siguiente información de sus
apreciaciones:
a.Que los resultados que podían esperarse,
de allí en adelante, de parte del Consejo de Seguridad, serían
diferentes, debido a los vetos que Rusia y China habían anticipado ante
cualquier resolución favorable a Gran Bretaña. b.Que otros integrantes
del Consejo -Panamá, Polonia y España- , habían ratificado su voto
positivo a la posición argentina. c.Que Irlanda parecía inclinada a
hacerlo y que Jordania, Togo, Uganda y Zaire también manifestaron su
acercamiento hacia Argentina y condenaban la postura británica.
Referente a la situación argentina en Naciones Unidas el Canciller indicó:
a. Que se realizaban gestiones y contactos permanentes ante el movimiento de los No Alineados.
b. Que el nuevo Presidente del Consejo (China) había manifestado que la
declaración del Gral. Haig del día 30 de abril resultaba inaceptable
(Anexo V/87).
c. Que la posición argentina contaba con gran apoyo latinoamericano.
433. Finalizada la exposición del Dr. Costa Méndez y con respecto a las
futuras acciones en el manejo de nuestra política exterior relacionada
con el conflicto, el COMIL decidió lo siguiente:
a. No
solicitar, por el momento, la intervención del Consejo de Seguridad,
hasta tanto la Cancillería no finalizase los estudios ordenados de ese
día.
b. Insistir en la decisión argentina de cumplir una
Resolución 502 de manera integral. Debía recalcarse que ella no
propiciaba el retorno a la situación previa a la ocupación de las islas.
c. Consolidar el apoyo de los No Alineados y de la OEA.
d. Destacar la importancia del tema del colonialismo, que restaba apoyo a Gran Bretaña.
e. Estudiar la posibilidad de convocar nuevamente al TIAR, solicitando,
para ello, la oportuna opinión del representante argentino ante la OEA,
Dr. Quijano.
434. El día 02 de mayo, ya producido el
hundimiento del Crucero A.R.A. Gral. Belgrano, el COMIL analizó la
posibilidad de recurrir al TIAR y/o al Consejo de Seguridad de las UN.
Se resolvió no pedir intervención al Consejo de Seguridad, pero no
manifestar oposición en caso de que un tercer país iniciara la gestión.
Esta resolución fue comunicada a nuestro Embajador ante Naciones Unidas en la noche del día 02 de Mayo. (Anexo V/88).
435. Ese mismo día, el representante argentino ante Naciones Unidas,
Dr. Roca, quien había solicitado a Cancillería la correspondiente
autorización para concurrir a una entrevista solicitada por el
Secretario General de la ONU, y para la cual fue autorizado, informó
sobre el resultado de la misma (Anexo V/89).
Las ideas
fundamentales expresadas por el Secretario General y que fueron
transmitidas por el cable del Dr. Roca, fueron las siguientes:
a. En pocas horas más el Secretario General recibiría al señor Pym, a
quien entregaría una propuesta para que fuese considerada por su
gobierno.
b. Su investidura no le permitía permanecer ajeno al
conflicto. Se creía obligado a aportar una propuesta que, encuadrada
dentro de los contenidos del Artículo 40 de la Carta de las Naciones
Unidas, es decir, sin perjudicar los derechos de las partes, pudiese
aportar una solución definitiva al conflicto.
c. Indicó que,
seguramente, tomaría contacto telefónico con las partes y que, llegado
el caso y para reforzar su intervención, viajaría a ambas capitales.
En esa oportunidad, el Secretario General hizo entrega al Embajador
Roca de un «Aide Memorie», cuyo texto se incluye como Anexo V/90 y que
fue recibido en Buenos Aires el día 02 de mayo, a las 21.30 horas.
436. La propuesta concreta del Secretario General fue la siguiente:
«Se propone que, a partir de la hora H que se especificó»:
«a) El Gobierno de Argentina comience el retiro de sus tropas de las
Islas Malvinas (Falkland Islands) y el Gobierno del Reino Unido el
redespliegue de sus fuerzas navales y comience su retiro de la zona de
las islas Malvinas (Falkland Islands).
Ambos gobiernos terminarían sus retiros en una fecha convenida» (1)
(1) Se interpreta que en lugar de «redespliegue» se ha querido decir repliegue.
«b) Ambos gobiernos comiencen negociaciones para procurar una solución
diplomática a sus diferencias dentro de un plazo convenido».
«c) Ambos gobiernos revoquen sus respectivos anuncios de bloqueos y
zonas de exclusión, y pongan término a todos los actos de hostilidad».
«d) Ambos gobiernos pongan fin a todas las sanciones económicas».
«e) Arreglos de transición comiencen a regir para supervisar el
cumplimiento de las medidas indicadas y atender a las necesidades
administrativas internas».
«El Secretario General desea
reiterar que está dispuesto a prestar toda la asistencia que pueda y, en
ese sentido, recuerda sus conversaciones con los representantes
permanentes de las partes el 19 de abril de 1982, en el curso de las
cuales indicó las formas en que las Naciones Unidas podrían brindar
ayuda».
«Los arreglos prácticos a cualquier papel de las
Naciones Unidas pueden efectuarse rápidamente con el consentimiento de
las partes y previa decisión del Consejo de Seguridad».
«El
Secretario General expresa la ferviente esperanza de que los dos
gobiernos indiquen lo antes posible que están dispuestos a aceptar el
enfoque precedente esbozado».
«Se agradecería que las
comunicaciones escritas pertinentes se recibieran a tiempo para que el
Secretario General pudiera formular el anuncio público el 5 de Mayo de
1982. En ese caso, el Secretario General propondría que la hora H se
fijara para las 1.100 horas (hora de verano de Nueva York) del día 6 de
mayo de 1982».
437. A partir de la recepción de la propuesta
del Secretario General, y coincidentemente con el desarrollo de las
gestiones derivadas de las propuestas formuladas por el señor Presidente
del Perú, aquella fue motivo de detallados estudios por parte de la
Cancillería, con la finalidad de establecer todos sus aspectos positivos
y negativos.
Los intercambios de opinión entre la Cancillería y
la Delegación Argentina ante las Naciones Unidas se hicieron
constantes, a fin de conformar un detallado cuadro de situación.
438. Nuevamente la atención de los foros internacionales se vio
conmovida por los sucesos que diariamente ocurrían en el Atlántico Sur.
En Argentina se provocó un suspenso derivado de las tratativas
encaradas por Perú, lo que hizo que la propuesta del Secretario General
fuera estudiado en detalle, pero que no se formulara ninguna resolución
al respecto. Los esfuerzos argentinos se orientaron a sostener las
premisas de su posición en los diferentes foros internacionales,
buscando incrementar la solidez de la misma.
439. En los días
subsiguientes, hasta el 05 de mayo, fecha indicada por el Secretario
General como plazo conveniente para recibir la opinión de las partes, se
incrementaron los contactos entre el Canciller y el Embajador Argentino
en las Naciones Unidas.
Estos intercambios indicaban la
existencia, dentro del Consejo de Seguridad, de una minoría inclinada a
solicitar la convocatoria mientras la mayoría apreciaba conveniente
esperar la producción de nuevos acontecimientos o la negativa de las
partes a aceptar los buenos oficios del Secretario General.
Los
comentarios recogidos por el Dr. Roca en Nueva York hacían suponer que
Gran Bretaña se mostraba poco dispuesta a aceptar de buena voluntad esa
gestión de Pérez de Cuellar, pero que su negativa significaría la
convocatoria del Consejo.
Nuestro Delegado manifestó que, como
resultado de la negativa de las partes a solicitar medidas concretas, el
trámite de las Naciones Unidas se mostraba demasiado lento.
440. Durante todo el día 03 y parte del día 04 de mayo, tanto
Cancillería como el Equipo Especial de Trabajo, estudiaron la propuesta
del Secretario General, concluyendo ambos organismos sobre la
conveniencia de aceptarla, por cuanto la misma se ajustaba al objetivo
fijado por el Gobierno, que era lograr una solución negociada y pacífica
del conflicto, encuadrada en lo posible, dentro de las cláusulas
contenidas en la Resolución 502.
441. Mientras tanto, el día 04
de mayo, en el Consejo de Seguridad, el Secretario General informaba al
mismo la buena predisposición argentina hacia sus ideas, y la seguridad
de que los británicos se encontraban estudiándolas cuidadosamente y con
gran sentido de urgencia.
Ante una idea circulante en el
Consejo, en el sentido de pedir a las partes «la máxima moderación»,
Gran Bretaña había reaccionado violentamente, logrando que en el
comunicado emitido posteriormente por el Gobierno y en el que se
otorgaban facultades al Secretario General para realizar las gestiones
de buenos oficios, no se mencionara dicha idea.
442. En este
período, los pedidos específicos de la oposición de llevar las
negociaciones al marco de las Naciones Unidas, fueron resistidos
sistemáticamente por el Gobierno de Gran Bretaña.
A una de las
solicitudes concretas, el señor Pym contestó que Gran Bretaña mantenía
opciones abiertas para un eventual papel de las UN; aclaró que no se
había pedido a Gran Bretaña -ni tampoco ella lo quería por el momento-,
una intervención de UN en la crisis de las Falklands, pero dejaba la
puerta abierta para una acción del Organismo, cuando los argentinos se
retiraran de las islas. Al mismo tiempo aclaró que no se veía la
posibilidad de que se produjeran progresos diplomáticos mientras no se
retiraran los argentinos, y que confiaba en que esto se lograría solo
mediante recrudecimiento de presiones diplomáticas, económicas y
militares (Anexo V/91).
Cabe destacar que la manifestación del
señor Pym en cuanto a que no se había requerido a Gran Bretaña la
concurrencia ante la UN, era falsa, ya que el Secretario General había
anticipado al señor Pym el Ayuda Memoria en el que expresaba las bases
de su propuesta.
443. El día 04 de mayo, el Embajador Roca
informó desde Naciones Unidas que la Delegación de Irlanda acababa de
comunicarle que su país se disponía a solicitar la urgente reunión del
Consejo de Seguridad, a cuyos efectos presentaría una nota al Presidente
del Consejo, durante el transcurso de la mañana.
444. Esta
intención respondía al concepto irlandés de que los últimos
acontecimientos en el Atlántico Sur significaban la existencia de una
guerra abierta, que era una amenaza para la paz y un imperativo para
Naciones Unidas participar en el conflicto con el objeto de asegurar su
rápida finalización (Anexo V/92).
Más tarde, el Embajador Roca
informó que Irlanda había presentado formalmente su solicitud sin
requerir inmediata convocatoria, a fin de dar lugar al desarrollo de la
gestión del Secretario General.
445. En una reunión del COMIL
celebrada en horas de esa tarde, se analizaron las últimas informaciones
provenientes de Naciones Unidas, asociadas a la evolución de las
gestiones del Presidente del Perú.
Se apreció que la
revitalización aparentemente otorgada por Gran Bretaña a la propuesta
peruana, era consecuencia de su deseo de dilatar la labor del Consejo de
Seguridad.
La información periodística subsiguiente pareció
confirmar esta escasa disposición británica para recurrir a este foro
(AnexoV/93).
446. Al finalizar la reunión del COMIL, el
Canciller mantuvo contactos telefónicos con el Embajador Roca y con
personal de la Delegación Argentina, a efectos de intercambiar puntos de
vista sobre la marcha de la reunión del Consejo de Seguridad y sobre
las posturas más convenientes a ser adoptadas por la República
Argentina.
Cabe destacar que, hasta ese momento, no existía del
lado argentino idea concreta respecto de cuál podría ser la reacción
británica en relación con la gestión propuesta por el Secretario
General.
447. Durante uno de esos intercambios telefónicos, el
Canciller adelantó el texto del mensaje que pensaba emitir, al día
siguiente, donde aceptaría la gestión del Secretario General para
encontrar una solución pacífica del conflicto.
El Canciller
solicitó al Embajador Roca su opinión sobre el texto, para saber si
coincidía con la evolución de la situación que durante esos momentos se
vivía en UN. La respuesta del Embajador Roca fue afirmativa.
El Embajador destacó, también, la favorable acogida que había tenido en UN la gestión que encararía el Secretario General.
448. También el día 04 de mayo, Gran Bretaña presentó ante el Consejo
de Seguridad una nota donde destacaba los derechos británicos sobre las
Islas Georgias del Sur (Anexo V/94).
449. El día 5 de mayo, la República Argentina aceptó formalmente la gestión del Secretario General (Anexo V/95).
A continuación se transcriben los dos párrafos principales del texto de la nota presentada al Dr. Javier Pérez de Cuellar:
«En nombre Gobierno Argentino acepto su gestión a fin de encontrar
solución conflicto. En lo que concierne a la forma de aproximar a las
partes para una solución pacífica, le presentaré personalmente nuestros
puntos de vista en Nueva York, adonde pienso trasladarme con motivo
reunión Consejo de Seguridad».
«Estimo que el elemento
prioritario de poder negociar es el cese del fuego, ordenado por el
Consejo de Seguridad. No veo cómo podría encaminarse una negociación si
no puede darse la tregua necesaria para actuar sin las presiones
emotivas de ataques y contraataques armados. Esto es concordante con la
Resolución adoptada por la Reunión de Consulta del TIAR».
450.
En la reunión del COMIL realizada el 05 de mayo, se resolvió aprobar la
gestión que, en el marco de las negociaciones en Naciones Unidas a
través del Secretario General, realizaría el Subsecretario de Relaciones
Exteriores, Dr.Ros.
Asimismo, el COMIL aprobó las instrucciones a las que el Delegado Argentino ajustaría su cometido (Anexo V/96).
Una decisión importante adoptada por el COMIL fue la referida a las
negociaciones, en las cuales Argentina manifestaría su agrado por el
cese del fuego, pero donde se indicaría que el retiro de las tropas se
iniciaría sólo después de establecido y aceptado un adecuado marco de
referencia para el previsible acuerdo negociado.
451. El día 06
de mayo se produjo una conversación telefónica muy detallada entre el
Canciller y el Embajador Roca. (Anexo V/97).
De la misma, como aspectos fundamentales, vale destacar:
a. El Reino Unido había dado una respuesta verbal positiva al «Aide Memorie» del Secretario General.
b. Esa respuesta incluía diez comentarios, también verbales, al Ayuda Memoria.
c. El Consejo de Seguridad se reuniría horas más tarde. Se apreciaba
que la presencia del Canciller no era de momento necesaria, puesto que
se trataba de una reunión informal destinada a atender la solicitud
formulada por Irlanda y a considerar la aceptación británica de la
gestión de Pérez de Cuellar, ya que hasta ese momento, sólo se contaba
con la aceptación argentina.
d. El Secretario General aguardaba el viaje del delegado argentino para revisar los diez puntos británicos.
452. La conversación se prolongó durante una hora, previo a la reunión
prevista del COMIL. En esa oportunidad, el Embajador Roca comunicó que
la reunión del Consejo de Seguridad se había levantado, sin determinar
fecha, para una próxima reunión y a la espera del informe del Secretario
General, referido a la marcha de las negociaciones.
El
Embajador Roca hizo diferentes consideraciones a la poca voluntad
manifestada por Gran Bretaña en cuanto a la reunión el Consejo de
Seguridad y a su peso político, suficiente para anularla o dilatarla.
Indicó, además, que el señor Pym había acusado a Argentina de oponerse a
un alto el fuego. Apreciaba necesario evaluar nuestra capacidad para
obtener una región del Consejo y la posibilidad de poner en evidencia la
actitud negativa demostrada por Gran Bretaña.
453. El día 06 de mayo a las 19.00 horas, se reunió el COMIL.
El Canciller expuso sobre el desarrollo de las gestiones de último
momento, indicando que el Consejo de Seguridad no sería convocado hasta
tanto el Secretario General informara sobre los resultados de su
gestión.
El Canciller emitió su opinión respecto de Gran
Bretaña, considerando que se encontraba empeñada en trabar el
funcionamiento del Consejo, ya fuera porque no tenía seguridades sobre
el resultado que podría obtener, o bien porque estaba preparando una
operación militar y no quería verse afectada por el establecimiento de
un eventual cese del fuego.
Al término de la reunión del COMIL, continuaron estudiándose las propuestas del Secretario General.
Ese mismo día viajaron a Nueva York el Subsecretario Ros y el Embajador
García Moritán, a fin de participar en las negociaciones con el
Secretario General.
454. En la madrugada del 07-MAY-82, se
recibió un cable del Embajador Roca (Anexo V/98) conteniendo información
sobre una entrevista que éste había mantenido en horas de la tarde del
06-MAY, con el Secretario García Moritán.
Este Memorándum contiene ocho puntos, que esta Comisión considera conveniente reproducir textualmente:
1. Pérez de Cuellar desea conocer el equivalente argentino a los 10
puntos británicos que posee ya, para compararlos con ellos, y sobre la
base de su análisis, proponer modos de acercamiento.
2. No
desea mostrarnos ahora el papel británico para evitar una reacción
negativa. Dice que otro tanto hará con nuestros comentarios ante el
Embajador Parsons.
3. Memorándum británico no habla de
soberanía, Pérez de Cuellar considera que, a su juicio, no hay ningún
elemento en el documento británico que no pueda ser negociado según
nuestra posición. Parsons comentó que cada uno de sus puntos es
negociable.
4. Principio simultaneidad tratamiento puntos
contenidos en ayuda memoria Secretario General, subsiste. Uso de la
imagen de Cinco trenes que parten simultáneamente.
5. Los problemas más graves se encontrarán en tema referido a arreglo transición.
6. No hay pretensión británica de regresar al «status quo ante bellum».
Ello no podría formar parte de las medidas provisionales.
7.
Marco temporal de ejercicio no debía exceder las 48 horas. Secretario
General no desea que pase más tiempo sin que se vuelva a convocar
reunión consulta informal del Consejo.
8. Secretario General
interpreta que como resultado de la reunión de consulta de esta tarde,
ha quedado una suerte de arreglo sobreentendido entre los miembros del
Consejo, según el cual ambas partes se abstendrán de realizar acciones
militares. Esta apreciación no es compartida por otro miembros del
Consejo, según los cuales Parsons no contestó, lo que no significa
asentimiento.
455. Continuando su política de adoptar medidas
coercitivas ante las posibilidades de negociación, el gobierno de Gran
Bretaña , por nota cursada al Consejo de Seguridad, estableció la
extensión de la zona de exclusión hasta las 12 millas náuticas de la
costa argentina. Esta declaración contrariaba lo expresado en el punto 8
del párrafo anterior (Anexo V/99).
La medida británica originó una nota de protesta argentina (Anexo V/100).
456. El día 07 de mayo, en la reunión del COMIL, el Canciller informó
respecto de las primeras gestiones encaradas por el Subsecretario Ros.
Posteriormente, el Dr. Costa Méndez, se comunicó telefónicamente con
aquél, quien le informó detalladamente el tenor de las conversaciones
sostenidas con Pérez de Cuellar.
La síntesis de estas conversaciones, se incluye como Anexo V/101.
457. A partir de estos primeros contactos del Dr. Ros con el Secretario
General, la metodología de la gestión quedó definida como un
intercambio de ideas en el que se buscarían puntos de coincidencia sobre
los cuales poder ir perfeccionando el acuerdo, todo dentro del espíritu
del Art. 40 de la Carta. Es decir, el Secretario General no impondría a
las partes documentos formales, ni llevaría a conocimiento de una la
opinión de la otra, ni se afectarán las posiciones de fondo de las
mismas.
La puesta en práctica de este sistema fue aprobado por el Reino Unido (Anexo V/102).
El Dr. Ros, de acuerdo con el avance de sus conversaciones, inició una
serie de requerimientos a la Cancillería, derivados de la necesidad de
fijar claramente la posición argentina, para discutirla con el
Secretario General.
458. La opinión respecto de estas primeras
gestiones por partes del Secretario General se reflejaron en un
comentario realizado por el Dr. Ros en una de sus conversaciones
telefónicas con el Canciller la que, para mayor información se
transcribe a continuación:
«Señor Ros. El ejercicio que hemos
comenzado con tu primera aceptación y mi presencia ahora en Nueva York
está recibiendo un especialísimo interés de parte del secretario
General. Pone su mejor buena voluntad».
«Ahora, él está
escuchando las dos campanas. Yo no sé qué es lo que va a terminar
sugiriendo luego de haber oído las dos partes.
No estoy en una
posición como para especificar cuál es el término medio de aproximación
que él buscaría imponernos para juntar a las partes. Por un comentario
muy breve que me hizo cuando salíamos, creo que él cree que no estamos
tan lejos los unos de los otros. Como hay una opinión de tipo general,
no sé cuánto valor darle, pero de todos modos lo que es positivo es que
estamos en este ejercicio y que hemos traído a él una posición muy
constructiva. Esto tengo la impresión que así lo ha recibido».
459. Por su parte, el Canciller evaluaba permanentemente el desarrollo
de la gestión, y sus consideraciones fundamentales pueden deducirse del
párrafo de su conversación con Ros, el día 07 de mayo, en la que
expresa:
Señor Canciller: «Acabo de recibir un télex pidiendo que te llame. Acá hemos oído todos juntos la grabación de las
palabras, las estamos evaluando. Vamos a reunirnos mañana de vuelta, esperamos la segunda parte. Le hemos
comunicado también al Presidente. Te diría que mi opinión personal es un poco más optimista de la de los que me rodean.
Yo creo que hemos ganado algunas cosas. Primero, modificar la posición
de que somos obstruccionistas a toda negociación. Segundo, el hecho del
tipo de administración. Tercero, la renuncia del fideicomiso. Y una gran
tranquilidad de que mientras esto dure, si Gran Bretaña toma alguna
medida, realmente se descolocaría más en la opinión internacional de lo
que se ha descolocado con este loco bloqueo, que además no puede
cumplir.
Lo único que tiene que saber Gran Bretaña es que si se ponen a quince millas de la costa van a ser realmente rechazados».
460. A Las 0930 horas de Nueva York del día 08 de mayo, se celebró la
segunda reunión del Embajador Ros con el Secretario General.
Terminada la misma, el Dr. Ros se comunicó telefónicamente con el
Canciller para informarlo sobre los sucesos más significativos de la
misma y para requerir orientación con respecto a la próxima reunión que
se produciría en horas de la tarde del mismo día.
La grabación de la conversación telefónica se agrega como Anexo V/103.
461. En horas de la tarde, el Embajador Ros se comunicó nuevamente con
el Canciller, esta vez para ponerlo al corriente de las conversaciones
mantenidas con Pérez de Cuellar durante la tarde.
El texto de la conversación se agrega como Anexo V/104.
462. Ante versiones periodísticas circulantes en la prensa
internacional, referidas a una aparente actitud argentina contraria a
las negociaciones, se decidió que el Embajador Ros emitiese un
comunicado en el que reflejara la permanente y manifiesta voluntad
demostrada por Argentina en ese sentido (Anexo V/105).
El
Embajador Argentino en Washington, ingeniero Takacs, fue instruido al
respecto, a fin de que en estrecho contacto con el embajador Ros,
emitiese un comunicado similar a través de la prensa norteamericana.
El Canciller también impartió directivas al Embajador Takacs referentes
a probables gestiones a desarrollar con respecto a autoridades del
Departamento de Estado norteamericano.
463. El día 9 de mayo fue hundido el pesquero «Narwal» por un avión «harrier» perteneciente a la Fuerza de Tareas británica.
E1 hecho fue denunciado por Argentina mediante la nota S/15061, dirigida al Presidente del Consejo de Seguridad.
Simultáneamente, el Embajador Ros mantuvo entrevistas con el Secretario
General de las NU, el Presidente del Consejo de Seguridad y los
Embajadores ante Naciones Unidas de Rusia y Cuba. (Anexo V/106).
464. Ese mismo día 09 de mayo, el Embajador Ros fue invitado a
concurrir a la Residencia del Secretario General, donde se llevó a cabo
una reunión basada, fundamentalmente, en la conversación que éste había
mantenido previamente con el Embajador británico.
El cable
remitido por el Embajador Ros al señor Canciller para ponerlo al tanto
de los temas tratados se incluye como Anexo V/107.
465. El
aspecto principal contenido en los comentarios emitidos por el
Secretario General. fue el referido a una fórmula que, en sus versiones
inglesa y castellana, había hecho entrega al Embajador Ros, y la cual
según sus expresiones, no debía entenderse sino como parte de un todo.
La referida fórmula indicaba:
«Las partes se comprometen a emprender de buena fe negociaciones bajo
los auspicios del Secretario General para la solución pacífica de sus
diferencias y a procurar con sentido de urgencia completar estas
negociaciones antes del 31-DIC-82. Estas negociaciones serán conducidas
sin perjuicio de los derechos, las reclamaciones o las posiciones de las
partes y sin prejuzgar su desenlace».
«The
parties undertake to enter into negotiations in good faith unde te
auspices of the Secretary-General of the United Nations for the peaceful
settlement of their differences and to seek, with a sense of urgency,
the completion of these negotiations by 31 december 1982. These
negotiations shall be conducted without prejudice to the rights, claims
or position of the parties and without prejudgement the outcome».
Tanto
en la mañana como en la tarde del domingo 09 de mayo, el Dr. Ros
mantuvo contacto telefónico con el Canciller, para ponerlo al tanto de
los últimos adelantos de las negociaciones (Anexo V/108).
466.
Mientras tanto, en Buenos Aires, el canciller hizo declaraciones para
una cadena televisiva de EE. UU., que se propagaron ese mismo día, en el
programa «Face the Nation» en la que se estableció, con respecto a la
posición argentina, que «nosotros no ponemos la cuestión de la soberanía
como precondición para sentarnos a la mesa de las negociaciones, pero
sí es el objeto final de toda negociación y de todas las negociaciones».
Esta definición, cuyo trascendente había sido aprobado por el COMIL, tuvo repercusión inmediata. Así, en la
conversación mantenida durante la noche del 09 de mayo en la residencia
del Secretario General, éste le manifestó al Dr. Ros, en relación a la
fórmula que le había entregado, que el Embajador Parsons, quien ya había
vista el programa en la TV norteamericana, «centraba ahora sus ideas en
este aspecto de no prejuzgar sobre el resultado final».
467. Si bien desde el 19 de abril, en el proyecto de acuerdo entregado al Gral. Haig, se habían omitido términos
concretes que hiciesen alusión al reconocimiento de la soberanía, como
requisito imprescindible para las negociaciones, ésta fue la primera vez
en que esta circunstancia gravitante se aclaraba expresa y formalmente.
Si bien en la reunión final del día 09 de mayo el Secretario General
fue sumamente cauto en cuanto a su opinión sobre la actitud británica,
su secretario, el señor Alvaro de Soto, expresó confidencialmente al
Secretario Garcia Moritán lo siguiente:
– Reino Unido no acepta la propuesta.
– Sin el fraseo, que no prejuzga, no hay caso.
– Indicó que no cree que estén dispuestos a aceptar siquiera la sugerencia de ellos de anoche.
– Tampoco aceptan el retiro de tropas en los términos que les hemos adelantado.
Señalaron que la situación, en momentos de la gestión de Haig, era sustancialmente distinta.
Proponen el siguiente retiro de tropas:
La mitad de la flota, con la mitad de nuestras fuerzas.
E1 resto de la flota queda a 200 millas de las Islas.
La totalidad de nuestras fuerzas, y llevan la flota a 2000 millas
– No aceptan el ámbito geográfico amplio.
– Insisten en la administración de ONU con algún tipo de consejo.
– Señaló a título personal que los ve muy duros, sin mayor ánimo negociador y no ve mayor espacio.
– P de C lo hará formalmente mañana.
En una entrevista, Parsons indicó:
«Estamos en el corazón del problema negociando en este momento, dentro
de las 24 horas tiene que haber una definición en ONU». (Anexo V/109).
468. E1 10 de mayo se reunió el COMIL. Luego de escuchar los comentarios del Canciller sobre el avance de las
negociaciones en Naciones Unidas y de analizar las medidas convenientes
a desarrollar en el futuro, el organismo aprobó las instrucciones a
impartir al Subsecretario Ros para sus próximas entrevistas con el
Secretario General. Posteriormente el canciller se comunicó
telefónicamente con el Embajador Ros y le transmitió directivas
pertinentes (Anexo V/110).
469. La síntesis de la posición
argentina al 10 de mayo, en vísperas del ingreso del Embajador al
despacho del Secretario General; donde, en minutos, mantendría una nueva
reunión, queda sintetizada en la conversación del señor Canciller:
«Sr. Canciller. No, no. Escuchá porque la síntesis de la posición sería
hoy, en este momento, la siguiente. Punto primero: nosotros vemos esto
como siempre lo hemos visto, como un «packagedeal», es decir como un
conjunto. En ese conjunto, los cuatro puntos básicos serían los
siguientes: primero, gobierno de las Islas exclusivo por parte de
Naciones Unidas; segundo, ámbito de la negociación, el siempre
establecido en Naciones Unidas, es decir, la cuestión Malvinas comprende
Malvinas, Georgias y Sandwichs del Sur; tercero; esto es muy
importante; fluidez de comunicaciones, que supone acceso de argentinos a
instalarse en la Isla y acceso de argentinos a la propiedad de la Isla,
pero con algún entendimiento que surgirá de las conversaciones, de que
no se le cierre todo posibilidad de conversación para comprar, porque
esto creo que es un punto muy a favor nuestro, por cuanto si la
negociación se rompiera por este punto y sacáramos un plano en el cual
dijera que hay dieciocho propietarios, que no nos dejan comprar o la
posibilidad futuro de comprar, creo que hay un argumento válido ahí. Y
cuarto, dentro de ese «packagedeal», estaríamos dispuestos a aceptar la
cláusula que vos mandaste en el cable que hoy recibimos, cláusula que te
voy a leer para que no tengamos ninguna duda sobre el texto.
Te la leo; la cláusula sería así: Las partes se comprometen a emprender
de buena fe negociaciones bajo los auspicios del Secretario General para
la solución pacífica de sus diferencias y a procurar, con sentido de
urgencia, completar estas negociaciones antes del 31 de diciembre de
1982. Estas negociaciones serán conducidas, sin perjuicio de los
derechos, las reclamaciones o las posiciones de las partes y sin
prejuzgar su desenlace. Hay ahí dos cosas que no nos gustan mucho, como
ya te lo he dicho varias veces. No nos gustó demasiado la palabra
«conducidas», y si pudiéramos usar alguna otra quizá sería mejor. Y lo
otro que no nos gustó es lo de siempre: que en ninguna parte del
documento aparezcan las resoluciones de la Asamblea».
470.
Luego de algunas intervenciones aclaratorias del Embajador Ros, quedó
definida la base para las conversaciones con el Secretario General. El
Canciller dio lectura a un cable que enviaría inmediatamente al Dr. Ros y
en que establecería, concretamente, la posición argentina. La que el
Dr. Ros envió al Secretario General puede considerarse la posición
argentina definitiva (Anexo V/111).
Al término de la reunión el Subsecretario se comunicó con el Canciller, expresándole:
«Sr. Ros: La reunión acaba de terminar; nuestra posición, de acuerdo
con las instrucciones, recibidas, quedó reflejada en un papelito que les
voy a leer, que creo que se ajusta a las instrucciones. Esto se reflejó
en un papel, después de conversar un largo rato con el secretario
general.
«Lo recibió, pero no tomó ningún compromiso de que pudiera ser factible para nuestra parte, más bien se mostró pesimista».
«En dicho papel se colocó lo siguiente:
1) El presente acuerdo se celebra en el ámbito de la Carta de Las
Naciones Unidas y teniendo en cuenta la Resolución 502 del Consejo de
Seguridad de las Naciones Unidas.
2) El acuerdo a que se comprometen las partes no perjudicará sus respectivos derechos, reclamaciones y posiciones.
3) El ámbito geográfico de aplicación de este acuerdo comprenderá los tres archipiélagos considerados por las Naciones Unidas.
4) El gobierno y la administración serán de responsabilidad exclusiva
de las Naciones Unidas. Los observadores podrán izar sus respectivas
banderas.
5) Existirá la libertad de tránsito y residencia para los ciudadanos de las partes, que gozarán de la facultad de
adquirir y disponer de propiedades inmuebles.
6) Las partes se comprometen de buena fe a emprender negociaciones antes del 31 de diciembre de 1982″.
Debe notarse, especialmente, que la diferencia existente entre el texto
definitivo presentado por el Embajador Ros y Las instrucciones
impartidas por el Canciller EN LO REFERENTE AL PUNTO 7°, ya que el
primero de ellos no hace referencia a «NO PREJUZGAR LOS RESULTADOS»
471. En la reunión del COMIL del 11 de mayo, el Canciller expuso sobre
la reunión mantenida par el Dr. Ros con el Secretario General, e hizo su
apreciación sobre el posible desarrollo de las negociaciones y sobre
las medidas a adoptar próximamente.
A las 12:45 horas de Buenos
Aires, la Delegación Argentina se reunió en Naciones Unidas con el
Secretario General. En dicha reunió se cotejaron las posiciones
argentina y británica. El Embajador Ros se comunicó con el Canciller
para informarlo de la reunión (Anexo V/112).
472. Al término de las conversaciones de la mañana, la posición británica que podía considerarse definitiva era la
siguiente:
a. Se debía determinar claramente si se trataba de un acuerdo interino o
de una transferencia escalonada y predeterminada de la soberanía a
Argentina. El concepto de «Without prejudging the outcome» era de
necesaria inclusión.
b. Las DEPENDENCIAS (Georgias y Sandwich)
tenían un status distinto, si bien no se excluía que fueron materia de
las negociaciones.
c. Sobre la distancia de retiro de la flota
británica existía una diferencia importante puesto que las 200 millas
establecidas eran correctas, antes de que la misma hubiese realizado el
desplazamiento.
d. Gran Bretaña podría dejar librado a criterio
del Secretario General la prórroga de las negociaciones, pero no podía
permitir que se fijase una fecha que pudiese dar lugar a la terminación
de la administración interina.
Como cuestiones secundarias:
a. Nueva York sería aceptada como sede de las negociaciones. La
iniciación de las conversaciones a la hora H podría presentar algunos
problemas menores.
b. Disposición aparente para levantar la zona de exclusión y las sanciones, a partir de la hora H.
c. La modificación de las normas de inmigración a Malvinas serían
motivo de consulta, pero, aparentemente, difíciles de aceptar.
El Subsecretario Ros formuló algunos comentarios personales a la posición británica.
473. El Canciller tomó debida nota de los comentarios realizados por el
Embajador Ros e, inmediatamente, se dedicó junto con sus colaboradores
de Cancillería, a elaborar las instrucciones que serían impartidas al
Dr. Ros para que éste las tuviera en cuenta durante su entrevista con el
Secretario General, fijada para horas de la tarde del mismo día.
474. En horas de la tarde, y ya elaboradas las instrucciones para la
delegación argentina, el Canciller procedió a transmitirlas al Jefe de
la misma (Anexo V/113).
El contenido fundamental quedó resumido en cuatro aspectos. Estos en forma sintética, expresaban lo siguiente:
a. El párrafo final de la fórmula sugerida por el Secretario General
(«Estas negociaciones serán CONDUCIDAS sin perjuicio de los derechos,
las reclamaciones o las posiciones de las partes y sin prejuzgar su
desenlace»), sería aceptada, pero el término «conducidas» sería cambiado
por el de «COMENZADAS».
b. Las referencias a la Carta y a las
Resoluciones de la Asamblea General sobre la cuestión de las Islas,
deberían figurar en el Acuerdo.
c. El administrador podría designar asesores, pero éstos no formarían un cuerpo colegiado.
d. La disposición británica en cuanto a la imposibilidad del logro de
condiciones igualitarias para los nacionales argentinos (especialmente,
lo referido a la IFIC), indicaban la voluntad británica para las
negociaciones. (Anexo V/114).
475. Mientras tanto, en Buenos
Aires, el delegado especial norteamericano, Gral. Walters, mantuvo
contactos personales con los Comandantes en Jefe. En esas reuniones
aclararon fundamentalmente, aspectos referidos a la ayuda que EE.UU.
brinda a Gran Bretaña. Durante el cumplimiento de su cometido no
incursionó en problemas de fondo y dejó la impresión de que su viaje,
antes que prestar atención a reales problemas de fondo, respondía a las
necesidades internas de recomponer la imagen de su país.
El
General Walters aclaró específicamente a cada una de los Comandantes que
los EE.UU. no estaban proveyendo a las fuerzas británicas información
satelitaria ni de ningún otro tipo operacional. Solamente proveían
información meteorológica y apoyo logístico (Declaración de los ex
Comandantes).
476. Al finalizar la reunión de Naciones Unidas
realizada en la tarde del 11 de mayo, el Dr. Ros se comunicó nuevamente
con el Canciller para expresarle las impresiones recogidas durante el
desarrollo de la misma.
El Subsecretario indicó al Canciller su
apreciación al respecto, opinando que se había llegado al máximo de lo
que la República Argentina podía ceder.
Si Gran Bretaña
insistía en quitar del acuerdo lo relativo a las Resoluciones de
Naciones Unidas, ello significaba su manifestación de su falta de
interés para negociar seriamente.
Privar a Argentina del uso de las Resoluciones en el texto del acuerdo SIGNIFICABA PREJUZGAR EN SU CONTRA.
El Dr. Ros indicó que el Consejo de Seguridad, por el momento, no
aparentaba intención de reunirse, debido a que esperaba el resultado de
la gestión del Secretario General.
Quedó establecido que una
solicitud argentina de convocatoria de la OEA podría significar una
dificultad para la gestión de Pérez de Cuellar.
El Embajador
indicó que, por el momento, no se había establecido la oportunidad de la
próxima reunión, aunque no descartaba que pudiese ocurrir en horas de
la noche.
477. El día l2 de mayo se reunió el Gabinete National.
Los aspectos principales, en lo que hace a la conducción de la política
y de las relaciones internacionales, se indican a continuación:
«Inició la reunión el Excelentísimo Señor Presidente, para referirse al conflicto originado con Gran Bretaña».
«Informó que estamos llegando al momento de mayor confrontación de las
voluntades de ambos países. En esta confrontación, el uso de los medios
con la suma de voluntades es lo que va a dar resultados».
«ESTO TERMINARÁ CON ENFRENTAMIENTO BÉLICO Y, A CABALLO DE ESE ENFRENTAMIENTO, VENDRÁ LA SOLUCIÓN NEGOCIADA».
«Argentina lleva ventajas: estamos en propio territorio y defendemos una causa que consideramos justa en este siglo».
«Por otro lado, tenemos la desventaja de tener un poder militar inferior en la zona de operaciones, en algunos aspectos».
«SINTETIZANDO: ESTAMOS ALCANZANDO LA MAYOR TEMPERATURA EN EL CONFLICTO.
SE TIENE QUE PRODUCIR EL VIOLENTO ENFRENTAMIENTO PREVISTO».
«EXISTE FIRME DECISIÓN DE AFRONTAR ESE ENFRENTAMIENTO YA QUE FUE DEBIDAMENTE RAZONADO».
«En el campo diplomático, con las tensiones propias, seguiremos dentro de la órbita de las Naciones Unidas».
A continuación, el Dr. Costa Méndez expresó:
«l. La propuesta del Gral. Haig no era aceptable, porque incluía autodeterminación de los isleños». (l)
«2. La propuesta del Presidente del Perú fue interrumpida por hundimiento del Crucero General Belgrano».
«3. La propuesta de las Naciones Unidas fue aceptada».
«-El poder de Gran Bretaña y EE.UU. en la ONU está compensado por otros países».
«-En anteriores negociaciones se pensó en 4 Naciones administrando las
Islas. Ahora tratan de eliminar ese grupo de contacto reemplazándolo por
un solo administrador (N.U.)».
«-Las Islas Georgias y Sandwich del Sur están en la misma situación que las Islas Malvinas».
(l) Información incorrecta, ya que la propuesta incluía, en el
parágrafo 7°, la mención de la integridad territorial junto con los
derechos de los habitantes.
«-Otro punto a tener en cuenta es el relacionado con las sanciones económicas».
«-Otro es el retiro de las tropas. Debe ser equilibrado para ambos países».
«-Otra cuestión es que nosotros pedimos que a la misma hora comience todo y termine el 31 de diciembre».
«-Otra actitud incalificable se refiere a la FIC monopó1ica y
colonialista, que tiene el 46% de la tierra, el monopolio de la lana,
las agencias de viaje, los almacenes, los bancos, etc., es decir, todo».
«-Último tema es el de las negociaciones con cláusula del resultado PRE-FIJADO».
«-La solidaridad americana es cada vez mayor. En la CEE hay que influir para que no se renueven las sanciones económicas».
«-En el bloque de los No Alineados, la sorpresa es contar con un gran aliado como Cuba».
478. Durante las conversaciones del día 12 de mayo entre el Canciller y
el Dr. Ros, éste último lo puso al tanto de los últimos comentarios de
la reunión con el Secretario General.
Aparentemente, la propuesta inicial del Secretario General había variado hasta llegar a concretar:
«Las partes se comprometen a emprender, de buena fe, negociaciones bajo
los auspicios del Secretario General, para la solución pacífica del
diferendo, y con sentido de urgencia completar estas negociaciones antes
del 31 de diciembre de 1982, teniendo en cuenta la Carta de las
Naciones Unidas y las resoluciones pertinentes de la Asamblea General de
las Naciones Unidas sobre el tema. Estas negociaciones serán
comenzadas, sin perjuicio de los derechos, las reclamaciones o las
posiciones de las partes, y sin prejuzgar su desenlace».
Aparentemente, también de acuerdo con las últimas declaraciones de la
señora Thatcher, los argentinos no deberían concurrir a las
negociaciones con la convicción de que la soberanía de las Islas les
sería cedida.
479. A1 término de la reunión del Secretario
General, el Embajador Ros informó de su opinión sobre la marcha de las
negociaciones. Su exposición indicaba la resistencia británica para
introducir cambios en su postura tradicional y un clima de detención,
posiblemente originado par la necesidad de efectuar consultas con
respecto a los restantes tópicos. (Anexo V/116).
480. En esos
días, el Embajador Roca informó sobre algunas gestiones que,
aprovechando contactos personales, realizaba el señor Wenceslao Bunge
ante la Embajadora de EE.UU., señora Kirkpatrik.
La mencionada
diplomática viajó a Washington, donde mantuvo una entrevista con el
Presidente Reagan y desde donde se comunica con el Secretario General.
Toda la información sobre las gestiones del señor Bunge en EE.UU.
pueden encontrarse en el Anexo 117, y en la declaración prestada por el
mismo ante esta Comisión (1).
481. En este período, la opinión
pública internacional, motivada por declaraciones de autoridades
británicas y norteamericanas, insistió en mostrar la intransigencia
argentina ante la búsqueda de un acuerdo negociado.
Circunstancias tales como el secuestro de periodistas ocurrido en Buenos
Aires, provocaron, según comentarios de nuestro Embajador en la OEA,
«que la prensa norteamericana haya dado mayor trascendencia a esos
hechos que a las negociaciones que se desarrollan en el marco de las
Naciones Unidas y a las propias acciones bélicas».
482. El 13
de mayo, en la reunión del COMIL, el Canciller informó con respecto a la
marcha de las negociaciones en NU, diciendo que existían avances en el
tema de las «tres banderas», que no se había llegado a decisiones en
cuanto a Consejos, integración de los mismos y comunicaciones, que el
Secretario se mostraba optimista en cuanto a retiro de tropas, que había
indicado la recepción de detalles útiles para la negociación a último
momento.
El Embajador Ros comunicó que todavía no había
contestación respecto del retiro de fuerzas y que, con respecto a
plazos, se presentaría un problema general, si al término del mismo no
se lograba un acuerdo.
El Canciller expresó su opinión,
observando QUE ERA MUY DIFÍCIL QUE GRAN BRETAÑA ACEPTARA ALGUNA
NEGOCIACIÓN O ACUERDO SIN QUE SE PRODUJERA UN NUEVO ENFRENTAMIENTO DE
ENVERGADURA.
483. Después de la reunión efectuada durante la tarde del 13 de mayo,
el Embajador Ros informó, desde Naciones Unidas, del tenor de las
últimas conversaciones mantenidas con el Secretario General.
Los británicos, según Pérez de Cuellar, no habrían emitido respuesta a algunos aspectos importantes. (Anexo 118).
E1 Secretario General consideraba que las negociaciones estaban
extendiéndose demasiado, expresando la necesidad de que las partes
mostraran una mayor celeridad y flexibilidad.
A tal efecto, proponía:
a. Que el día sábado (15 de mayo) las partes le llevaran las ideas sobre cada tema.
b. Que el Secretario General las analizaría y presentaría a continuación una propuesta.
(1) Primeros contactos del señor Bunge con funcionarios norteamericanos
(hasta el 17 de mayo). Más adelante se verán las gestiones del
mencionado, en relación con la propuesta británica del 17-MAY-82.
c. A las 48 horas, las partes debían tener una contestación o, de lo contrario, finalizaría su gestión.
Como puede observarse, el Secretario General parecía dispuesto a ser
enérgico en el logro de una respuesta definitiva de las partes,
independientemente de que la misma pudiese conducir a una solución
rápida y pacífica de la crisis.
484. El día 14 de mayo, el
Embajador Ros puso al tanto al Canciller, mediante un cablegrama (Anexo
119), de la síntesis de las últimas conversaciones sostenidas con el
Secretario General. A las 17:45, el Subsecretario fue citado por el Dr.
Pérez de Cuellar, quien le informó que el Embajador británico viajaría a
Londres inmediatamente, para asistir a una importante reunión donde se
fijaría la posición oficial de Gran Bretaña. El Embajador Parsons
regresaría a Nueva York el día 17 de mayo. Inmediatamente se efectuaron
especulaciones respecto de las connotaciones que el referido desarrollo
de las negociaciones. Este viaje adquiría mayor importancia por cuanto
junto con Parsons viajaría el Embajador británico ante EE.UU., señor
Henderson.
Al día siguiente, el Embajador Ros reunió desde
Nueva York algunas ideas que podrían derivarse del viaje del Embajador
Parsons, en circunstancias tan particulares de la negociación (Anexo
120).
El gobierno argentino consideró conveniente que uno de
los miembros de la Delegación Argentina regresase a Buenos Aires, a
efectos de informar exhaustivamente sobre el desarrollo de las
negociaciones, y al mismo tiempo, pudiese recoger la posición argentina
con vistas a una correcta presentación ante el Secretario General. Al
efecto, viajó el Secretario Garcia Moritán.
485. A las 09:00 horas del 15 de mayo; se reunió el COMIL.
Al respecto, el Canciller destacó los aspectos que interesaban:
a. El viaje a Londres del Embajador Parsons y la consecuente suspensión
temporaria de las negociaciones hasta el 17 de mayo, oportunidad en
que, supuestamente, regresaría a Nueva York con la respuesta británica.
b. El temor circulante entre embajadores acreditados desde años atrás
en Naciones Unidas (como el de España), y amigos de Argentina, en el
sentido de una probable reacción militar británica, quien sustentaba la
teoría de que la misma no resultaría incompatible con las negociaciones.
c. El posible consenso que podría lograr la posición argentina ante una eventual reunión del Consejo de Seguridad.
d. La propuesta sobre la posición argentina que debía ser entregada AL MISMO TIEMPO QUE LA DEL REINO UNIDO.
e. La prolongación de la situación militar imperante en esos momentos
que resultaba favorable a Argentina, puesto que motivaría una reunión
del Consejo y una casi segura modificación del contenido de la
Resolución 502.
f. La situación actual, en la que un retire de
la flota británica era prácticamente descartable, por lo que podía
suponerse que la propuesta británica tendría un contenido inaceptable
para Argentina, situación que la obligaría a su rechazo y justificaría
la escalada militar británica.
Finalizada la exposición del Canciller, el COMIL adoptó las siguientes resoluciones:
a. Tener la respuesta argentina lista y sujeta a las variaciones que
pudiese provocar la situación, para ser entregada a Pérez de Cuellar.
b. Entregar la propuesta el día 17 de mayo, en forma conjunta con la británica.
El COMIL ordenó también que durante la tarde del día 15 de mayo el Equipo Especial de Trabajos analizara la posición argentina.
486. En efecto, durante la tarde del 15 de mayo, el Equipo Especial se
reunió en Cancillería para tratar la posición argentina y establecer las
bases e instrucciones que serían impartidas al Subsecretario Ros para
la presentación de la postura argentina ante el Secretario General, el
día 17 de mayo (Anexo 121).
El COMIL formuló algunas
observaciones al documento inicialmente preparado, por lo que este fue
corregido. Dicho documento tomó forma definitiva el día 16 de mayo,
oportunidad en que quedó listo para ser remitido por intermedio del
Embajador Listre al Embajador Ros, con vistas a su presentación al
Secretario General, de acuerdo con el cronograma que él mismo había
fijado (Anexo 122), y que había sido traído desde Nueva York por el
Secretario García Moritán el día 15 de mayo.
Asimismo, el COMIL
decidió posponer la presentación del documento definitivo (Anexo 123),
hasta no conocer la posición final de Gran Bretaña, a fin de poder
introducir adecuaciones de último momento basadas en el contenido de
esta última.
487. Mientras tanto, en Nueva York se realizó una
reunión informal del Consejo de Seguridad el día 14 de mayo, con la
finalidad de informar a los miembros sobre el desarrollo de las
gestiones del Secretario General. Sobre esta reunión se mantuvo
informado el Canciller, el Embajador Roca (Anexo V/124).
488. El día 16 de mayo, en horas de la tarde, se reunió el COMIL.
En la oportunidad, el Canciller informó sobre la posibilidad de un
próximo ataque británico de grandes proporciones y pasó revista a las
declaraciones vertidas durante los últimos días por las principales
autoridades británicas.
Con respecto a las tratativas ante el
Secretario General, expresó que, de acuerdo con lo previsto, el Dr. Ros
junto con el Dr. Roca habían trabajado sobre la base de tres hipótesis:
a. Podría cumplirse el esquema de trabajo previsto par el Secretario
General de las Naciones Unidas, según el cual una vez obtenida la
respuesta verbal de Gran Bretaña, Pérez de Cuellar requeriría la
presentación por escrito de las posiciones de ambos países para
preparar, sobre la base de ellas, su propuesta. Este escrito sería
entregado a los representantes de ambos países, para que ambos emitieran
su opinión al respecto. Este trámite tendría lugar entre el miércoles y
jueves de la semana en curso.
b. El trabajo de las Naciones
Unidas se iniciaría normalmente, y a lo largo del mismo se produciría un
intento de invasión a las Islas. Para esta hipótesis, la alternativa
pasaría por la convocatoria inmediata del Consejo de Seguridad.
c. Gran Bretaña endurecería su postura y presentaría una propuesta
inaceptable para Argentina, junto con un aumento de la presión militar.
Para este caso, se había concebido la conveniencia de presentar la
posición argentina al Secretario General de la ONU, de tal manera que la
inflexibilidad fuese imputable a los británicos, y convocar luego al
Consejo de Seguridad.
Destacó además que, si bien el Dr. Ros le
había solicitado autorización para presentar la propuesta argentina
anticipadamente, en lo personal no estaba de acuerdo, por cuanto se
privaba a dicha propuesta de las posibles correcciones que pudiesen
derivarse de una posición británica ya conocida.
Escuchados los
comentarios del Canciller, el COMIL decidió destacar a Nueva York al
Embajador Listre para que llevase la propuesta y ésta pudiese ser
analizada en detalle por los Embajadores Ros y Roca, pero,
coincidentemente con lo expresado por el Dr. Costa Méndez, reservaba su
presentación oficial hasta que Gran Bretaña hiciese entrega de la suya.
489. En la mañana del día 17 de mayo, el Embajador británico presentó
ante el Secretario General de las Naciones Unidas, el texto de la
posición británica, según el requerimiento que éste había formulado.
La propuesta británica del 17 de mayo
490.
En efecto, durante la mañana del 17-MAY-82, el Embajador británico ante
Naciones Unidas, de regreso de su viaje a Londres, donde había
mantenido reuniones con el Gabinete de Crisis de Gran Bretaña, hizo
entrega al Secretario General de la propuesta británica para una
solución negociada del conflicto.
CABE DESTACAR QUE ESTE FUE EL PRIMER DOCUMENTO FORMAL PRESENTADO EN FORMA DIRECTA POR EL GOBIERNO DE GRAN BRETAÑA.
Las anteriores manifestaciones referidas a los puntos de vista
británicos en relación con el conflicto, respecto de cuáles ideas podían
ser bien o mal recibidas por las autoridades de Gran Bretaña, sólo
habían sido transferidos al gobierno Argentino a través de expresiones
de intermediarios.
491. E1 día 17 de mayo, a las 15:45 horas de
Nueva York, el Delegado Argentino se reunió con el Secretario General y
éste le hizo entrega formal de la propuesta británica.
Inmediatamente, el Dr. Ros transmitió el contenido de la misma a Cancillería (Anexo 125). Ver copia al final del Capitulo V.
El próximo cablegrama remitido por el Subsecretario Ros reunía el
resultado de su entrevista e incluía comentarios del Secretario General
(Anexo 126).
He aquí el contenido de las principales ideas:
a. El documento británico refleja la posición oficial y DIFÍCILMENTE
PODRÁ SER MODIFICADA, SALVO LOS ASPECTOS MENORES, según opinión del
Secretario General.
b. La estructura del proyecto británico no
se presta a modificaciones, porque la mayoría de los artículos contiene
aspectos difíciles de aceptar.
c. El Secretario General espera
se le haga llegar la posición argentina en el curso del día martes 18 (a
más tardar a última hora de la tarde o en la noche).
d. El
miércoles 19, el Secretario General hará conocer su opinión sobre las
negociaciones y si las dos propuestas lo permiten dará a conocer un
papel propio en forma confidencial.
e. El Dr. Pérez de Cuellar
encuentra las posiciones de las partes más distanciadas de lo que
estaban anteriormente, lo que podrá provocar que no presente un papel
propio, ante el temor de que ninguna de las partes lo acepte.
f. Ante la posibilidad de enfrentar una situación conflictiva, el
Secretario General, posiblemente, se limitará a informar al Consejo de
Seguridad sobre el fracaso de su gestión.
g. El miércoles 19 será la fecha límite para la gestión del Secretario General.
h. El Secretario General ha ofrecido su colaboración para clarificar, en forma permanente, aspectos de su competencia.
i. El Secretario General es pesimista, debido a que comprende las
dificultades de la situación. Señala que cualquier paso, en un sentido u
otro, entraña una decisión político de grave responsabilidad.
j. El Secretario General ve la acción futura del Consejo de Seguridad como muy limitada, debido a un eventual veto.
492. El Embajador Ros, considerando el tenor de la propuesta británica y
siguiendo expresas instrucciones de Cancillería, no hizo entrega al
señor Secretario General del documento argentino preparado para la
oportunidad.
493. El mismo día 17 de mayo, e inmediatamente
después de que Cancillería recibiera la propuesta británica, tanto el
Equipo Especial de Trabajo como el Grupo de la Cancillería se dedicaron a
realizar un análisis detallado del contenido de la misma.
Los aspectos fundamentales contenidos en el documento británico fueron los siguientes:
a. El ámbito geográfico del acuerdo está limitado exclusivamente a las Islas Malvinas.
Con esto, se definía la exclusión de Georgias y Sandwich del Sur
contrariando la posibilidad analizada en los primeros contactos con el
Secretario General respecto del alcance de las negociaciones.
b. Se hacía referencia al Artículo 73 de la Carta, aplicable a los
territorios no autónomos, en clara alusión a la conducción hacia un
gobierno propio (cabe destacar que el texto del artículo 73 se incluía
completo en el preámbulo de la propuesta británica).
c. Por
supuesto, no se mencionaba ninguna resolución de la Asamblea General de
las Naciones Unidas que guardara relación con las Islas.
d. El
artículo 1° de la propuesta establecía que ninguna de las previsiones
del acuerdo o de las actividades que tuvieren lugar mientras estuviese
vigente, servían para prejuzgar sobre el resultado o para reforzar los
derechos de soberanía.
e. Los problemas más serios se
presentaban, quizá, en el artículo 6, ya que virtualmente su redacción;
sumada a otros principios también contenidos en la propuesta, hacía que
la administración británica fuese prácticamente reintroducida en el
archipiélago.
f. En lo relativo a los intercambios futuros
entre las Islas y el territorio continental argentino, se imposibilitaba
cualquier tipo de cambio favorable a la Argentina, ya que se propugnaba
la vuelta a la vigencia del Acuerdo de 1971.
g. El artículo 8°
reiteraba que las negociaciones serían iniciadas sin prejuzgar su
resultado, y fijaban el 31-DIC-82 como fecha de compromiso para
completar las negociaciones.
h. Por último, el artículo 9° prolongaba la vigencia del Acuerdo Interino hasta la firma del definitivo, sin ninguna
consideración limitativa.
494. Con respecto al punto 6° de la propuesta británica (administración
de las Islas en el período interino), resulta conveniente incluir
algunas ideas transmitidas por el Embajador británico al Secretario
General, y que fueron comunicadas por éste al Dr. Ros:
«Secretario General me pidió que esta información sea mantenida
confidencial. Relativo a comentarios hechos a él por los británicos
sobre el artículo 6):
A) Los párrafos 1) y 2) dicen estar inspirados en la Resolución de la Asamblea General acerca de IRIAN OCCIDENTAL (1)
B) El párrafo 3) constituye el máximo esfuerzo posible. Es el que ocasionó mayores debates en Londres;
C) El párrafo 4) sobreentiende que las Naciones Unidas colocarían en
las Islas un contingente de 150 a 200 Cascos Azules, incluyendo tropas
de los EEUU. para vigilar el área;
D) El párrafo 5), para
evitar entren elementos políticos adversos en la administración de las Islas. ROS» (Anexo 126).
495. A Las 11:00 horas del día 18, se insistió en una reunión del
COMIL, con presencia del Canciller y de los integrantes del Equipo
Especial de Trabajo.
El señor Canciller informó al COMIL de los
análisis a los que había sido sometido el documento británico por parte
del personal de la Cancillería y del Equipo Especial de Trabajo,
concluyendo que los aspectos fundamentales del mismo se centraban en los
cambios producidos en el ámbito de la negociación, el mantenimiento de
la administración británica durante el período interino, la importancia
otorgada al contenido del Artículo 73, la desigualdad de oportunidades
para Los nacionales argentinos y el no compromiso en lo referente a
plazas para finalizar Las negociaciones.
496. El Canciller
expresó la conveniencia de girar el tema a la Asamblea General de las NU
para su estudio y resolución, contemplando el caso de que al 30-JUN-83′
no se hubiese alcanzado una solución definitiva.
El Comité Militar aprobó lo sugerido por el Canciller.
Otras resoluciones aprobadas por el COMIL fueron las relacionadas con
la omisión del Artículo 73 de la Carta en la posición argentina y la
insistencia en lograr la igualdad de derechos para los ciudadanos
argentinos, incluido el de la propiedad.
497. Durante el día 18
de mayo se realizaron gran cantidad de intercambios telefónicos entre
el Canciller y el Embajador Ros, en los que fueron tratándose detalles
del contenido de lo que, con posterioridad, constituiría el documento de
la posición argentina, y que sería entregado al Secretario General.
Esta Comisión considera conveniente incluir como Anexo 127, copia de
las grabaciones de las mencionadas conversaciones, para que pueda
seguirse el detalle del contenido de las mismas.
498. El día 18 de mayo, se decidió presentar el documento argentino al Secretario General.
Con respecto al mismo cabe destacar que:
a. El documento no era una respuesta a la posición británica, debido a
que ésta había sido considerada como definitiva y no modificable. Se
trataba del simple enunciado de la posición argentina.
b. La
propuesta demostraría la firma disposición argentina a negociar las
diferencias, o lo que es lo mismo, dejaría ver que la postura argentina
era enmendable.
c. La propuesta debía facilitar la continuación de la gestión del Secretario General.
499. El texto enviado por Cancillería fue recibido por el Dr. Ros. Se
mantuvieron entonces nuevas conversaciones entre ambos funcionarios
destinados a perfeccionar dicho documento y a interiorizar al Dr. Ros
sobre el verdadero espíritu de la posición Argentina (Anexo V/127).
500. E1 texto definitivo de la postura argentina quedó, por fin,
configurado y fue entregado al de las Naciones Unidas a las 18:00 horas;
el texto del documento citado se incluye como Anexo V/128.
Los
fundamentos de la propuesta argentina, hechos públicos por el
Ministerio de Relaciones Exteriores, se incluyen como Anexo V/122.
501. A Las 22:35 horas de Nueva York y ante el insistente requerimiento
de los británicos, el Secretario General solicitó autorización para
transcribir la propuesta a aquéllos. Ante un requerimiento del Dr. Pérez
de Cuellar en el sentido de si podía indicar que dicha propuesta
contenía «ideas», pero no constituía una posición final, el
Subsecretario Ros le respondió «que lo autorizaba a hacerlo, si él lo
consideraba necesario», y «que nuestra posición no era la final, así
como tampoco entendía que la propuesta británica lo fuera».
502. Durante el día 19 de mayo, y en razón de que lo diametralmente
opuesto de las posiciones de las partes impedían al Secretario General,
de acuerdo con la metodología por él establecida, la elaboración de un
documento propio tal que las partes debieran ajustarse, se inició una
serie de conversaciones tendientes a:
a. Por el lado británico, lograr tiempo para el desarrollo de su gestión.
b. Por el lado argentino, enviar a Buenos Aires un funcionario de
jerarquía de Naciones Unidas (Doctor Cordobés) en compañía del Dr. Ros,
para discutir EXCLUSIVAMENTE los 3 puntos de fricción o sea el ámbito de
aplicación del acuerdo, el alcance de la función consultiva del
Administrador de Naciones Unidas y la solución al vacío que se
produciría en caso de no existir acuerdo definitivo al 30-JUN-83.
El único requisito solicitado por Cancillería para el viaje del Dr.
Cordobés era el envío de una misión similar a Londres, puesto que, si
eso no se producía, la posición argentina ante la opinión internacional
sería interpretada como intransigente.
503. En conocimiento de
esta circunstancia, el Canciller creyó conveniente ponerse en contacto
con el Secretario General, para manifestarle personalmente sus
consideraciones al respecto, especialmente en lo referido a la
inconveniencia de que el viaje de un funcionario de jerarquía fuera
unilateral. (Anexo V/130).
504. Durante el día 19 de mayo, el
intercambio de información entre Cancillería y el Jefe de la delegación
Argentina, Embajador Ros, fue particularmente intenso, registrándose
siete intercambios telefónicos entre la mañana y las últimas horas de la
tarde.
Dado lo voluminoso de los detalles tratados, no resulta posible realizar un resumen, pero esta comisión ha creído
conveniente agregar copia de las grabaciones producidas, como Anexo V/131 de este Capítulo.
No obstante lo expresado, existen dos conversaciones particularmente
importantes. La primera de ellas producida luego de una de las
entrevistas mantenidas por el Embajador Ros con el Secretario General,
sirvió para que aquél expresara: «Él (refiriéndose al Dr Pérez de
Cuellar) me adelantó que las negociaciones han llegado a un fin, que los
británicos habían dicho que tenían; deadline; que era el día de hoy y
que las propuestas argentinas no sólo no eran aceptables sino que
tampoco eran enmendables, que a esta altura de las negociaciones ellos
no creían que hubiera más posibilidades de seguir negociando; que
nosotros lo único que queríamos era ganar tiempo y que, en consecuencia,
por ahora tenían que suspender estas negociaciones. «Por ahora» no sé
que quiere significar, pero así lo dijeron. Seguramente, se referirán a
después de la batalla militar. Lo cierto es que hoy a la noche va a
haber una reunión informal del Consejo de Seguridad, a las 9
probablemente, y después va a haber una sesión formal mañana. Hoy
decidirán la hora en que tendría lugar la sesión formal de mañana, en la
que vamos a tener que exponer nosotros y va a quedar abierto el debate a
lo que ocurra».
La segunda, ocurrida luego de las
conversaciones que el Secretario General había sostenido con el
Presidente Galtieri y la señora Thatcher, sirvió para que el Embajador
Ros pudiese llevar a conocimiento del Canciller las nuevas ideas de
Pérez de Cuellar.
Se transcribe, a continuación, el párrafo fundamental de esta conversación:
«El Secretario General; la conversación con el Presidente Galtieri y la
señora Thatcher, se ha sentido suficientemente cómodo como para cambiar
su posición y decirle al Consejo de Seguridad que por ahora le dejen un
margen para seguir operando sobre las bases que conocemos. De modo
pues, que la base es una esperanza, pero él alentó a que no hubiera
reunión del Consejo».
505. Con respecto a la primera
comunicación mencionada en el número anterior, su contenido fue
ratificado mediante un mensaje enviado por el Embajador Ros y cuyo
contenido, por su trascendencia, resulta conveniente reproducir
textualmente:
«Conforme lo adelantado a V.E. mantuve reunión
con Secretario General (1600 horas) quién inició conversación señalando
que representante permanente Reino Unido le había transmitido
verbalmente la posición de su gobierno respecto al papel argentino,
cuyos conceptos transcribe a continuación»:
«1) La referencia
en el Preámbulo al ámbito geográfico con inclusión de Georgias del Sur y
Sandwich del Sur era inaceptable. Asimismo, efectuaron mención al paso
que tampoco podían aceptar la mención específica de las resoluciones de
la Asamblea General».
«2) Punto I.1. merecía misma objeción».
«3) Punto I.2. (retiro de fuerzas) totalmente inaceptable».
«4) Punto III.2.A. tampoco resulta aceptable».
«5) Punto III.2.B. inaceptable porque excluía a la población sus instalaciones y va en contra artículo 73 de la Carta de N.U.»
«6) Punto III.2.C. Inaceptable porque ignora estructuras institucionales».
«7) Punto III.2.D. Consideran constituye un aspecto nuevo».
«8) Punto III.2.E. Objetan igualdad residencia, trabajo y propiedad, porque altera composición demográfica de las Islas».
«9) Punto V. No resulta aceptable porque desapareció mención «sin prejuzgar».
«10) Punto VI. Resulta inaceptable el enfoque y no están de acuerdo con recurso Asamblea General».
«11) Secretario General indicó que atento REINO UNIDO DABA POR
TERMINADAS LAS CONVERSACIONES A PARTIR 12 HORAS, NO ENTRÓ A SOLICITAR
OTROS DETALLES SOBRE REACCIÓN BRITÁNICA A LAS EX PRESAMENTE MENCIONADAS
POR EMBAJADOR PARSONS».
«II – Secretario General resaltó que el
hecho Reino Unido haya dado por terminadas las negociaciones no
implicaba finalización su esfuerzo tendiente encontrar posibilidades
NEGOCIACION. Al respecto indicó voluntad conversar con Presidente
Argentino y si de esa conversación resultaba algún elemento estimulante,
hablaría con el Primer Ministro británico para hacerle saber que aún
podría desarrollarse otro breve esfuerzo. Asimismo, indicó que hablaría
con terceras partes».
«III – Pérez de Cuellar señaló que podría
presentar Memorándum al Consejo de Seguridad informando sobre su
gestión. Al respecto indicó que descartaría avances que se habían
producido en la primera semana y que los mismos no eran recogidos por
las partes en sus respectivas posiciones escritas».
«IV –
Embajador Ros efectuó una detallada síntesis del proceso negociador se
había desarrollado a partir siete de mayo, efectuando referencia a
metodología aplicada, flexibilidad y voluntad negociadora argentina,
intransigencia británica puesta de manifiesto al presentar proyecto
convenio en etapa exploratoria de ideas y falta demostrada de voluntad
para continuar negociaciones».
«V – Al referirse posibilidades
próxima reunión Consejo Seguridad, el Secretario General indicó
dependerá de lo que estén dispuestos aceptar los británicos por su
derecho de veto, agregando estaba analizando posibilidad solicitar que
el Consejo mande a la zona una «font finding mission»- misión
investigadora (Anexo 960.3, cable 15580).»
506. De acuerdo con
lo que había anticipado el Embajador Ros, en horas de la tarde del día
19 de mayo, el Secretario General se comunicó telefónicamente con el
General Galtieri.
A través del desarrollo de la conversación,
que, por supuesto,versó sobre temas de actualidad relacionados con el
desarrollo de su gestión negociadora, el Secretario General expresó,
entre otros aspectos importantes, lo siguiente: en lo que se refiere a
su país como algo verdaderamente muy importante que se había conseguido,
y de una manera ya indiscutida, el no retorno a la situación anterior,
lo que creo yo que, desde el punto de vista de los intereses de su país,
es algo sumamente importante y también por discutir el que es muy
importante, por cierto lo admite, el de la zona geográfica que abarcaría
las disposiciones del acuerdo interino y las negociaciones finales».
«Sé que los británicos consideran que la negociación está terminada
para ellos, pero no está terminada para mí, porque yo, como Secretario
General de las Naciones Unidas no tengo en mira el interés de ninguna de
las partes, sino el interés de la paz; entonces mis esfuerzos deben
continuar mientras haya alguna posibilidad de paz.»
«…yo me
había permitido sugerir la posibilidad de enviar unos funcionarios
nuestros para que discutan, eventualmente con Ud si fuera el caso, esas
fórmulas que nosotros pensábamos que podían resolver los problemas que
están pendientes, que no son tan graves como parecen ser».
Ante un comentario del General Galtieri referido a una posible reunión
de Cancilleres, el Secretario General expresó que se atrevía a pensar
que todavía era prematuro.
507. A las 18:30 del día 19 de mayo se reunió el Comité Militar.
El General Galtieri llevó a conocimiento del organismo su reciente
conversación con el Secretario General de las Naciones Unidas, de
acuerdo con lo que se ha indicado en el párrafo anterior.
El
Canciller, por su parte, indicó que nuestra delegación en Naciones
Unidas había presentado la tarde anterior el papel con la posición
argentina. En el mismo día se había modificado, debido a la posibilidad
de veto británica en el Consejo de Seguridad, al cual se recurriría, en
el caso de no llegarse a un acuerdo al cierre de las negociaciones,
reemplazando al Consejo por la Asamblea General.
Informó,
además, que para ese día estaba prevista una reunión informal del
Consejo de Seguridad para que el Secretario General informara sobre su
gestión. Todo hacía suponer una reunión formal para el día 20 de mayo.
508. Al término de la reunión el Comité Militar decidió no solicitar la
convocatoria del Consejo de Seguridad hasta que no se conociera la
propuesta que presentaría el Secretario General. Se decidió, también,
suspender el viaje del Canciller a Nueva York, hasta recibir el
mencionado documento.
509. Al término de la reunión formal del
Consejo de Seguridad y de acuerdo con la información proporcionada por
delegaciones asistentes, el Dr. Roca envió un cablegrama que contenía
una síntesis de los temas considerados. (Anexo V/132).
Se determinan, a continuación, los temas fundamentales contenidos en el mensaje:
a. El Secretario General informó que había recibido de ambas partes
propuestas de solución y que, si bien no existían coincidencias entre
ellas, consideraba necesario continuar sus esfuerzos y que encontraba
razones como para solicitar una prórroga de horas y que después habló de
uno o dos días.
b. El representante británico manifestó que
efectivamente habían existido esos papeles y las diferencias apuntadas
par el Secretario General, que se abstenía de calificar por no estar
presente la otra parte y que no era optimista acerca de la posibilidad
de zanjar las diferencias, pero que, de todas maneras, era conveniente
aguardar la reunión de su parlamento que tendría lugar antes de una
reunión formal.
c. Diversas delegaciones encomiaron la actitud del Secretario General y se expresaron favorablemente a su solicitud de espera.
La de Irlanda recordó que siempre estaba pendiente su pedido de reunión
del Consejo de Seguridad, pero que aceptaba no fuese tratada en la
reunión que se estaba desarrollando; la URSS dijo que ante las razones
del Secretario General, también adhería a otorgar el plazo, pero como la
materia era responsabilidad del Consejo, debía seguirse muy de cerca la
situación Malvinas, para adoptar en su momento las medidas adecuadas;
Panamá solicitó al Secretario General le aclarara si no era que, ante la
contradicción entre lo manifestado por él y el Embajador británico, no
se estaba negociando con una sola de las partes. El Secretario General
sonrió y el Embajador Parsons no dijo nada.
d. En consecuencia, no se fijó fecha para una eventual reunión de Consejo.
510. E1 día 19 de mayo, a las l9:3O horas el Secretario General citó al
Embajador Ros y le hizo entrega de un documento de compromiso elaborado
por su equipo de colaboradores.
Inmediatamente el Subsecretario hizo llegar el mismo a Cancillería. (Anexo V/133).
E1 texto de cablegrama se iniciaba con un comentario recibido por el
Dr. Ros del Secretario general, el que, por su importancia, conviene
transcribir:
«Al finalizar reunión informativa en el xxxx
Secretario General me entregó privadamente el texto que a continuación
transcribo y que fué elaborado por su staff. A su juicio constituiría un
compromiso que no satisfaría a ninguna de las dos partes pero que
podría ser aceptada por ellas si quisieran evitar la guerra. Al respecto
no pidió respuesta, pero convendría conocer reacción Gobierno Argentino
ante posibilidad nueva conversación con señor Pérez de Cuellar».
511. Recibido el documento en Cancillería, se volcaron rápidamente los
esfuerzos para analizar su contenido y considerar las posibilidades que
ofrecía a la posición fundamental argentina.
El Canciller, al
manifestar telefónicamente al Dr. Ros la imposibilidad de remitir la
opinión argentina hasta tanto el COMIL decidiese al respecto, recibió
del Jefe de la delegación una respuesta que sintetiza el verdadero
espíritu del documento:
«Lo que sí queremos aquí señalar, es
que es un documento que expresa:»o esto o la guerra». Es decir que en el
medio no hay nada más».
Ante la pregunta referida a si el documento podría convertirse, discutirse y hacerle observaciones, dijo:
«Yo creo que no, pero de todos modos, tendríamos que hacerlas».
512. Destaquemos que, mientras el Gobierno argentino estudiaba el Ayuda
Memoria del Secretario General, las autoridades británicas desalentaban
toda posibilidad de que el mismo pudiese conducir a la iniciación de
negociaciones.
El principal argumentado esgrimido por Gran
Bretaña se basaba, como lo había hecho constantemente, en la inexistente
vocación negociadora argentina y en la similitud del contenido del
documento del Secretario General con la propuesta británica del 17 de
mayo por lo que, habiendo rechazado Argentina ésta, no era posible que
aceptase la posición del Dr. Pérez de Cuellar.
Debemos
considerar, además, que el Reino Unido había finalizado concretamente su
posición negociadora el día 19 de mayo y que, ante la propuesta de
continuación efectuada por el Secretario General, estableció la
necesidad de esperar la finalización del debate de su Parlamento,
previsto para el día 20 de mayo.
513. El día 20 de mayo se recibió la segunda propuesta de paz del Presidente del Perú.
Esta resultó, luego de rápidos estudios, aceptable para la República
Argentina, pero debido a la gestión que aún desarrollaba el Secretario
General no le contestó de inmediato al Arquitecto Belaúnde.
Posteriormente, al suspender el Dr Perez de Cuellar su gestión,
Argentina aceptó la propuesta, pero la misma fue rechazada por Gran
Bretaña. En el Anexo V/134 se incluyen los documentos relacionados con
la siguiente propuesta peruana.
514. Pese a que durante los
días 19 y 20 de mayo la posición británica expresada a través de la
prensa internacional y de sus actitudes ante los foros internacionales
indicaban que, desde su punto de vista, el último esfuerzo del
Secretario General no conduciría a término favorable, Argentina evitó al
rechazo de su ayuda memoria y, por el contrario, se encargó de
destacar, por todos los medios a su alcance, el apoyo a su gestión.
515. Mientras en Buenos Aires una reunión del COMIL consideraba la
respuesta que se cursaría al Secretario General respecto de su
documento, este último, en una exposición ante el Consejo de Seguridad,
dio por concluida su gestión. (Anexo V/135).
Algunas gestiones realizadas en EE.UU. durante este período (1)
516.
En Los primeros días de mayo, el Brigadier General Lami Dozo comisionó,
con conocimiento de Cancillería, al señor Wenceslao Bunge, profesional
argentino que había realizado estudios universitarios en EE.UU. para
que, aprovechando sus contactos personales con figuras representativas
del quehacer político norteamericano, en especial la Embajadora
Kirkpatrik, clarificara la posición sostenida por Argentina en el
conflicto.
(1) Declaraciones del señor Bunge, Embajadores Ros, Rota, Takacs y General Mallea Gil.
517. Estas primeras gestiones del señor Bunge tuvieron un resultado
aparentemente positivo cuando, hacia el 16 de mayo, logró que la
Embajadora Kirkpatrick, pese a tener según ella, y por expresas
indicaciones del Secretario de Estado, las manos afuera (the hands off),
se interesara por el tenor de la posición argentina y prometiera
conversar con el Presidente Reagan sobre su contenido. Para eso viajó a
Washington el día 17 de mayo (Anexo V/136).
518. E1 día 18 de
mayo, a primeras horas de la noche, la Embajadora Kirkpatrick manifestó
al señor Bunge su urgencia en tratar la propuesta argentina con el Dr.
Roca antes de su presentación oficial al Secretario General (Debe
aclararse que para esta hora la propuesta argentina ya había sido
entregada).
Dado que la Embajadora todavía se encontraba en
Washington, el señor Bunge hizo contactos con el Dr. Roca
telefónicamente. Ambos resolvieron encontrarse en el Waldorf Astoria de
New York, residencia en esa Ciudad de la Sra. Kirkpatrick, en la
medianoche del día 18 de mayo.
519. Esa reunión se llevó a
cabo, encontrándose presentes los doctores Ros y Roca; el señor Bunge,
la Embajadora y su secretario, el señor Sorzano.
Sobre la base
de los documentos de las partes, los delegados argentinos coincidieron
en expresar que también las diferencias podrían no ser sustanciales;
eran sí importantes.
La Embajadora Kirkpatrick, por su parte, y
con intención de acercar a las partes, modificó personalmente (Anexo
V/137) sobre una copia de la propuesta británica, el preámbulo y el
artículo 6° (3) y (4).
Otro de los argumentos esgrimidos por la
Sra. Kirkpatrick fue el referido al artículo 73 de la Carta, el que,
según su opinión, no podría ser considerado aisladamente sino en
concordancia con los restantes artículos del Capítulo referido a
territorios no autónomos. (Anexo V/138).
520. Los términos de
estas conversaciones pueden expresarse conceptualmente a través de las
manifestaciones de las partes intervinientes.
Así, por ejemplo,
la Embajadora de EE.UU. terminó la conversación expresando (según
comentario del señor Bunge): «Creo que estamos frente a un día trágico y
no veo que más podamos hacer por tratar de evitar esta guerra; pero
creo que están tan cerca las dos posiciones, tan cerca, que creo que
debería darse el ejemplo para resolverlo».
Por su parte, el Dr.
Ros, en su testimonio dijo: «A mí no me cupo duda de que la señora
Kirkpatrick tenía la mejor voluntad hacia nuestro país, pero que su
capacidad de acción estaba muy limitada por el compromiso que el
Gobierno norteamericano ya tenía establecido con el Reino Unido y sus
diferencias con el Secretario de Estado».
521. Cabe destacar
nuevamente que, al momento de producirse esta conversación, la posición
argentina ya había sido entregada al señor Secretario General de las
Naciones Unidas en forma oficial, por el Gobierno de la República
Argentina.
522. Al día siguiente (19 de mayo), la Embajadora
Kirkpatrick volvió a mostrar al señor Bunge la seria preocupación ante
el desenlace previsible, de no poderse modificar la posición de las
partes.
Asimismo le expresó a su interlocutor su deseo de
hablar con el Secretario General para conocer sobre la existencia o no
de tiempo, y luego hizo un análisis de la propuesta británica (al revés
según sus palabras) para determinar que era lo cedido, en definitiva,
por el gobierno británico.
De esta tarea, surgió un listado de
ocho puntos, que la Embajadora llevó a la reunión unforme del Consejo de
Seguridad con la finalidad de «chequearlos» con el Embajador Parsons.
523. Producido el chequeo de los ocho puntos con la inclusión de una
aclaración final efectuada, aparentemente, por el propio Parsons, el
listado fue pasado a máquina por la Embajadora y entregado al señor
Bunge. Este, a su vez, los remitió a Buenos Aires, a través de la
Agregaduría Aeronáutica Argentina en Washington. Simultáneamente fue
informado el Brigadier Lami Dozo (Anexo V/139).
524. Con
respecto al contenido de estos ocho puntos, esta Comisión los ha
analizado detalladamente y expresa la siguiente opinión:
a. Los
ocho puntos surgen del análisis de la propuesta británica efectuado por
la Embajadora de EE.UU. con la intención de comprobar en qué medida se
había modificado la postura inicial de Gran Bretaña.
b. El
contenido de los ocho puntos no presenta NINGUNA MODIFICACIÓN con
respecto al texto de la propuesta británica del 17 de mayo.
c.
Los ocho puntos sólo indican las concesiones británicas, sin hacer
ninguna referencia a los aspectos fundamentalmente divergentes.
525. Aparentemente, las gestiones de la Embajadora Kirkpatrick
continuaron durante los días l9 y 20 de mayo, tratando de obtener una
aceptación argentina a la gestión del Secretario General, basada en su
convencimiento personal de que ese hecho significaba una solución
honorable para las partes y un triunfo diplomático para Argentina (Anexo
V/140).
Aparentemente, también muchas de las ideas sostenidas
por la señora Kirkpatrick se manifestaron a través de la propuesta
(aidememoire) entregada a las partes por el Secretario General el día 19
de mayo.
526. Esta Comisión no considera conveniente analizar
en detalle las ideas presentadas por la Embajadora de EE.UU. atento a
que los aspectos relacionados con la propuesta británica y la no
aceptación argentina se han clarificado precedentemente en este Capítulo
y serán motivo de conclusiones posteriores. Sin embargo, parece
prudente señalar que muchas autoridades argentinas, con intervención
importante en estos episodios, coincidieron en señalar una manifiesta
buena predisposición de la Embajadora hacia nuestro país y hacia América
Latina.
Conclusiones sobre el primer período de negociaciones en Naciones Unidas
527.
Las principales conclusiones que pueden extraerse con respecto a esta
primera gestión de negociaciones adelantadas por el Secretario General
de las Naciones Unidas, son las siguientes:
a. DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL SECRETARIO GENERAL
1) Actuó sin un mandato claro del Consejo de Seguridad, cubriendo funciones que correspondían a ese organismo.
2) Una de las partes era integrante del Consejo de Seguridad y, como
miembro permanente, podía ejercer, en caso necesario, el derecho a veto.
Esto era, obviamente, una seria limitación para la acción del Secretario General.
3) Su gestión según manifestación concreta, se limitó a comunicar las
posiciones entre las partes. Sus intentos personales no contaron con la
aprobación británica, en la medida que limitaban la postura del Reino
Unido que había sido establecida como punto a no ceder.
b. DESDE EL PUNTO DE VISTA BRITÁNICO
1) Mostró permanente renuencia en concurrir ante las Naciones Unidas.
2) En la primera parte de las gestiones se limitó a escuchar.
3) Vulneró la metodología señalada por el Secretario General y el día
17 de mayo no presentó su posición para negociación sino una propuesta
ultimátum (Caracterizada de este modo por la rigidez de los plazos y la
inmovilidad del contenido).
4) Rechazó sistemáticamente los intentos de aproximación argentinos y del Secretario General.
5) Reconoció que la propuesta que presentaba sería casi seguramente inaceptable para Argentina.
6) Manifestó, con su actitud, la inexistencia de flexibilidad en sus
conversaciones y una persistente intención de resolver la cuestión por
vías de hecho.
c. DESDE EL PUNTO DE VISTA ARGENTINO.
1) Se concurrió a este foro por la única alternativa viable,
independientemente de que se descartara la satisfacción de los
resultados a los que podía esperarse.
2) La propuesta británica del 17 de mayo colocó al Gobierno argentino ante una disyuntiva de hierro.
Por un lado la no aceptación, ya fuese en forma directa o por medio de
una contrapropuesta, que significaba elipticamente lo mismo,
REPRESENTABA LA CONSERVACIÓN DE LA GUERRA.
Por otro lado, su aceptación, que presuponía:
a) La pérdida de Georgias y Sandwich..
b) Una vuelta «de oficio» al «status quo ante bellum», ya que, si bien
no se establecía concretamente, LAS BASES DEL ACUERDO NO PERMITIRÍAN
SALIR DE ESO.
c) La continuación de una discusión eterna, en
términos similares en algunos casos y peores en otros, respecto del
status definitivo de las Islas.
d.La no obtención de beneficios
para los nacionales argentinos, significaría una posición inaceptable
para la opinión pública argentina, todavía no sacudida por los golpes de
la guerra, vulneraría las esperanzas colocadas en los beneficios que
reportaría a la posición argentina la necesidad británica de enfrentar
violentamente el potencial militar argentino fortificado en las Islas y,
además, crearía un serio riesgo a la estabilidad política del gobierno
argentino.(1)
(1) La propuesta también contenía algunos aspectos favorables a nuestro país, si bien de proyección no significativa.
3) Debe quedar claro que el gobierno argentino, al rechazar la
propuesta británica del 17 de mayo, independientemente del método
empleado, ACEPTABA LOS RIESGOS DE LA CONFRONTACIÓN (Esto fue
expresamente considerado).
4) Debe quedar claro que el gobierno
argentino, aceptando la propuesta británica del 17 de mayo, HUBIESE
TERMINADO LA GUERRA pero HABRÍA COLOCADO AL PAÍS EN UNA POSICIÓN
DIPLOMÁTICA SEMEJANTE A LA ANTERIOR AL 2 DE ABRIL.
5)
Evidentemente, y de acuerdo con lo indicado en el punto 2), a esta
Comisión no escapa la importancia de la responsabilidad en la elección.
La disyuntiva era el resultado del choque de la posición original
sostenida por las partes y como tal, debió balancearse adecuadamente al
efectuar los estudios previos a la adopción de la resolución..
Entendemos, entonces, que no debe analizarse si Argentina debió o no
aceptar la propuesta británica cuando ésta se materializó el 17 de mayo,
sino considerar si esa situación fue debidamente prevista en los
estudios preliminares. Como sabemos, de acuerdo con lo analizado en
capítulos anteriores, estos estudios no existieron por lo menos con la
amplitud que la decisión requería, y de allí devino la necesidad de
optar entre dos cosas que eran igualmente malas cuando las
circunstancias empujaron a ello.
La continuación de las negociaciones en el ámbito de las Naciones Unidas.
528.
El día 20 de mayo y el COMIL debió prestar atención preferente, en el
ámbito exterior, al análisis de la propuesta del Presidente del Perú,
efectuado por Cancillería y el Equipo Especial de Trabajo, el análisis
de la conveniencia del viaje del señor Canciller a New York, para
intervenir en la reunión próxima del Consejo de Seguridad y para pasar
revista a las noticias remitidas desde EE.UU. por el Embajador Ros,
respecto de las actividades del organismo y las posibilidades argentinas
en dicho foro internacional (Anexo V/141).
529. Durante el día
21 de mayo los intercambios telefónicos entre el Canciller y la
delegación argentina en Naciones Unidas fue particularmente intenso.
El requerimiento fundamental del Dr. Ros estaba referido, ante la
inminencia de la reunión pública del Consejo de Seguridad, a la
recepción de directivas oportunas respecto de la posición que Argentina
debería sostener.
Cabe indicar que tanto Gran Bretaña y EE.UU.
como el mismo Secretario General eran contrarios a una reunión del
mencionado organismo. (Anexo V/142). En su lugar propugnaban la
realización de una reunión privada.
530. Ante este hecho, el
Embajador Ros hizo saber al Presidente del Consejo de Seguridad, que
Argentina se oponía a la mencionada reunión privada y que, en caso de
llevarse a cabo, la delegación argentina se abstendría de participar.
La posición argentina fue hecha pública por el Presidente del Consejo
en una reunión informal y esto motivó que se resolviese efectuar una
reunión pública a las 14:30 horas del 21 de mayo.
531. Ese
mismo día 21 de mayo, reunido el Consejo de Seguridad en sesión pública,
se iniciaron las exposiciones de los diferentes de legados. Como Anexo
V/143 se incluyen las principales exposiciones de la mencionada reunión.
532. En Cancillería, previendo el próximo viaje del Dr. Costa Méndez,
se elaboró una ayuda memoria sobre los posibles cursos de acción a
desarrollar por la delegación argentina ante el Consejo de Seguridad.
(Anexo V/144).
El COMIL decidió ese día el viaje del canciller,
quien sería acompañado por el Equipo Especial de Trabajo a New York, a
efectos de estar presentes en la continuación de la sesión del Consejo.
533. Simultáneamente al desarrollo de los preparativos para la
intervención argentina en Naciones Unidas se actualizaron los estudios
para su eventual y nueva presentación ante la XX Reunión de Consulta de
Ministros de Relaciones Exteriores Americanos y se analizaron las
posibles intervenciones de Perú y Colombia.
534. En el segundo
día de deliberaciones del Consejo de Seguridad ya se encontraba presente
el señor Canciller. Siguieron las exposiciones de los distintos países
anotados (Anexo V/145).
En forma expresa, cabe destacar el
discurso de la delegación de EEUU, especialmente teniendo en cuenta lo
analizado en los párrafos 516 a 526 precedentes, respecto de la posición
de la Embajadora Kirkpatrick relacionada con el conflicto (Anexo
V/146).
535. El día 23 de mayo, el Canciller argentino se
entrevistó con el Secretario General de las Naciones Unidas, reafirmando
la aceptación de la propuesta peruana por parte de nuestro país.
Posteriormente entrevistó al Presidente del Consejo de Seguridad y a los
Cancilleres de Venezuela y Panamá.
536. Mientras tanto, en el
Consejo de Seguridad proseguían las intervenciones de los diferentes
oradores, oportunidad en la que Gran Bretaña debió recurrir varias veces
al derecho de réplica para afrontar las manifestaciones de algunos de
los mismos.
537. El día 23 de mayo, la delegación de Brasil
presentó ante el Consejo un proyecto de resolución (Anexo V/147), el
cual, si bien en términos generales era aceptable para Argentina, no
tuvo acogida favorable en el Organismo.
538. Durante el 24 de
mayo, en el Consejo de Seguridad se continuó analizando el caso del
Atlántico Sur. Varios países presentaron notas al Presidente del mismo,
entre las cuales se puede mencionar la firmada por Argentina, Nicaragua,
Panamá y Venezuela, sobre las sanciones de la Comunidad Económica
Europea, la ofensiva militar británica, y la amenaza al RÍO DE LA PLATA
por parte de Gran Bretaña, y la de URSS en la cual se acusaba al Reino
Unido de abandonar por completo las negociaciones, que Argentina deseaba
continuar. (Anexo V/148).
539. En el seno de la OEA, en
Washington, y en forma paralela, la Delegación Argentina inició
tratativas para la nueva reunión de Ministros de RREE de países
firmantes del Tratado, luego de haber recibido instrucciones
provenientes de Buenos Aires.
La apreciación en cuanto a la
posición de los distintos países, fue sintetizada en el Cablegrama Nro.
1639, remitido por la Delegación Argentina (Anexo V/149).
540.
Durante las gestiones del 24 de mayo, se evidenció el deseo de varios
países acerca de propiciar papeles para lograr una solución eficaz. Los
más estudiados fueron los de Irlanda y los de Japón. Este último sería
efectivizado si fracasaba la gestión de Irlanda. El proyecto de
resolución irlandés (Anexo V/150) fue ampliamente considerado por el
Consejo. Asimismo, fue motivo de análisis de la misión argentina en
Nueva York y transmitido a Buenos Aires.
541. Durante las
sesiones del día 25 de mayo en el Consejo de Seguridad, el Canciller
Costa Méndez hizo uso de la palabra, momento en que atacó duramente la
posición sustentada por Gran Bretaña. En otros foros internacionales se
recibió el apoyo de la República de Argelia, quien por iniciativa propia
movilizaría al Movimiento de Países no Alineados para que durante la
próxima reunión a realizarse en Cuba, adoptara posición solidaria con
las pretensiones argentinas.
542. El día 26 de mayo, sobre la
base del proyecto presentado por Irlanda, el cual había sufrido algunas
modificaciones durante el desarrollo de las reuniones, el Consejo de
Seguridad aprobó por unanimidad la Resolución que llevaría el Nro. 505.
(Anexo V/151).
543. Ese mismo día, el Embajador Arnoldo Listre
asumió la representación permanente de la Delegación Argentina por
enfermedad del Embajador Roca, quien regresó a Buenos Aires.
La segunda ronda de negociaciones bajo la gestión del Secretario General
544.
Como consecuencia de la Resolución 505, el día 26 de mayo, el
Secretario General solicitó a las delegaciones de Argentina y Gran
Bretaña, términos aceptables para un cese del fuego, a los efectos de
compararlos e intentar un acercamiento.
Esta situación motivó
que durante la noche del 26 y la mañana del 27, la delegación argentina
analizara nuevas ideas, de acuerdo con lo solicitado por el Dr. Pérez de
Cuellar; dichas ideas fueron transmitidas junto con las reflexiones del
Equipo Especial de Trabajo a Buenos Aires.
545. El día 27 de
mayo quedó abierta la XX Reunión del TIAR, hasta la obtención de la
Resolución de fecha 29 de mayo (Anexo V/152). Conjuntamente, Argentina
preparaba su intervención en la próxima Reunión de Países No Alineados
que se efectuaría en Cuba.
546. Durante la entrevista del 27 de
mayo con el Secretario General, la Delegación Argentina entregó las
ideas por él solicitadas, las cuales, si bien eran consideradas muy
generales, podían servir de base para nuevos acercamientos.
547. Imprevistamente, una reunión concentrada por el Secretario General y
el Canciller, que había sido solicitada por el primero, fue dejada sin
efecto por el Dr. Prez de Cuellar, sin que mediara algún tipo de
explicación al respecto. Posteriormente, el Secretario General dio las
explicaciones por dicha cancelación.
548. El día 28 de mayo, el
Embajador concurrió a una reunión con el Secretario General. En la
misma el Dr Pérez de Cuellar hizo entrega al Jefe de la delegación
argentina del documento que contenía la posición oficial de Gran
Bretaña, respecto de la gestión en desarrollo.
En esa misma
oportunidad, el Embajador Listre entregó, a su vez, al Secretario
General, el papel que contenía los puntos de vista argentinos.
(Alternativa 2).
Cabe destacar que el contenido de la posición
británica referida al cese del fuego tenía, como aspectos sustanciales,
los siguientes:
a. Para el cese del fuego era obligatorio el retiro de las tropas argentinas en plazo fijo.
b. No se aceptaba la simultaneidad del retiro de tropas.
c. Para considerar el retiro de tropas británicas, debían cumplirse 4 objetivos:
1) Reposesión.
2) Restauración de la administración británica.
3) Reconstrucción.
4) Consulta a los isleños.
Asimismo, en lo referido a la entrega de la alternativa argentina 2 al
Secretario General, dicho documento fijaba la posición oficial argentina
que se presentaría ante el Consejo de Seguridad.
549. E1 29 de
mayo y en el ámbito americano, los Cancilleres de los países firmantes
del TIAR, al finalizar el plenario, aprobaron una resolución la que se
agrega como Anexo V/153.
Dicha resolución fue consecuencia del Proyecto Argentino modificado.
550. l30 de mayo se realizó una nueva reunión de la Delegación Argentina con el Secretario General.
Durante el transcurso de la misma, el Embajador Listre ratificó el
total rechazo argentino a la posición británica, debido a que la misma
carecía de alguna posibilidad de acercamiento. (Anexo V/154).
551. A las 19:00 horas de ese mismo día se reunieron los miembros del
COMIL. El Canciller hizo una detallada exposición sobre la marcha de las
gestiones diplomáticas, realizadas por representantes argentinos en
forma reciente ante diferentes foros internacionales.
Las
principales decisiones del organismo correspondiente a esa fecha fueron
las referidas a la orden que se daría al Embajador Ros en relación con
la posición argentina que debía sostenerse en el Consejo de Seguridad,
el viaje del canciller a Cuba, quien sería acompañado por el Secretario
General de la Presidencia para participar en la reunión de los No
Alineados; aprobando el programa de actividades presentado por
Cancillería; y, finalmente, las gestiones tendientes a facilitar
cualquier intento de intervención de EE.UU., en las negociaciones.
E1 día 31 de mayo se formalizó otra reunión del Comité Militar.
Como era de estilo, luego de escuchar las exposiciones de los
especialistas respecto de los temas de actualidad nacional e
internacional, se adoptaron, en este último campo, las siguientes
decisiones importantes:
a. Se acordó que el retiro debía ser recíproco, aunque podría ser alternado.
b. Se dispuso que, en lo posible, las instrucciones impartidas al Dr. Ros no debían alterarse.
c. Se estableció la denominación de «archipiélagos» o «las Islas» en vez de «LAS MALVINAS».
553. Mientras tanto, ese mismo día el Dr. Ros había recibido, a través
del Secretario General, las condiciones británicas para el cese del
fuego, que ratificaban lo oportunamente informado por el Embajador
Listre.
554. El día 01 de Junio, analizada por la Junta Militar
la marcha de los últimos acontecimientos relacionados con las
negociaciones, se establecieron las instrucciones a ser remitidas al
Embajador Ros, las que ese mismo día fueron transmitidas por el
Canciller, telefónicamente. (Anexo V/156).
555. El mismo día la
delegación argentina volvió a reunirse con el Secretario General y éste
hizo los últimos comentarios respecto de la posición británica en
relación con las últimas ideas que, oportunamente, le había transmitido
al gobierno de Gran Bretaña (Anexo V/157).
En el Consejo de
Seguridad, mientras tanto, el Jefe de la Misión Española informó a la
Delegación Argentina sobre un proyecto de Resolución que intentaría
presentar en forma conjunta con Panamá.
556. Al haber
finalizado el plazo otorgado por el Consejo de Seguridad a través del
contenido de la resolución 505, el Secretario general informó a este
organismo, sobre lo logrado durante su gestión (Anexo V/158).
Producido este informe, el Delegado Argentino y otros miembros del
Consejo hicieron exposiciones relacionadas con la marcha de las
negociaciones. (Anexo V/159)
557. El día 04 de junio España y
Panamá hicieron la presentación ante el Consejo de Seguridad, por nota
Xxxx de un Proyecto de Resolución revisado, en el que pedían a las
partes un inmediato cese del fuego y autorizaban al Secretario General a
comprobar el cumplimiento de la Resolución (Anexo V/160).
558.
Cabe destacar que ante la circulación del proyecto de resolución que
presentarían España y Panamá, los gobiernos de Gran Bretaña y EE.UU., a
través de sus delegaciones, intentaron demorar la adopción de una
resolución definitiva en forma inmediata.
559. En lo que
respecta al gobierno de EE.UU., éste, a través de la Embajadora
Kirkpatrick, mantuvo contacto con una de los integrantes del Equipo
Especial de Trabajo, el Brigadier Miret, en presencia del Secretario
General de las Naciones Unidas, a fin de lograr que el gobierno
argentino suspendiese su convocatoria del Consejo de Seguridad por un
lapso de 24 horas, tiempo durante el cual EE.UU. se esforzaría en
incidir sobre el gobierno de Gran Bretaña para llevarlo a la aceptación
del cese del fuego.
Este requerimiento norteamericano fue aceptado por el gobierno argentino.
560. Mientras esto sucedía en el seno de las Naciones Unidas, el Dr.
Costa Méndez presentaba el detalle de la posición argentina en la
reunión de Los No Alineados, reunión que se llevó a cabo en La Habana.
561. El día O4 de Junio el Proyecto de Resolución Panameño-Español que
ya había recibido algunas modificaciones, fue puesto a votación. El
resultado fue el siguiente:
9 votos a favor (Japón, Uganda,
URSS, Polonia, China, España, Panamá, Irlanda, y Zaire); 2 votos en
contra (Gran Bretaña y EE.UU.) y 4 abstenciones (Guyana, Togo, Jordania y
Francia).
Consiguientemente, y debido al doble veto anglo-norteamericano el proyecto de resolución no fue aprobado.
Se incluye copia de la posición de Gran Bretaña y un resumen de las
opiniones expresadas por los restantes miembros del Consejo de Seguridad
como Anexo V/161.
Resulta particularmente interesante el de EE.UU. de cambiar su veto por una abstención, luego de haber emitido su voto.
562. El día 05 de junio, al término de su reunión, el Movimiento de
Países No Alineados dio a conocer una declaración en la que, dentro de
algunos de sus párrafos, hacia expresa referencia al tema Malvinas
(Anexo V/162).
La última intervención del Secretario General
563.
El día 05 de junio, el Secretario General envió un mensaje al
Presidente de la Nación a través de la Delegación Argentina (Anexo
V/163).
564. El día 06 de junio se reunió el COMIL, momento en
el que trató las últimas novedades relacionadas con el desarrollo de la
situación a nivel internacional. En la misma se decidió enviar
contestación al mensaje recibido de parte del Secretario General (Anexo
V/164), en el que se rechazaba su propuesta, fundamentado en que ello
significaba aceptar un cese de hostilidades que le permitiría a Gran
Bretaña ocupar pacíficamente las Islas.
565. A partir de esta
última gestión del Secretario General, los esfuerzos argentinos se
centraron en la posibilidad de convocar a la Asamblea General de las
Naciones Unidas, en el momento en que se considerara oportuno.
566. El día 11 de junio arribaba a la Ciudad de Buenos Aires, SS el PAPA
Juan Pablo II, en una visita de 48 horas. Dicha visita repercutió en el
seno de las Naciones Unidas de manera tal, que el Secretario General
envió a su delegado personal a Buenos Aires, para alcanzar un mensaje al
Santo Padre. Este hecho se trató de mantener en secreto.
567.El día 14 de junio, cuando ya fue de conocimiento público la
rendición del Gobernador Militar de las Islas Malvinas, los
representantes de los gobiernos de Alemania y Francia mantuvieron
reuniones con el Embajador Listre, a los efectos de buscar un fin al
conflicto de fondo, a través de negociaciones en las Naciones Unidas.
El cierre
568.
El día 16 de junio luego de la reunión del COMIL, quedó presentada ante
el Consejo de Seguridad la posición argentina. El documento que la
contenía fue entregado el día 18 de junio.
Los párrafos principales se agregan como Anexo V/165.
Conclusiones sobre el segundo período de negociaciones en Naciones Unidas
569.
Las principales conclusiones que pueden extraerse con respecto a esta
segunda gestión de negociaciones orientadas por el Secretario General de
las Naciones Unidas, son las siguientes:
a. DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL SECRETARIO GENERAL.
1) Actuó en esta oportunidad con un mandato especialmente otorgado por
el Consejo de Seguridad, a través del artículo 2 de la Resolución 505
aprobada el 26-MAY-82.
2) El derecho a veto, como capacidad de
Gran Bretaña, mantenía latente la dificultad que, por ese lado,
enfrentaba el Secretario General.
3) Su gestión, al igual que
en las primeras negociaciones, se orientó fundamentalmente a comunicar
las posiciones entre las partes en contacto.
4) Su capacidad de
maniobra se vio absolutamente limitada, ya que la postura de Gran
Bretaña era inflexible, sustentada en el avance de sus posibilidades
militares. A su vez, Argentina no podía ceder, sin que su posición
integral se viese totalmente comprometida.
5) La meta de sus esfuerzos se orientó hacia la obtención de un cese del fuego, en condiciones aceptables a las partes.
b. DESDE EL PUNTO DE VISTA BRITÁNICO.
1) Resulta evidente que aceptó esta nueva gestión del Secretario
General con ánimo de no perder espacio político al tener que recurrir al
veto.
2) Con respecto al objetivo de la gestión del Secretario
General cuyo logro era el cese del fuego, Gran Bretaña sostuvo desde el
principio, sin variar absolutamente nada durante la gestión, la idea de
que para ellos era requisito previo y condición fundamental la retirada
de las tropas argentinas de las islas.
3) Su ya evidente
supremacía militar y la predicción sobre el resultado final del
conflicto la llevaron a mantener una posición absolutamente inflexible.
4) Declaró, en más de una oportunidad, que no estaba dispuesta a
otorgar ventajas a Argentina aceptando el cese del fuego, mientras las
tropas de ésta estuviesen en las Islas.
c. DESDE EL PUNTO DE VISTA ARGENTINO.
1) Para Argentina, esta etapa de las negociaciones se inició cuando el
enemigo ya había desembarcado en las Islas. Por lo tanto, más allá del
tiempo que llevara su tarea, era seguro que dicho enemigo lograría
reocuparlas.
La posibilidad de negociación era equivalente al esfuerzo que le demandara a Gran Bretaña esta ocupación.
2) El término aceptable a lograr fue el alto el fuego, y cuanto antes.
Esto supuso iniciar negociaciones de fondo partiendo de la presencia
argentina en las Islas.
3) El espacio de maniobra con que contó
Argentina fue sólo suficiente para lograr resoluciones no comprometidas
en las Naciones Unidas. Además, en caso contrario, Gran Bretaña podía
recurrir al veto, cosa que efectivamente hizo el 04 de junio.
4) Argentina buscó ampliar el espacio político a través de su gestión en otros foros internacionales (TIAR, No Alineados).
Aquí, como lo expresáramos al enunciar las conclusiones de la primera
gestión de negociaciones en el foro de las Naciones Unidas (párrafo
527), nuevamente volvió a presentarse una disyuntiva y una obligación,
como fue la de elegir una opción entre dos que eran igualmente
perniciosas para la Nación. Por un lado, afrontar un esfuerzo militar
frente al cual nuestra capacidad se había mostrado insuficiente contra
un enemigo con decisión y medios para lograr sus objetivos. Por el otro,
la aceptación de un cese del fuego, lo que presuponía una conducta poco
honrosa, una posición posterior desfavorable para las negociaciones y
un enfrentamiento con la expectativa interna por medio de una acción que
seria decepcionante y que, evidentemente, constituiría un serio riesgo
para la estabilidad política del país.
Igualmente, así como
esta Comisión lo considera en las conclusiones anteriores, no nos parece
oportuno señalar las ventajas y desventajas para cada una de las
opciones sino, simplemente, destacar que a ellas se llegó por una
deficiente preparación previa a la decisión adoptada con respecto a la
operación iniciada el 02 de abril.
Conclusiones finales acerca del proceso de las negociaciones a partir del 02 de abril de 1982
570.
Los planes trazados para la ocupación no definieron con claridad el
objetivo político, pero los ex Comandantes y el Canciller declararon que
siempre se pensó en un objetivo limitado, es decir, «ocupar para
negociar». Aceptando como válido este objetivo, de acuerdo con lo
desarrollado en el Capítulo IV, el gobierno militar tuvo diferentes
oportunidades para alcanzar este propósito.
Estas fueron las siguientes:
a. Resolución 502 del Consejo de Seguridad, cuyo cumplimiento era
obligatorio. Su acatamiento nos habría colocado en la mejor posición
para el éxito de las negociaciones (Capítulo II).
b. La
mediación del General Haig, que culminó con la propuesta del 27 de abril
y sobre cuyo contenido se expidió esta Comisión en los párrafos 301 a
401 de este capítulo.
c. La intervención del Presidente del
Perú, cuya breve propuesta, en principio, la Junta aceptó y luego
rechazo par decisión que no habría contado con la aprobación y el
conocimiento del t tal de sus integrantes (párrafos 402 a 426 de este
Capitulo).
d. La propuesta británica del 17 de mayo, canalizada
a través del señor Pérez de Cuellar, que ofreció la última oportunidad
para una salida que no significara la confrontación definitiva y a cuyo
contenido esta Comisión se refiere en los párrafos 490 a 495 de este
Capítulo.
571. Por los antecedentes recogidos, esta Comisión concluye:
a. Desde que se produce el incidente Georgias (23/31-MAR) hasta la
caída de Puerto Xxxxxxxxx Xxxxxx (29-MAY) la Junta nunca estuvo
dispuesta a negociar, en la verdadera y cabal acepción de lo que
significara fijar condiciones desde una posición alcanzada; que se creía
era una posición de fuerza; y que la otra parte debía aceptar.
b. La facilidad de la ocupación sin resistencia y el júbilo popular
ante la reivindicación que erróneamente se interpretó como un vuelco
masivo de la población en apoyo del gobierno, afectó el discernimiento
objetivo de los responsables, que quedaron atrapados por el tono bélico
de sus declaraciones y discursos.
c. Los éxitos de las
operaciones aéreas, aun a costa de las fuertes pérdidas sufridas y la
creencia sostenida de que la defensa terrestre de las Islas era
inexpugnable, los llevó al convencimiento de que los británicos no
podrían soportar este enorme desgaste (Declaraciones del Doctor Costa
Méndez – Informe del General Galtieri al gabinete el 12 de mayo, página
242 Tomo III).
d. Esta idea perduró hasta los días previos al
colapso de Puerto Argentino. Se esperaba que la posición podría soportar
el asedio británico por 72 horas más, plazo éste en el cual el enemigo
se vería obligado a negociar un alto el fuego (Declaraciones del
Almirante Anaya y Vicealmirante Suárez del Cerro).
e. Por lo
menos al iniciarse las operaciones (días previos al 01 de Mayo), el
COMIL, como órgano supremo de la conducción de la guerra, debió
instalase en un lugar fijo durante las 24 horas del día, es decir,
establecer un cuartel general, donde se debía concentrar la información
política y militar, para asegurar su oportuna evaluación y asegurar la
rápida y eficaz emisión de las órdenes. Esto no ocurrió. Los comandantes
tomaron decisiones unilaterales y hubo días en que ni siquiera se
reunieron.
f. Quedaron en evidencia graves fallas en el
«proceso de decisión debidas a la naturaleza colegiada del organismo
supremo – que físicamente estaba disperso – a la interferencia de
asesores cercanos al Presidente y a los compromisos asumidos ante las
distintas fuerzas. No se tomaron decisiones oportunas para aprovechar
propuestas diplomáticas que hubieran revertido una situación militar que
no tenía solución favorable y se tornaba más grave día a día.
Firmas de los militares actuantes.
Documentos importantes agregados
DOCUMENTOS QUE, POR SU IMPORTANCIA, ESTA COMISIÓN HA CONSIDERADO CONVENIENTE INCLUIR DENTRO DEL CUERPO DEL INFORME FINAL.
Propuesta de acuerdo formulada por el gobierno de los EE.UU. el 27 de abril de 1982
Memorando de Acuerdo
Preámbulo
Sobre la base de la Resolución Número 502 del Consejo de Seguridad de
las Naciones Unidas, y de la voluntad de la República Argentina y del
Reino Unido de resolver la controversia que ha surgido entre ellos,
renunciando al uso de la fuerza, ambos Gobiernos acuerdan las siguientes
medidas, que forman un todo integrado.
Párrafo 1
1. A partir de la firma del presente Acuerdo por ambos Gobiernos, se efectuará un cese inmediato de hostilidades.
Párrafo 2
2. A partir de las 00 hora, hora local, del día después del día en que
se firme el presente Acuerdo, y hasta que se logre un arreglo
definitivo, la República Argentina y el Reino Unido, no introducirán ni
delegarán fuerzas dentro de las zonas (en adelante llamadas «zonas»)
definidas por un círculo de 150 millas náuticas de radio desde las
siguientes coordenadas (en adelante llamadas «coordenadas»).
A) LAT. 51º 40´Sur
LONG. 59º 30´Oeste
B) LAT. 54º 20´Sur
LONG. 36º 40´Oeste
C) LAT. 57º 40´Sur
LONG. 26º 30´Oeste
2.1. Dentro de 24 horas después de la fecha del presente Acuerdo el
Reino Unido suspenderá la aplicación de su «zona de exclusión», y la
República Argentina suspenderá operaciones en la misma área.
2.2. Dentro de 24 horas después de la fecha del presente Acuerdo, la
República Argentina y el Reino Unido comenzarán a retirar sus fuerzas,
de conformidad con los siguientes detalles:
2.2.1. Dentro de
siete días después de la fecha del presente Acuerdo, tanto la República
Argentina como el Reino Unido habrán retirado la mitad de sus fuerzas
militares y de seguridad que se encontraban en las zonas en la fecha del
presente Acuerdo, incluso los equipos y armamentos pertinentes. Dentro
del mismo período, la fuerza de tarea Naval del Reino Unido se mantendrá
a una distancia equivalente a siete días de navegación (a 12 nudos) de
cualquiera de las coordenadas, y las fuerzas de la República Argentina
que habrán sido retiradas se colocarán en tal situación que no se podrán
volver a desplegar con su equipo y armamentos en menos de siete días.
2.2.2. Dentro de un plazo de 15 días después de la fecha del presente
Acuerdo, la República Argentina retirará todas sus fuerzas restantes y
las volverá a desplegar en sus áreas normales de operaciones o a sus
tareas ordinarias. Dentro del mismo período, el Reino Unido retirará,
asimismo, de las zonas todas las restantes fuerzas y volverá a
desplegarlas. ¡unto con la fuerza de tareas naval y los submarinos a sus
tareas normales de operaciones o a sus tareas ordinarias.
2.3.
De conformidad con su carta de aceptación de la misma fecha, los
Estados Unidos verificarán el cumplimiento de las disposiciones de este
párrafo y los dos Gobiernos se comprometen a colaborar plenamente con
los Estados Unidos, facilitándoles esta verificación.
Párrafo 3
3. A partir de la fecha del presente Acuerdo, los dos Gobiernos
iniciarán los procedimientos necesarios para poner fin simultáneamente y
sin demoras a las medidas económicas y financieras adoptadas en
relación con la controversia actual, incluidas las restricciones
relativas a viajes; transportes, comunicaciones y transferencia de
fondos entre los dos países. A la vez, el Reino Unido solicitará de la
Comunidad Europea y terceros países que han adoptado medidas similares,
que las den por terminadas.
Párrafo 4
4. Tanto la
República Argentina como el Reino Unido nombrarán un re presentante, y
los Estados Unidos han manifestado su anuencia a nombrar otro, para
constituir una Autoridad Especial Interina (en adelante llamada
«Autoridad») que verificará el cumplimiento de las responsabilidades
establecidas en el presente Acuerdo (a excepción del párrafo 2) y se
encargará de las demás responsabilidades que se le asignen en virtud del
presente Acuerdo o del Protocolo separado relativo a la Autoridad
firmado en esta fecha. Cada representante podrá tener un personal de
apoyo en las islas que no exceda de 10 personas.
Párrafo 5
5.1. Hasta que se llegue a una solución definitiva, todas las
decisiones, leyes y reglamentos adoptados a partir de ahora por la
administración local sobre las islas se someterán a la Autoridad, la
cual las ratificará de manera expeditivo, salvo cuando la Autoridad
considere a dichas disposiciones, leyes y reglamentos incompatibles con
los objetivos y las disposiciones del presente Acuerdo o con su puesta
en práctica. La administración local tradicional continuará salvo que
los Consejos Ejecutivo y Legislativo se ampliarán para incluir:
(A) dos representantes nombrados por el Gobierno Argentino para prestar
servicios en el Consejo Ejecutivo; y (B) representantes ante cada
Consejo, de la población argentina que haya residido en las islas un
período de tiempo igual al que se requiere de otros con derecho a estar
representados, en proporción a su población, sujeto a que haya al menos
uno de dichos representantes en cada Consejo. Tales representantes de la
población residente argentina los nombrará la Autoridad.
Las banderas de cada uno de los miembros integrantes de la Autoridad se izarán en su sede.
5.2. Hasta que se llegue a una solución definitiva, ninguno de los dos
Gobiernos emprenderá acción alguna que fuera incompatible con los
objetivos y disposiciones del presente Acuerdo o su puesta en práctica.
Párrafo 6
6.1. Hasta que se llegue a una solución definitiva, los viajes, el
transporte, el movimiento de personas y, en cuanto que se relacione con
ello, la residencia y la propiedad y enajenación de propiedad, las
comunicaciones y el comercio entre la tierra firme y las islas, se
promoverán y facilitarán sobre una base no discriminatoria. La Autoridad
someterá a la aprobación de los dos Gobiernos medidas apropiadas sobre
tales cuestiones. Estas propuestas se trasmitirán simultáneamente a los
Consejos Ejecutivo y Legislativo con objeto de recabar su opinión. Ambos
Gobiernos se comprometen a responder a la mayor brevedad a dichas
propuestas. La Autoridad vigilará la puesta en práctica de las
propuestas aprobadas.
6.2. Las disposiciones del párrafo 6.1.
en ningún caso se entenderán en perjuicio de los derechos y garantías
que han venido disfrutando hasta ahora los habitantes de las Islas,
especialmente los derechos relativos a la libertad de opinión, culto,
expresión, enseñanza, movimiento, propiedad, trabajo, familia,
costumbres y lazos culturales con los países de origen.
Párrafo 7
7. El 31 de diciembre de 1982 concluirá el período provisional durante
el cuales dos Gobiernos habrán completado las negociaciones sobre la
retirada de las islas de la lista de territorios. No Autónomos con
arreglo al Capítulo XI de la Carta de las Naciones Unidas y sobre las
condiciones mutuamente acordadas para su condición definitiva, Incluida
la debida consideración a los derechos de los habitantes y al principio
de Integridad territorial, de conformidad con los objetivos y principios
de la Carta de las Naciones Unidas, y a la luz de las Resoluciones
pertinentes de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Las
negociaciones antedichas comenzarán dentro de los 15 días siguientes a
la firma del presente Acuerdo.
Párrafo 8
8. Con
objeto de ayudarlos a llevar sus negociaciones a una solución mutuamente
satisfactoria para la fecha estipulada en el párrafo anterior, la
Autoridad, previa consulta con el Consejo Ejecutivo, presentará
propuestas y recomendaciones específicas a los dos Gobiernos tan pronto
como sea posible, Incluidas propuestas y recomendaciones en torno a:
8.1. La manera en que se tomarán en consideración los deseos e
Intereses de los habitantes de las islas, por lo que respecta a las
islas con asentamientos sobre la base de los resultados de un sondeo de
la opinión de los habitantes, realizado con respecto a las cuestiones
objeto de las negociaciones y en la forma que determine la Autoridad.
8.2. Cuestiones relativas a la explotación de los recursos de las
islas, incluidas las oportunidades de cooperación conjunta y el papel de
la Falklands Islands Company; y
8.3. Otras cuestiones que los
dos Gobiernos pudieran solicitar, incluidos los posibles arreglos para
compensar a los habitantes de las islas, o asuntos que la Autoridad
deseara comentar a la luz de sus experiencias en el desempeño de sus
funciones en virtud del presente Acuerdo.
8.4. Los Gobiernos
han convenido en los procedimientos estipulados en el subpárrafo 8.1.
sin perjuicio de sus respectivas posiciones en cuanto a la fuerza legal
que se otorgará a dicha opinión en el logro de una solución definitiva.
Párrafo 9
9. Si los Gobiernos no pudieran concluir las negociaciones para el 31
de diciembre de 1982, los Estados Unidos han indicado que, a solicitud
de ambos Gobiernos, en aquel momento estarían preparados para tratar de
resolver la controversia dentro de los seis meses siguientes a la fecha
de la solicitud, mediante la presentación de propuestas concretas y la
celebración directa de negociaciones entre los Gobiernos sobre la base
de procedimientos que formularán. Los dos Gobiernos convienen en
responder dentro de un mes a cualquier propuesta o recomendación oficial
que les presenten los Estados Unidos.
Párrafo 10
10. Este Acuerdo entrará en vigor en la fecha de su firma correspondiente.
Propuesta de acuerdo interno formulada por el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte el 17 de mayo de 1982
Islas Falkland: Propuesta de Acuerdo Interino
El Gobierno de la República Argentina y el Gobierno del Reino Unido de
Gran Bretaña e Irlanda del Norte, respondiendo a la Resolución 502
(1982) del Consejo de Seguridad, adoptada el 3 de abril de 1982 bajo el
Artículo 40 de la Carta de las Naciones Unidas.
Habiendo
entablado negociaciones mediante. los buenos oficios del Secretario
General de las Naciones Unidas para llegar a un acuerdo provisional
concerniente a las Islas Falkland (Islas Malvinas), que en lo sucesivo
serán denominadas «Las Islas».
Teniendo en mente las
obligaciones en relación con los territorios sin autogobierno
especificadas en el Artículo 73 de la Cauta de las Naciones Unidas, el
texto del cual se anexa al presente.
Han acordado lo siguiente:
Artículo 1
1. Ninguna posición de este Acuerdo Interino deberá perjudicar en forma
alguna los derechos, reclamaciones y posiciones de ninguna de las
partes para el arreglo pacífico final de su disputa sobre las Islas.
2. Ningún acto o actividad que tenga lugar durante la vigencia de este
Acuerdo Interino constituirá base alguna para afirmar, apoyar o denegar
una reclamación en materia de soberanía territorial sobre las Islas ni
dará derecho alguno de soberanía sobre ellas.
Artículo 2
1.Con pleno efecto a partir de una hora específica, 24 horas después de
la firma de este Acuerdo (en lo sucesivo denominado la Hora «T»), cada
una de las partes se compromete a cesar el fuego y, en lo sucesivo,
abstenerse de reiniciarlo o emprender cualquier otra actividad hostil.
2. La Argentina se compromete:
(A) A iniciar el retiro de sus fuerzas armadas de las Islas, lo cual entrará en efecto a partir de la hora «T».
(B) A retirar la mitad de sus fuerzas armadas a cuando menos 150 millas
náuticas de cualquier punto de las islas, a la hora «T» más siete días;
y
(C) A concluir su retirada a cuando menos 150 millas náuticas a la hora «T» más 14 días.
3. El Reino Unido se compromete:
(A) A Iniciar el retiro de sus fuerzas armadas de las Islas, lo cual entrará en efecto a partir de la hora «T».
(B) A retirar la mitad de sus fuerzas armadas a cuando menos 150 millas
náuticas de cualquier punto de las Islas a la hora «T» más siete días; y
(C) A terminar su retirada hasta 150 millas náuticas, cuando menos, a la hora «T» más 14 días
Artículo 3
En forma efectiva a partir de la hora «T», cada una de las partes se
compromete a levantar las zonas de exclusión, las señales de advertencia
y otras medidas similares que se hayan impuesto.
Artículo 4
Una vez que se dé cumplimiento a los pasos especificados en el Artículo
2 para la retirada, cada una de las partes se compromete a abstenerse
de reintroducir fuerzas armadas de cualquier Indole en las Islas o
dentro de un radio de 150 millas náuticas de éstas.
Artículo 5
Cada una de las partes se compromete a levantar, lo cual entrará en
vigor a partir de la hora «T», las medidas económicas que ha tomado
contra la otra y a procurar la cancelación de medidas similares
adoptadas por terceras partes.
Artículo 6
1.
Inmediatamente después de la firma del presente Acuerdo, la Argentina y
el reino Unido suscribirán conjuntamente una propuesta de resolución, en
las Naciones Unidas, bajo cuyos términos el Consejo de Seguridad podrá
tomar nota del presente Acuerdo, reconocerá la función conferida al
Secretario General de las Naciones Unidas por el mismo y autorizará a
éste para llevar a cabo las tareas que en la misma se le confían.
2. Inmediatamente después de la adopción de la resolución mencionada en
le párrafo 1 de este Artículo, un administrador de las Naciones Unidas,
siempre que sea una persona aceptable para la Argentina y para el Reino
Unido, será designada por el Secretario General y actuará como
funcionario encargado de administrar el gobierno de las Islas.
3. El administrador de las Naciones Unidas tendrá la autoridad, bajo la
dirección del Secretario General para asegurar la continuidad en la
administración del gobierno de las Islas. El desempeñará sus funciones
en consulta con las instituciones representativas de las islas que han
sido constituidas en conformidad con las condiciones del Artículo 73 de
la Carta de las Naciones Unidas, con la excepción de que un
representante de la población argentina que normalmente resida en las
Islas será designado por el administrador para cada una de esas dos
instituciones. El administrador ejercerá sus funciones de conformidad
con las condiciones de este Acuerdo y con las leyes y prácticas
tradicionalmente Imperantes en las islas.
4.El Administrador de
las Naciones Unidas verificará el retiro de todas las fuerzas armadas
de las islas y formulará un Método efectivo para asegurarse de que no
serán nuevamente Introducidas.
5. El administrador de las
Naciones Unidas tendrá el personal que, de conformidad con la Argentina y
el Reino Unido, sea necesario para el desempeño de sus funciones bajo
este Acuerdo.
6. Cada una de las partes no podrá contar con más de tres observadores en las Islas.
Artículo 7
A menos que convengan mutuamente en lo contrario, durante la vigencia
de este Acuerdo, las partes deberán reactivar el Intercambio de notas
del 5 de agosto de 1971, y también la Declaración Conjunta sobre
comunicaciones entre las Islas y la parte continental de la Argentina a
la que allí se hace referencia. Las Partes tomarán las medidas
apropiadas para establecer un comité consultivo especial que desempeñe
las funciones encomendadas al Comité Consultivo Especial al cual se hace
mención en la Declaración Conjunta.
Artículo 8
Ambas partes se comprometen a entablar negociaciones de buena fe, bajo
los auspicios del Secretario General de las Naciones Unidas, para el
arreglo pacífico de su disputa y a procurar, con un sentido de urgencia,
la terminación de estas negociaciones el 31 de diciembre de 1982. Estas
negociaciones serán iniciadas sin perjuicio de los derechos,
reclamaciones o posiciones de las partes y sin prejuzgar el resultado
final.
Artículo 9
Este acuerdo provisional
entrará en vigor en el momento de su firma y permanecerá en vigor hasta
que ambas partes hayan llegado a un acuerdo definitivo acerca del futuro
de las Islas y lo hayan puesto en ejecución. El Secretario General
comunicará inmediatamente su texto al Consejo de Seguridad y lo
registrará de acuerdo con el Artículo 102 de la Carta de las Naciones
Unidas.
Aspectos contenidos en las proposiciones de Gran Bretaña y Argentina que fueron considerados por los embajadores de Gran Bretaña y EE.UU. ante las Naciones Unidas el día 19 de mayo de 1982
El Gobierno de Gran Bretaña está de acuerdo en la no reimplantación de la administración británica en las Islas.
2. Están de acuerdo en un corto período de interinato con una fecha específica de finalización de las negociaciones.
3. Están de acuerdo con una administración Interina en las islas por parte de Naciones Unidas.
4.Han abandonado su demanda sobre el reconocimiento por parte de la Argentina respecto a la soberanía británica en las Islas.
5. Están de acuerdo en la retirada paralela de las fuerzas, antes que en la prioridad de la retirada argentina.
6. Están de acuerdo que en el Consejo Consultivo haya dos
representantes argentinos por los 30 residentes y 6 británicos por los
1800 habitantes de esa nacionalidad.
7. Ellos acordaron el control del retiro de las fuerzas por parte de Naciones Unidas, antes que por el Reino Unido.
8. Están de acuerdo con la presenciado un observador argentino.
Comentario efectuado por el Embajador Parson.
Estas concesiones van más allá de lo que muchos habrían imaginado y serán consideradas como una completa renuncia (liquidación, abandono) por muchos miembros de la Cámara de los Comunes.